Ni guiso ni ensalada: la cena ligera y deliciosa de un chef con una lata de maíz, en solo 12 minutos y usando solo un bol

Cocinar es un aprendizaje constante, es imposible que llegue el momento en el que no quede nada por descubrir. Pero también sucede que, lo que para unos es un descubrimiento, para otros es un plato tradicional con siglos de historia. Añadir una lata de maíz a un salteado de verduras en vez de a una ensalada es algo que a cualquiera se le podría ocurrir improvisando una cena rápida, pero no estaría inventando nada nuevo.

Existe un plato que se llama succotash, una receta tradicional de la cocina estadounidense con raíces que se remontan a las comunidades indígenas del noreste de América del Norte. Originalmente, era una mezcla de maíz cocido con habas, una combinación sencilla de alimentos disponibles en el entorno, pero también equilibrada gracias a las proteínas de las habas y a la energía que aporta el maíz.

Con el tiempo, se fueron incorporando otros ingredientes como tomate, cebolla, pimientos, mantequilla o algunas carnes. Un plato muy sencillo y muy popular, especialmente en tiempos de escasez, como durante la Gran Depresión, por su bajo coste y la facilidad para adaptarlo a los ingredientes más asequibles.

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Saciante y con pocas calorías: la cena proteica rápida que siempre hacía mi madre cuando llegaba la primavera

La receta rápida de un chef para una cena ligera

Por sus características, el succotash es una opción adecuada para una cena ligera que se puede preparar sin esfuerzo, ya que combina una buena variedad de vegetales con un bajo contenido calórico y un perfil equilibrado de macronutrientes. El maíz dulce y las habitas tiernas aportan carbohidratos complejos, fibra y proteínas vegetales, que ayudan a mantener la saciedad sin provocar digestiones pesadas. Además, las habitas son una fuente interesante de folatos, así como de hierro, magnesio y potasio, nutrientes que desempeñan un papel importante en distintas funciones del organismo.

La receta, que no puede ser más fácil de hacer, es la que propone el chef Tim Anderson en su último libro Cocina con microondas (Libros Cúpula, 2025), un pequeño volumen en el que recopila 60 recetas en las que todo se cocina en este electrodoméstico y una serie de recomendaciones, en mi opinión muy acertadas, para conocer mejor y sacarle el máximo partido al aparato que cada uno tenga en su casa.

Con este libro, Anderson, cocinero de fama mundial tras ganar el MasterChef británico en 2011 y experto en cocina japonesa, aspira a regalarnos tiempo para nosotros mientras el microondas nos prepara la cena. El sueño de muchos en estos tiempos acelerados que vivimos.

Sobre el plato de hoy, el chef explica que, tradicionalmente, se le añade también beicon o carne enlatada y pueden añadirse también legumbres en conserva. Según comenta, a él le gusta añadir también judías verdes. Para darle un toque picante, utiliza un chile Scotch Bonnet, una variedad de pimiento picante del Caribe que se utiliza mucho en la cocina jamaicana. No es fácil de conseguir en España, pero se podría sustituir por una guindilla roja fresca o, en último caso, por algunas cayenas.

Siguiendo con los sabores caribeños, utiliza una especia que es la pimienta de Jamaica que, aunque no es algo que se encuentre en cualquier supermercado, es fácilmente sustituible. En inglés, la pimienta de Jamaica se llama allspice -todas las especias- y su nombre se debe a que su sabor recuerda a una mezcla de canela, clavo, nuez moscada y pimienta negra. Así pues, solo hay que mezclar una parte de pimienta negra molida, con dos partes de clavo, nuez moscada y canela. Esta mezcla tiene muchos usos tanto en platos dulces como salados.

Más recetas para hacer en el microondas

Con más o menos los mismos ingredientes con los que se hace este plato americano, se pueden improvisar otras recetas para preparar cenas en un momento y sin esfuerzo:

• Revuelto vegetal exprés. Batimos un huevo en un bol apto para microondas y añadimos cebolleta picada, maíz dulce, pimiento rojo en dados pequeños y habitas tiernas. Cocinamos durante un minuto, removemos y cocinamos 30 segundos más o hasta que el huevo esté cuajado. Añadimos sal, pimienta negra y una pizca de tomillo al final para potenciar el sabor. Se puede servir directamente en el bol o sobre una tostada.

• Pastel de verduras en taza. En una taza grande batimos un huevo con sal y pimienta, y añadimos una cucharada de maíz, habitas tiernas, pimiento picado y cebolleta. Mezclamos bien y cocinamos en el microondas durante 2 minutos o hasta que esté firme. Al terminar, espolvoreamos con tomillo seco o queso rallado si se desea. Es ideal como desayuno salado o cena ligera rica en proteínas.

• Pisto rápido al microondas. Picamos finamente el pimiento rojo, la cebolleta y un trozo de calabacín, y los mezclamos una cucharada de aceite de oliva, sal y pimienta. Cocinamos tapado en el microondas durante 5 minutos a máxima potencia, removiendo a mitad de cocción. Podemos servirlo como guarnición o base para huevos o arroz.