Autor: Redacción de Servicios de comparación financiera
Actualizado: 01/05/2024, 17:08Cada vez son más los españoles que solicitan préstamos personales para sus vacaciones de verano. Según datos de distintas entidades financieras, la demanda de estos productos ha aumentado especialmente después de los dos primeros años de la pandemia, y es una tendencia que sigue al alza.
Solicitar un préstamo personal para financiar las próximas vacaciones de verano puede ser una buena alternativa para disfrutar de un merecido descanso si no dispones actualmente de los medios económicos necesarios para ir haciendo las reservas pertinentes. Pero hay que tener mucho cuidado porque no es recomendable para todos los casos, ya que existe el peligro de que el usuario se endeude por encima de sus posibilidades de restablecer el crédito y que el relax estival se convierta en estrés unos meses después por no poder hacer frente a las deudas.
En el presente artículo te vamos a explicar qué es un préstamo personal, qué aspectos debes tener en cuenta al valorar si debes pedirlo o no para tus vacaciones de verano, los requisitos para solicitarlo o cuándo es el mejor momento para contratarlo, entre otros aspectos.
Los mejores préstamos personales para financiar las vacaciones de verano
¿Qué es un préstamo personal?
Antes de explicar los distintos aspectos que tener en cuenta al pedir un préstamo personal para las vacaciones de verano es importante saber de qué estamos hablando y entender sus particularidades.
Un préstamo personal es un producto financiero por el que un banco presta dinero a un particular bajo unas condiciones que se especifican en un contrato firmado entre las dos partes. A cambio de conseguir ese capital, el cliente se compromete a pagar unos intereses, que serán el beneficio que saque la entidad por el servicio. Además, es posible que también se cobre algún tipo de comisión, como la de apertura.
El usuario irá devolviendo el dinero que le han prestado a plazos, generalmente mensuales. Es decir, todos los meses el banco le cobrará una cantidad de dinero con la que irá restituyendo poco a poco el préstamo personal que le fue concedido.
Los préstamos personales engloban a su vez muchos subtipos de créditos, por lo que es posible encontrar productos ajustados a las necesidades de los usuarios más diversos. Los hay con requisitos exigentes y otros sin apenas condiciones, que dan sumas muy pequeñas y otras más elevadas, con plazos de devolución cortos y largos, e incluso para personas con un mal historial financiero.
Esa variedad hace que el rango de dinero que se pueda solicitar con un préstamo personal sea amplio, de entre 100 y 60.000 euros en muchos casos. Asimismo, los plazos de devolución oscilan entre las pocas semanas y varios años, y los intereses de cada entidad son muy diversos.
Si necesitas ayuda para encontrar el préstamo personal más adecuado para las próximas vacaciones de verano, puedes utilizar nuestro comparador gratuito, que te ayudará a filtrar las distintas opciones y te proporcionará una lista personalizada de los mejores créditos para tu situación económica personal y tus exigencias. Así podrás ahorrar tiempo y esfuerzos.
La anticipación, clave para conseguir un préstamo personal con buenas condiciones
Aunque aún falten algunos meses para las vacaciones de verano de 2024, planificar con cierto margen es siempre una buena idea para conseguir mejores precios, y más si vas a necesitar pedir un préstamo personal para financiar tus días de descanso. Al disponer de bastante tiempo, podrás estudiar con más detenimiento las distintas posibilidades que te ofrece el mercado financiero, encontrar un producto más barato o con plazos más asequibles y alguna promoción que reduzca o incluso elimine los intereses del crédito, lo que beneficiará enormemente a tu bolsillo.
Para que te resulte más sencilla la tarea de rastrear los mejores préstamos personales del mercado para las vacaciones de verano, puedes utilizar, si quieres, nuestro comparador de créditos gratuito. En él podrás especificar la cantidad que necesitas, el plazo de devolución deseado, el fin para el que precisas del dinero y tus posibilidades económicas para restituirlo. El formulario se rellena en menos de tres minutos y accederás inmediatamente a una selección de productos que se ajusten bastante a lo que necesitas, de tal manera que ahorrarás mucho tiempo.
Además, conseguir el préstamo personal que necesitas para financiar tus vacaciones de verano con tiempo hará que puedas acceder a mejores precios de vuelos, en reservas de hotel o apartamentos, en alquiler de coches en el destino o en la compra de distintas experiencias, entre otros. Conforme se van acercando los meses de julio y agosto todos estos servicios se encarecen, por lo que anticiparse y adquirirlas con bastante antelación puede suponerte un importante ahorro, de tal forma que no necesites endeudarte tanto para poder disfrutar de unas semanas de descanso.
