Dos visitantes junto a 'San Juan Bautista' de Juan Martínez Montañés y 'Santa Justa' de Bartolomé Esteban Murillo. Foto: Tamytha Cameron

Dos visitantes junto a 'San Juan Bautista' de Juan Martínez Montañés y 'Santa Justa' de Bartolomé Esteban Murillo. Foto: Tamytha Cameron

Arte

"Un Prado en Texas": el museo de Dallas que tiene una de las colecciones más importantes de arte español

El centro, que estrena directora y acoge una exposición del Museo de Arte Abstracto de Cuenca, esconde lienzos de Velázquez, Murillo o Goya

1 abril, 2023 02:37

El arte español tiene en el Meadows Museum de Dallas su principal centro de estudio y exhibición en Estados Unidos. Crear "un pequeño Prado para Texas" fue el objetivo que llevó al empresario y filántropo Algur H. Meadows a donar en 1962 su colección privada de pinturas españolas (así como fondos para la puesta en marcha de la institución) a la Universidad Metodista del Sur (SMU, por sus siglas en inglés). Tres años después abrió al público el centro, que alberga una de las colecciones de arte español más grandes y completas fuera de España y que hasta el 18 de junio acoge una exposición de pintura y escultura del Museo de Arte Abstracto de Cuenca.

Un museo que antes de la pandemia contaba con más de 50.000 visitantes anuales y que, "igual que muchos otros, todavía no ha recuperado ese nivel", según su nueva directora, Amanda W. Dotseth, nombrada el pasado mes (es la primera mujer al frente del centro, en el que ha trabajado 19 años como conservadora y directora en funciones tras el fallecimiento del anterior responsable, Mark A. Roglán, en 2021). "Seguimos con más de dos tercios de ese registro y observamos que el número de visitantes va subiendo año tras año. Por supuesto, la ampliación de la cantidad de visitantes al museo representa un objetivo importante en el que debemos enfocarnos durante los próximos años", añade.

El núcleo de la colección del Meadows (que abarca desde el siglo X hasta el XXI) fue reunido por su fundador, que forjó su interés por el arte en las diversas visitas que realizó a España en la década de 1950, en las que dedicó muchas tardes a recorrer las salas del Museo del Prado. Comenzó a coleccionar arte español y en 1962, después del fallecimiento de su esposa, realizó la donación que permitió la puesta en marcha del Meadows.

Una actividad en torno a 'La Investidura de San Ildefonso' de Juan de Borgoña. Foto: Kim Leeson

Una actividad en torno a 'La Investidura de San Ildefonso' de Juan de Borgoña. Foto: Kim Leeson

Hasta su muerte en 1978, Meadows, con la ayuda del director del museo, William B. Jordan, promovió activamente el desarrollo de la colección de arte español, en la que hay desde ejemplos del Renacimiento temprano hasta obras de Pablo Picasso, Joan MiróJuan Gris, si bien el periodo mejor representado es el Siglo de Oro con artistas barrocos como Diego Velázquez (del que posee, entre otras obras, Retrato del rey Felipe IV y Retrato de la reina Mariana), Bartolomé Esteban Murillo y José de Ribera.

Francisco de Goya está representado en la colección fundacional por varias pinturas como Patio de locosAlumnos de la academia pestalozziana y Naturaleza muerta con becadas, junto con sus cuatro grandes series de grabados: Caprichos, Desastres de la guerra, Tauromaquia y Disparates.

También hay pinturas de contemporáneos suyos como Vicente López Portaña, y de finales del siglo XIX y principios del XX de artistas españoles que trabajaron tanto dentro como fuera del país: Mariano Fortuny, Raimundo de Madrazo, Joaquín Sorolla, Ignacio Zuloaga.

Exterior del Meadows Museum. Foto: Hillsman Jackson

Exterior del Meadows Museum. Foto: Hillsman Jackson

Gracias a las contribuciones de The Meadows Foundation, donantes y amigos, el Meadows Museum mantiene activo el programa de adquisiciones que inició su fundador. Obras de artistas como Juan Carreño de Miranda, Vicente López, Sorolla, Zuloaga, Francisco Bayeu, Madrazo y Goya han incrementado la colección fundamental de la institución, que trabaja para incorporar a sus fondos artistas nuevos como Alonso Cano, del que posee un Niño Jesús. La colección del siglo XX también se ha visto enriquecida recientemente con obras de Esteban Vicente, Miquel Barceló, Juan Muñoz y Salvador Dalí, cuyo L'homme poisson es el primer óleo sobre lienzo del artista que entra en una colección pública en Texas.

Además de la colección central de arte español, el Meadows también supervisa y administra una colección de escultura moderna de artistas no españoles, originalmente conocida como Elizabeth Meadows Sculpture Garden y que fue un obsequio del fundador a la SMU para honrar a su segunda esposa. Integra obras de artistas como Jacques Lipchitz, Henry Moore, Claes OldenburgAuguste Rodin, Aristide Maillol y Alberto Giacometti.

