La cocinera Susana Pérez, lo confirma: "El truco para que el rebozado quede crujiente no es el pan rallado ni la harina"

El filete empanado es uno de esos platos aparentemente sencillos que esconden más técnica de la que parece. Conseguir que el empanado quede crujiente, sabroso y poco graso es clave para que el resultado sea realmente perfecto. Porque sí, el éxito de un buen filete empanado crujiente empieza y muchas veces termina, en cómo se elabora su cobertura.

Cuando ese empanado no se hace de la manera correcta, la carne puede resecarse, el rebozado romperse o la fritura quedar aceitosa y desigual. Por eso resultan tan útiles los consejos de Susana Pérez, más conocida en redes sociales como Webos Fritos, bloguera y escritora de 15 libros de cocina con más de 70 recetas cada uno.

A través de su cuenta de Instagram, ha compartido sus claves para lograr un filete empanado impecable. Susana Pérez lo tiene claro, para que el filete empanado quede crujiente y nada grasiento, hay que cuidar cada detalle del proceso. En su cocina, el rebozado comienza con un huevo batido al que se añade una pizca de ajo y perejil machacados en el mortero, aportando sabor.

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El pan rallado, por su parte, se incorpora poco a poco: "no conviene echarlo todo de golpe", advierte. La razón de esto es que "se va manchando con el huevo y deja de hacer su función correctamente", explica.

Otro de sus trucos clave es dejar secar los filetes empanados al aire antes de freírlos. Este gesto simple, pero poco habitual, permite que el pan rallado se reseque ligeramente y aporte ese toque extra de crujiente al freírlos. Además, Susana recomienda usar un pan rallado que no sea excesivamente fino: "Queda más agradable si es un poco grueso pero sin pasarte".

La fritura también tiene su técnica. Nada de sartenes con un dedo de aceite, lo ideal es usar un recipiente con bastante aceite caliente, que luego se puede colar y reutilizar. Y en el momento de freír, conviene mover los filetes lo menos posible. "Una sola vuelta es suficiente para que queden jugosos por dentro y dorados por fuera", afirma.

A diferencia de lo que muchos hacen, ella no los deja escurrir en papel absorbente porque eso los ablanda. Prefiere colocarlos en una rejilla, especialmente si son filetes más gruesos y para mantener la textura crujiente mientras termina de freír el resto.

Con estos trucos sencillos y efectivos, la creadora de contenido demuestra que incluso un plato tradicional como este, puede alcanzar otro nivel con los trucos adecuados.