¿Es buena idea pedir un préstamo personal para las vacaciones de verano?
Depende de tu situación económica y del dinero que quieras pedir. Endeudarse es un tema muy serio que hay que valorar con detenimiento para cualquier situación, y más para las vacaciones de verano, puesto que no son un gasto urgente o imprescindible como podría ser la reparación del coche que necesitas para ir a trabajar, reformas en el hogar por serios deterioros o facturas médicas por alguna intervención de emergencia.
Lo primero que debes tener en cuenta para decidir si pedir un préstamo personal para las vacaciones de verano o no es tu capacidad para afrontar la deuda en los meses sucesivos sin problemas. Si tus ingresos mensuales te permiten devolver las cuotas del crédito con desahogo en poco tiempo, puede ser una buena alternativa. Sin embargo, si tu falta de liquidez para pagarlas con tus ahorros proviene de la ausencia de suficientes beneficios recurrentes en los últimos tiempos, debido a que te encuentras sin empleo, te han surgido imprevistos financieros o tienes demasiados adeudos, no es recomendable en absoluto que pidas financiación, porque es muy posible que encuentres dificultades para restituirla y el descanso durante el verano se puede convertir después en un dolor de cabeza más.
Asimismo, aunque tengas ingresos recurrentes y suficientes como para afrontar las cuotas del préstamo personal, es muy importantes que el monto de esas mensualidades no sea muy elevado, de tal forma que puedas ir pagándolas con comodidad.
Otro aspecto que debes valorar es la cantidad de plazos que vas a necesitar para devolver el préstamo personal con comodidad. Si necesitas prolongarlos mucho, por varios años, para que la cuota sea asequible, igual es mejor que te lo replantees, puesto que no es conveniente endeudarse por mucho tiempo para financiar las vacaciones de verano. Lo recomendable, de hecho, es liquidar el crédito antes de un año, para afrontar el siguiente periodo estival libre de deudas por si vuelves a necesitar dinero prestado.
Así pues, solicitar un préstamo personal para financiar tus vacaciones de verano de 2024 puede ser una buena opción siempre que tengas capacidad económica suficiente para pagar las cuotas de una forma cómoda y sin aprietos, y establezcas un periodo de restitución corto que te permita librarte de las deudas antes del siguiente periodo estival. En caso contrario, es recomendable que busques otras alternativas, porque a la larga puede traerte más problemas que alegrías.
Aspectos que tener en cuenta al pedir un préstamo personal para las vacaciones de verano de 2024
Si, tras evaluar tu situación personal y tu capacidad económica para afrontar el pago de las cuotas, finalmente decides que vas a pedir financiación para tus vacaciones de verano, es recomendable que prestes atención a una serie de aspectos de los productos de crédito que te interesen para elegir la mejor opción entre todos ellos.
A continuación te explicamos cuáles son los elementos que, como mínimo, debes valorar a la hora de escoger tu préstamo personal:
- Intereses: este es un aspecto capital a la hora de elegir entre un préstamo personal y otro, ya que cuanto más altos sean, más pagarás. Aquí hay que destacar que, al buscar créditos, es normal que en los intereses se den dos tipos de porcentajes, el TIN y el TAE, y entender la diferencia entre ambos es crucial para saber cuánto te va a costar el producto. El TIN (Tipo de Interés Nominal) hace referencia exclusiva a los intereses aplicados por la entidad, sin añadir otros gastos como las comisiones o las vinculaciones. La TAE (Tasa Anual Equivalente), por su parte, incluye todos los costes que pueda tener el instrumento, desde los intereses a las comisiones y las vinculaciones. Por eso es habitual que la TAE sea más alta que el TIN, aunque la cifra también puede ser la misma si el préstamo personal no tiene tarifas adicionales. La TAE, por tanto, es el elemento al que hay que prestar más atención aquí, puesto que es la que informa de una forma más completa del precio total del producto.
- Plazos: el tiempo de restitución que permita el préstamo personal es otro de los aspectos que se deben valorar muy seriamente al elegir entre un producto u otro. Hay algunos créditos que exigen la devolución de la financiación en poco tiempo, mientras que otros ofrecen la posibilidad de hacerlo en varios años. Tendrás que informarte a este respecto y escoger uno con el que puedas fijar plazos que te permita afrontar los pagos con comodidad.
