Los hervidores de agua pertenecen a ese grupo de cacharros de cocina que parece que van a ser un trasto -al fin y al cabo, lo que hace este aparato ya podemos hacerlo con un cazo al fuego o usando el microondas- y, aun así, cuando cae uno en tus manos y le das una oportunidad, acaba siendo un imprescindible. 

Puede ser una gran inversión para cualquier amante de las infusiones y es motivo de felicidad cuando te alojas en un hotel y te encuentras uno en tu habitación. Los usuarios avanzados incluso lo utilizan para cocer huevos o preparar fideos instantáneos, por eso son un clásico en las habitaciones de muchas residencias de estudiantes en las que no hay otras opciones para cocinar.

El único inconveniente que pueden tener es que, incluso los de menor capacidad, son demasiado voluminosos como para que resulte cómodo poder llevarlos con nosotros en caso de ser necesario.

El hervidor plegable

La solución para cocinas pequeñas y para poder llevar el hervidor de agua a la oficina, a un viaje o a donde haga falta es un hervidor plegable. La idea es muy simple y es que el cuerpo del hervidor está hecho de silicona, capaz de resistir el calor y con flexibilidad suficiente como para poder plegarse, lo que facilita su almacenaje y transporte.

El diseño, además, es cómodo porque al tener la boca ancha resulta fácil utilizarlo para otros fines como preparar copos de avena, hacer huevos duros o calentar paquetes de ramen instantáneo. Y, por supuesto, para preparar infusiones y cafés.

Los modelos que hemos encontrado tienen un precio que oscila entre los 20 y los 30 euros, una capacidad de 600 ml y una potencia de 600 W, más que suficiente para calentar agua para dos infusiones en pocos minutos. Los aparatos más sencillos cuentan con un único botón de encendido, pero hay modelos un poco más sofisticados que cuentan con un dial que permite seleccionar algunas temperaturas predeterminadas en función de lo que vayamos a hacer (preparar avena, café, hervir agua, mantener caliente...).

El más compacto de todos los que hemos visto ya que hasta el asa es abatible y puede plegarse sobre la tapa para ocupar menos espacio. Es de los que funcionan con un único botón.

Otro modelo de los más sencillos en un pack con plato y vasos plegables con tapa.

A diferencia de los dos anteriores, este modelo permite seleccionar distintas temperaturas para preparar leche en polvo, copos de avena, café, mantener caliente o llevar el agua a ebullición.