Una alita de pollo con rebozado crujiente iStock
Sin pan rallado ni harina, así hago un empanado crujiente alto en proteínas: "Es el rebozado perfecto para air fryer"
Cada vez más personas buscan formas de reducir los carbohidratos sin renunciar a los clásicos de siempre, como un buen empanado crujiente. Hoy te contamos cómo hacer uno muy crujiente, alto en proteínas y con cero carbohidratos.
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Después de muchos intentos para lograr un empanado crujiente en freidora de aire sin usar pan rallado ni harina, yo ya tengo claro cuál es mi favorito.
Queda dorado y con mucho sabor. Además, aporta proteínas y una textura crujiente increíble. Se trata de un empanado sin carbohidratos que es perfecto para la airfryer.
Soy consciente de que estamos tan acostumbrados al pan rallado que cuesta imaginar un empanado sin él. Pero existe una alternativa más nutritiva, sin harinas ni azúcares, que queda incluso más crujiente. Son las migas de cortezas de cerdo o migas de torrezno.
Un ingrediente con ventajas nutricionales
Aunque en países como Estados Unidos ya es habitual encontrar pork rind crumbs -así se llaman estas migas en inglés- envasadas, en España la alternativa pasa por triturar torreznos de bolsa hasta conseguir una textura similar al panko japonés.
Esta sencilla operación puede hacerse en cuestión de segundos con un robot de cocina o un molinillo eléctrico. El resultado será una especie de pan rallado grueso y aireado, con un poder crujiente notable y un sabor más rico e intenso.
A diferencia del rebozado tradicional, con pan rallado, cargado de azúcares añadidos, harinas refinadas y conservantes, el rebozado con cortezas de cerdo es completamente libre de carbohidratos.
Además, contiene alrededor de un 50 % de proteínas. Esta combinación no solo lo convierte en una opción más nutritiva, sino también más saciante. Un aspecto que valoran especialmente quienes siguen dietas de control de peso o buscan evitar picos de glucosa.
Otra ventaja clave de este tipo de rebozado es que, al estar hecho a partir de un producto previamente cocinado, no necesita largos tiempos de exposición al calor para dorarse.
Esto es especialmente útil cuando se utiliza una freidora de aire, ya que permite lograr una textura dorada y crujiente sin que el alimento en su interior se reseque o se cocine en exceso.
El resultado es un interior jugoso y un exterior crujiente, ideal para piezas de pollo, pescados blancos o incluso vegetales como la berenjena o el calabacín.
El sabor también juega a favor. Las cortezas de cerdo aportan un punto salado natural que realza el sabor de los alimentos más neutros, como algunas carnes blancas o vegetales suaves.
Y si se desea personalizar aún más el sabor del rebozado, no hay más que mezclar las migas con especias como pimentón, ajo en polvo, orégano o comino, por ejemplo, para obtener distintos matices.
Otra opción es añadir queso parmesano rallado, que al fundirse durante la cocción aporta un acabado más fino y un toque umami adicional.
Desde el punto de vista práctico, las migas de cortezas de cerdo también resultan una solución cómoda. Se pueden preparar en grandes cantidades y conservar durante semanas en un recipiente hermético, siempre que estén completamente secas.
Ingredientes para hacer un rebozado crujiente alto en proteínas y bajo en carbohidratos
- Harina de almendra molida muy fina
- Huevo
- Torreznos de bolsa
- Sal, al gusto
- Pimienta, al gusto
- Alimento que queremos rebozar
Paso 1
Trituramos las cortezas de cerdo en un procesador de alimentos hasta tener una textura más o menos gruesa, similar a la del pan rallado que tengamos costumbre de utilizar.
Paso 2
Batimos los huevos con sal y pimienta
Paso 3
Pasamos el alimento por la harina de almendra, después por el huevo batido y, finalmente, por los torreznos triturados, presionando con la mano para que el rebozado se adhiera lo mejor posible.
Paso 4
Pulverizamos los alimentos con aceite en esprai y los introducimos en la cesta de la freidora de aire que habremos precalentado durante 4 o 5 minutos a 200 ºC.