- Importes ofrecidos: existe una amplia variedad de préstamos personales, y cada uno de ellos ofrece cantidades muy diferentes. Hay algunos que no prestan más de 1.000 euros, mientras que otros llegan a conceder hasta 60.000 euros.
- Comisiones: los intereses no son los únicos costes de un préstamo personal, algunos de ellos también tienen comisiones obligatorias, como la de apertura, y todos incluyen comisiones opcionales que sólo se activan en determinados casos, la mayoría de ellas relacionadas con los impagos de las cuotas. Es muy importante prestar mucha atención a las cifras de estas últimas, puesto que suelen ser bastante altas y encarecerán el crédito de forma acelerada de activarse. Aunque pienses que no vas a tener problemas para afrontar tus mensualidades, es recomendable que estés informado de estos posibles costes para saber a lo que te podrías enfrentar si algún contratiempo te impide cumplir con tus obligaciones monetarias.
- Vinculaciones: algunos bancos exigen a los solicitantes de un préstamo personal que contraten algún producto adicional para concedérselo, habitualmente una cuenta corriente en la que se cobrarán las cuotas del crédito, aunque también pueden ser otros instrumentos, como algún seguro. Hay que prestar atención al coste de estas vinculaciones, porque encarecerán el producto. Sobre todo porque muchas entidades no exigen ningún tipo de vinculación, en las cuales el usuario puede hacer los pagos de sus mensualidades desde otros bancos sin problemas.
- Promociones: algunas entidades de crédito activan de vez en cuando promociones por las que rebajan e incluso eliminan por completo los intereses del primer préstamo personal que solicite un cliente nuevo. En general, en estas ofertas los importes ofrecidos no son muy altos y los plazos de devolución son bastante cortos, pero si no necesitas mucho dinero para financiar tus vacaciones de verano pueden ser una muy buena opción para conseguir los fondos que necesitas sin costes o a un precio muy reducido.
¿Qué necesito para pedir un préstamo personal?
Como hemos comentado un poco más arriba, los préstamos personales engloban distintos subtipos de créditos, como los préstamos rápidos o los microcréditos, y todos ellos tienen tanto requisitos comunes como particulares que los diferencian entre sí.
En general, el requisito común más exigente que presentan todos los préstamos personales es que el solicitante pueda demostrar que tiene ingresos mensuales recurrentes y suficientes como para pagar las cuotas del crédito sin problemas. Lo más efectivo en este caso es disponer de una nómina, pues este documento es el que más seguridad da a las entidades, aunque también se pueden usar como justificante certificados de prestaciones públicas (jubilación, discapacidad, desempleo) o la declaración de la renta de los últimos ejercicios fiscales (autónomos).
Para que esos ingresos sean considerados suficientes por la entidad, la cuota del préstamo personal no debe superar el 33% de las ganancias netas mensuales del solicitante. Si el usuario tiene otras deudas, éstas se sumarán al plazo del nuevo crédito para calcular si el nivel de endeudamiento está por debajo de ese 33%. ¿Por qué ese porcentaje? Porque los bancos consideran que por encima de esa cifra el nivel de endeudamiento del cliente es excesivo y su riesgo de caer en impagos se dispara.
Además, las entidades que comercializan préstamos personales también requieren que el usuario les pueda facilitar un documento de identidad válido y en vigor, un justificante de domicilio, un correo electrónico y un teléfono de contacto, y es obligatorio que el interesado resida legalmente en España.
Después, algunos préstamos personales también exigen que el usuario presente un justificante de la finalidad del préstamo, un certificado de los bienes y propiedades que posee el solicitante (a veces para que funcionen como garantía de pago) y otos documentos diversos para comprobar su solvencia. Asimismo, es habitual que se pida al potencial cliente una declaración de solvencia, para que el banco compruebe si tiene deudas impagadas o no.
Como ya hemos mencionado, la variedad de préstamos personales que actualmente existe en el mercado financiero hace que haya algunos créditos con muy pocos requisitos, por lo que si tienes problemas para presentar alguno de los documentos que se te piden siempre puedes acudir a otra entidad con menos condiciones. Pero, eso sí, debes tener en cuenta que cuantas menos exigencias imponga el banco, más altos serán, en general, los intereses de sus productos.