De Cuenca a Dallas

El Meadows Museum acoge hasta el 18 de junio la primera gran exposición de pintura y escultura abstracta española que tiene lugar en Estados Unidos desde la década de 1970. Titulada Bajo la sombra de la dictadura: la creación del Museo de Arte Abstracto Español, la muestra presenta una amplia selección de lo más destacado del museo creado en Cuenca en 1966 por Fernando Zóbel, dirigido desde 1981 por la Fundación Juan March y cuyo edificio histórico está siendo renovado.

Clarisse Fava-Piz, comisaria de la exposición, junto a una escultura de Eduardo Chillida; de fondo, una pintura de Manuel H. Mompó. Foto: Fundación Juan March

Clarisse Fava-Piz, comisaria de la exposición, junto a una escultura de Eduardo Chillida; de fondo, una pintura de Manuel H. Mompó. Foto: Fundación Juan March

Dallas es la única sede estadounidense de esta exposición itinerante plurianual, que también ha incluido sedes en España y posteriormente en Alemania. Presenta tanto artistas mundialmente reconocidos como Eduardo Chillida, José Guerrero, Pablo Palazuelo, Antonio Saura y Antoni Tàpies como contemporáneos de menor fama, reuniendo más de 40 obras de arte de más de 30 creadores activos en las décadas de 1960 y 1970.

Amanda W. Dotseth considera que "esta sugerente colección de renombre mundial tiene mucho que enseñarnos sobre la historia, el proceso artístico, la colaboración y la materialidad, mostrando la gran diversidad de la abstracción española, desde el informalismo hasta el arte abstracto geométrico". Por su parte, Manuel Fontán del Junco, director de Museos y Exposiciones de la Fundación Juan March y del Museo de Arte Abstracto de Cuenca, define esta exposición como "el sueño común de dos instituciones hecho realidad”. 

Amanda W. Dotseth dialoga con el artista español Ignasi Aballí, que protagonizó una exposición en el Meadows el pasado año. Foto: © Guy Rogers III

Amanda W. Dotseth dialoga con el artista español Ignasi Aballí, que protagonizó una exposición en el Meadows el pasado año. Foto: © Guy Rogers III

Nueva directora, nuevos retos

El Meadows Museum estrena directora en la figura de Amanda W. Dotseth, que lleva casi dos décadas trabajando en la institución, de la que ha sido directora en funciones desde 2021, por lo que afirma que es una labor con la que está "bastante familiarizada". Además de su "larga conexión" con el centro, destaca la "larga amistad" que mantuvo con el anterior director, Mark A. Roglán, y el modelo de gestión que desarrollan: "Somos un equipo pequeño, comprometido y dedicado. Además de conocer bien a las personas que forman parte del museo, estoy en contacto con un patronato al que ya conozco así como la estructura de la universidad (SMU) de la cual formamos parte".

El Meadows, señala la responsable, tiene fijada su programación de exposiciones "hasta 2026 o 2027". La próxima estará dedicada a Joaquín Sorolla, con obras "pertenecientes a colecciones particulares estadounidenses". Comisariada por Blanca Pons-Sorolla, se llevará a cabo en el otoño y forma parte de las actividades del centenario del pintor: "Será una oportunidad única para admirar la calidad e importancia artística de los cuadros de Sorolla normalmente no expuestos en colecciones públicas y una ocasión para subrayar la popularidad que mantiene este influyente artista español en Estados Unidos".

Los retos que el museo se plantea para los próximos años son numerosos: "Aunque hemos recuperado bastante después de las dificultades de la pandemia, seguimos (como todos los museos) peleando por recuperar parte de lo perdido por sus efectos. Siempre nos gusta ampliar la presencia del Meadows tanto a nivel mundial como en Dallas y buscar maneras nuevas para mantener la relevancia para públicos diversos. En especial, queremos continuar construyendo puentes entre el museo y las comunidades múltiples de las cuales formamos parte en nuestra red: la SMU, Dallas, Texas, Estados Unidos, España y otros países".

"Además", añade la responsable, "con la fundación del Instituto Custard para el estudio del arte y de la cultura española, que forma parte del Meadows Museum, estamos aún más motivados para impulsar los esfuerzos en el ramo de la investigación. Con un instituto recientemente creado, el reto es establecer una presencia y alta reputación por la calidad en el mundo académico. Gracias a la posición sólida del museo en este mundo (con publicaciones y estudios importante y rigorosos), contamos con cimientos bien estables, pero todavía nos queda mucho que hacer. En cualquier caso, el objetivo es encontrar el equilibrio entre la continuación del pasado y la innovación del futuro". Dotseth se ve "como el puente entre los dos".

En cuanto al conocimiento que se tiene en EEUU de la pintura española, la experta apunta que "para un público general y no tan especializado en el arte o los museos, los nombres imprescindibles son quizás los más obvios: Picasso, Dalí, Miró. Para un público más o menos interesado en la bellas artes, El Greco, Goya, Murillo y sobre todo Velázquez resultan bastante conocidos. El caso de Sorolla y el de otros artistas de los siglos XIX y XX también son familiares".

"Nuestro objetivo en el Meadows", explica, "es introducir y divulgar el arte español a miles de personas para que puedan valorar su importancia a lo largo de la Historia y más allá de los artistas más conocidos (aunque tenemos obras esplendidas de ellos también). Para nosotros es imprescindible ser capaces de acercar a los aficionados al arte a descubrir algo nuevo, llamativo y relevante".