Copyright (C) 2025 NF/NIEVES FERNÁNDEZ.

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Arte

Muere el artista austriaco Arnulf Rainer a los 96 años, figura clave de la pintura europea de posguerra

Fue pionero de la pintura informal en Austria, donde desarrolló el principio de la sobrepintura que se convertiría en su seña de identidad.

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M. Cantó
Publicada
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El artista austriaco Arnulf Rainer falleció el pasado 18 de diciembre a los 96 años, tal y como ha comunicado su galería en España, Nieves Fernández.

Nacido el 8 de diciembre de 1929 en Baden (Austria), fue una de las grandes figuras de la pintura europea de la posguerra y un pionero de la pintura informal en Austria, donde desarrolló el principio de la sobrepintura que se convertiría en su seña de identidad.

Cofundó el Hundsgruppe en 1950 y desarrolló sus distintivas sobrepinturas, donde aplicaba capas de pintura sobre imágenes existentes, explorando temas de creación y destrucción. La obra de Rainer a menudo profundiza en el subconsciente, reflejando su interés en los sueños y lo místico.

En palabras del museo que lleva su nombre en Baden, su obra entera puede leerse como una larga confrontación con la conditio humana: en especial en sus cruces, donde vida y muerte —o, como él mismo escribió, “la nada contra el todo”— se funden hasta volverse indistinguibles.

Exaltando siempre el lenguaje corporal que implica pintar, Rainer subrayó las primeras formas de expresión humana. En los años setenta empezó a fotografiarse a sí mismo, creando un vínculo entre lo teatral y lo gráfico y acercándose al Accionismo Vienés, al tiempo que expandía su práctica al vídeo y a la pintura gestual con manos y dedos.

Untitled-Botticelli.1998, de Arnulf Rainer. Foto: Galería NF/ Nieves Fernandez

Untitled-Botticelli.1998, de Arnulf Rainer. Foto: Galería NF/ Nieves Fernandez

Interesado en el automatismo y en la voluntad de dinamitar la comunicación convencional para recuperar la riqueza de la expresión humana, basó buena parte de su trabajo en el ocultamiento.

Sobrepintó imágenes de otros artistas y autorretratos hasta conducirlas a la abstracción y al oscurecimiento casi total de las formas.

En ese intento constante de liberarse de sus propias limitaciones, llevó incluso a los lienzos más allá de lo convencional, explorando formatos y soportes que desbordaban la idea clásica de cuadro.

En 1978, Rainer recibió el Gran Premio Nacional de Austria y representó a Austria en la Bienal de Venecia. Participó además en varias ediciones de Documenta Kassel, consolidando así su lugar en la escena internacional.

Entre las instituciones que le han dedicado retrospectivas figuran el Albertina Museum, el Stedelijk Museum, el Guggenheim Museum, la Nationalgalerie, la Kunsthalle de Berna y el Kunstverein de Hamburgo, y su obra forma parte de colecciones como las del Stedelijk, el MoMA de Nueva York, el Ludwig Museum, la Tate Britain, el Metropolitan Museum, el Guggenheim y el Centre Georges Pompidou, entre otras.

​No fue solo un maestro de la sobrepintura, sino también un agudo pensador: sus textos acompañan y explican una búsqueda que amplió los límites de la pintura del siglo XX e inspiró a generaciones posteriores de artistas.