¿Puedo pedir un préstamo personal con ASNEF para mis vacaciones de verano?
Muchas de las entidades que comercializan préstamos personales no aceptan a usuarios inscritos en el archivo público de morosos de la ASNEF (Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito). En este listado aparecen las personas que mantienen deudas vencidas impagadas, a las que un número importante de bancos consideran de alto riesgo por ese motivo.
No obstante, aunque sea algo más difícil, no es imposible que un usuario con ASNEF consiga un préstamo personal, pues algunas entidades están dispuestas a prestar su dinero a este tipo de clientes. Por lo tanto, sí es posible conseguir un crédito para tus vacaciones de verano de 2024 si estás inscrito en el citado fichero público de morosos.
Eso sí, en este caso los requisitos que deberás cumplir son bastante exigentes y los bancos que conceden préstamos personales con ASNEF pueden rechazarte igualmente si consideran que tu riesgo de impagos es elevado. Y es que estas entidades no dan sus créditos indiscriminadamente, sino que aceptan estudiar las solicitudes de usuarios de estas características por si, a pesar de mantener deudas sin pagar, su historial financiero no fuese tan malo como podría parecer a priori al aparecer su nombre en el fichero público de morosos.
Para decidir si conceden su préstamo personal o no a usuarios con ASNEF, estas entidades prestan atención, además de a los requisitos habituales, a tres aspectos fundamentales en relación con el impago: la cuantía del mismo, el número de empresas a las que debe dinero y el sector en el que trabajan esas compañías.
En primer lugar, cuanto más abultada sea la cantidad que se debe, menores serán las posibilidades de que el usuario con ASNEF consiga el préstamo personal. En lo que se refiere al número de empresas con la que mantiene impagos, es mucho más probable que le concedan el crédito si sólo tiene deudas con una compañía.
Por último, el sector al que pertenezca la empresa o empresas con las que mantiene adeudos es de suma importancia. A la ASNEF están asociadas compañías de muy diversa índole, no sólo financieras, por lo que es posible ser inscrito en el archivo por no pagar facturas de la luz, del teléfono o de algún seguro. En estos últimos casos, las entidades pueden estar dispuestas a conceder sus préstamos personales, pero si el impago se mantiene con otro banco será prácticamente imposible conseguir el crédito.
Esto se debe a que las financieras entienden que si el usuario ya ha dejado de pagar las cuotas de otro crédito, nada le impide volver a hacerlo con el préstamo personal que les ha solicitado, motivo por el que lo considerarán de muy alto riesgo y, por tanto, lo rechazarán.
Metodología: ¿cómo clasificamos los mejores préstamos personales?
Durante el mes de mayo 2024 hemos estado estudiando los préstamos personales que ofrecen diversas entidades financieras y recogiendo sus datos para poder analizarlos y hacer un listado con los que consideramos que destacan entre sus competidores. Esta clasificación la creamos teniendo en mente los aspectos que pueden ser más relevantes para los lectores a la hora de escoger un préstamo personal.
Los productos mostrados pertenecen a varias entidades que ofrecen un servicio de calidad y se clasifican según sus características en base a nuestro criterios, aunque son los lectores los que tienen que analizar y decidir si el producto se adapta a sus necesidades antes de contratarlo.
Entre las características que tenemos en cuenta para hacer la clasificación se encuentran:
Cantidad
El importe de dinero ofrecido debe ser suficiente para cubrir el gasto. Los préstamos personales ofrecen cantidades muy variadas, por lo que se ha dado más valor (hasta un 30% del total) a aquellos con un rango amplio de valores.
Plazo
Los préstamos personales tienen plazos de devolución que se ajustan adecuadamente a la cantidad prestada. Se ha puntuado mejor (hasta un 25% del total) aquellos cuyos plazos de devolución son más flexibles.
Intereses
Los préstamos personales que han sido valorados con la puntuación más alta (hasta un 30% del total) en este ámbito son aquellos con unos intereses más razonables. Algunos préstamos tienen una TAE muy elevada y han obtenido peor puntuación.
Otros
Otras características que nos ayudan a valorar a los préstamos personales suponen un 15% del total: la agilidad en sus procesos, la atención al cliente, la fiabilidad y seguridad de la entidad, las comisiones adicionales que puedan aplicar y las condiciones que la entidad pueda requerir.
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