Vino kosher, más allá de la tradición

Vino kosher, más allá de la tradición

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El renacer del vino kosher: 7 etiquetas españolas que siguen la tradición sefardí

Más allá del ritual religioso, los vinos kosher españoles conquistan paladares con su mezcla de raíces sefardíes y gustos contemporáneos. Es momento de abrir la mente, y el paladar.

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España, tierra de viñas centenarias y de historias que se entrelazan entre surcos y barricas, guarda un secreto a voces: los vinos kosher. Más allá de su halo ritual, estos vinos son el resultado de una filosofía que combina respeto, tradición y una pasión contagiosa por el terruño. Elaborados bajo estrictos protocolos y la atenta mirada de un rabino, el vino kosher es mucho más que una etiqueta: es un puente entre culturas, un homenaje a la memoria y una invitación a descubrir el lado más espiritual del vino.

¿Qué hace especial a un vino kosher? Su proceso, meticuloso y casi ceremonial, exige que, desde la viña hasta la copa, todo esté supervisado por manos judías observantes, siguiendo la ley mosaica. Las uvas se recogen a mano, la bodega se “kosheriza” y cada detalle, desde la limpieza para evitar contaminación hasta la clarificación (que debe ser vegetal o mineral, nunca productos de origen animal), se cuida con mimo. La producción de vino kosher está prohibida en Shabat y en días específicos y, por último, estos llevan un sello de certificación en la etiqueta, garantizando que cumplen con las leyes kashrut.

No, no saben diferente. Las principales diferencias entre los vinos kosher y los vinos tradicionales radican en los procesos de producción, supervisión y los ingredientes utilizados, las propiedades organolépticas son las mismas. Pero es cierto que son vinos que mantienen intacta la pureza del fruto y la honestidad del paisaje, vinos naturales e incluso veganos, que además pueden compartirse en cualquier mesa, sin distinción de credos.

Probar un vino kosher español es abrir una puerta a la diversidad y a la cultura sefardí, sentir cómo la innovación y el respeto por la tierra se dan la mano. Y, sobre todo, es disfrutar de vinos que no buscan etiquetas, sino emociones. Porque, al final, el vino, como la vida, es celebración, encuentro y memoria líquida.

Rabino probando un vino kosher

Rabino probando un vino kosher

España cuenta con bodegas destacadas en la producción de vinos kosher. Son bodegas que han sabido conjugar el respeto por las normas religiosas judías con la excelencia enológica, logrando vinos que trascienden lo ritual para conquistar paladares en todo el mundo. Aquí tienes cinco referencias imprescindibles para adentrarte en el universo kosher nacional.

Clos Mesorah Kosher (Elvi Wines, Montsant)

Un tinto que es pura tradición sefardí. Cariñena, garnacha y syrah se funden en una sinfonía de fruta madura, especias dulces y recuerdos de laurel. Clos Mesorah es la historia de una familia que regresa a sus raíces y lo plasma en un vino elegante, profundo y con alma. Ideal para descorchar en ocasiones especiales, su paso por boca es sedoso, con taninos pulidos y un final que invita a la reflexión. Precio: 62 euros

Flor de Primavera Peraj Ha’Abib (Celler de Capçanes, Montsant)

El kosher más reconocido de España, premiado internacionalmente. Garnacha, cabernet sauvignon, cariñena y tempranillo dan vida a un vino vibrante, con notas de frutos rojos, balsámicos y un toque mineral. Su crianza en roble le aporta complejidad y estructura, pero sin perder frescura. Un imprescindible para entender el potencial de los vinos kosher nacionales. Precio: 29,25 euros

Taanug Anfiteatro (Bodegas Pinord, Priorat)

Priorat en estado puro, pero bajo el prisma kosher. Garnacha, cabernet sauvignon y syrah se expresan con potencia y carácter, mostrando la mineralidad de los suelos de licorella y la intensidad del sol mediterráneo. Un vino robusto, con cuerpo, perfecto para maridar con platos de caza o carnes a la brasa. Sorprende por su equilibrio entre fuerza y elegancia. Precio: 18,60 euros

Frontaura & Victoria Kosher (Frontaura & Victoria, Toro)

Desde Toro, Frontaura & Victoria elabora uno de los primeros vinos kosher del país, que destaca por su intensidad aromática y respeto a la tradición judía. Con una impresionante intensidad aromática y un despliegue de frutas rojas en boca, este tinto no contiene ingredientes “prohibidos” para la comunidad judía y su proceso de elaboración es completamente natural. Precio: 10,90 euros

Tío Pepe Kosher (González Byass, Jerez)

El fino más famoso de España también tiene su versión kosher, elaborado bajo estricta supervisión rabínica y destinado principalmente a la exportación. Es un ejemplo de cómo grandes bodegas tradicionales se han sumado a la producción kosher, adaptando sus procesos sin perder la esencia del producto. Precio: 7,50 euros

Reencuentro Kosher Abocado (Bodegas del Pino, Montilla)

Primera en Córdoba en obtener certificación kosher, Bodegas del Pino produce la línea de vinos blancos y dulces Reencuentro 500 Años Después, bajo la supervisión de la unión de rabinos Jabad Lubavitch de Barcelona. Su apuesta por el mercado internacional ha posicionado sus vinos en Estados Unidos, Israel y diversas ciudades españolas. Su abocado kosher es una combinación de su vino seco y su vino dulce. Un PX fresco con un peculiar amargor persistente y notas de avellana y fruta escarchada. Precio: 12,5 euros

Freixenet Cava Kosher Brut (Freixenet, Alt Penedés)

También hay espumosos con el sello kosher. Este cava tradicional, se ha elaborado con una selección de las mejores uvas blancas de Requena (xarel·lo, parellada y macabeo), buscando una mayor complejidad al aunar en el mismo producto racimos de zonas diversas. Freixenet ha conquistado mercados internacionales, demostrando que las burbujas también pueden ser kosher y de gran calidad. La producción anual es de 60.000 botellas. Ahí es nada. Precio: 7,50 euros