Un revuelto con huevos y otros ingredientes (Imagen de archivo) iStock
En 15 minutos y rica en proteínas: una cena fácil, barata y deliciosa con 3 ingredientes usando solo una sartén
Una receta saludable que se prepara en un momento y sorprende a todos los que la prueban por primera vez.
Más información: Proteica y ligera: la deliciosa cena con solo dos ingredientes y buena para el hígado que se hace en 15 minutos
- Total: 15 min
- Comensales: 2
La primera vez que probé una receta muy parecida a esta que veremos a continuación estaba a punto de cumplir once años y aún recuerdo la sorpresa y el placer que me causó tal descubrimiento. Solo eran tres ingredientes cotidianos que siempre comía en mi casa, pero que nunca había probado de esa manera.
Han pasado muchísimos años de aquella cena en una casa ajena, pero la receta me ha acompañado durante todos ellos y la sigo disfrutando como esa primera vez. Simplísima de hacer, deliciosa y con todos los adjetivos necesarios para ser una receta que triunfa en 2025, una época en la que, además del sabor, nos interesan los nutrientes. Es rica en fibra, en proteínas y antioxidantes. Una cena ligera perfecta para descansar bien.
Con tres ingredientes y muy ligera
Huevos, cebolla y puerros son los tres ingredientes que, combinados en un delicioso revuelto, permiten preparar un cena ligera y equilibrada en pocos minutos.
Se trata de una mezcla cargada de nutrientes y muy saciante, pero sin generar sensación de pesadez o hinchazón. Los huevos son una fuente excelente de proteínas de alto valor biológico, lo que significa que contienen todos los aminoácidos esenciales que nuestro cuerpo necesita. Según explica la Fundación Española de la Nutrición, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) toma la proteína del huevo como término de referencia para definir la calidad de este macronutriente, Además, aportan grasas saludables, en especial si se cocinan con aceite de oliva virgen extra, y son ricos en vitaminas como la B12, la D y la colina, un nutriente esencial para la función cerebral.
El puerro y la cebolla no solo añaden un sabor riquísimo y una textura muy jugosa al plato, sino que también lo enriquecen con una buena cantidad de fibra, un nutriente que favorece la digestión y contribuye a la sensación de saciedad. Además, estos vegetales contienen compuestos sulfurados que tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, ayudando a proteger nuestras células del daño oxidativo y reforzando el sistema inmunológico.
Para cocinar estos tres ingredientes principales, se utiliza una pequeñísima cantidad de aceite de oliva virgen extra, que aporta ácidos grasos monoinsaturados beneficiosos para la salud cardiovascular. Este tipo de grasa ayuda a reducir el colesterol LDL (el que, en términos coloquiales, se conoce como colesterol "malo") y a aumentar el colesterol HDL (el que conocemos como colesterol "bueno") y, en consecuencia, podría prevenir la aparición prematura de enfermedades del corazón. También contiene polifenoles y vitamina E, que son micronutrientes con efectos antioxidantes.
En cuanto al contenido calórico, que es un aspecto importante para muchas personas, esta receta es baja en calorías y adecuada para la mayoría de las dietas. Si se acompaña con una rebanada de pan integral y una ensalada de hojas verdes con un aliño ligero, puede convertirse, incluso, en un menú completo para la comida principal del día.
Ingredientes para hacer un revuelto de cebolla delicioso
- Huevos, 4 ud
- Puerro grande, 1 ud
- Cebolla grande, 2 ud
- Aceite de oliva virgen extra, 2 cucharadas
- Sal, al gusto
- Pimienta negra molida, al gusto
Paso 1
Lavamos bien el puerro para retirar cualquier resto de tierra y lo cortamos en rodajas finas, utilizaremos también la parte verde si está no es muy fibrosa. De lo contrario podemos guardar la zona más dura en el congelador para añadirla a algún caldo que vayamos a preparar en el futuro. Pelamos las cebollas y las cortamos en tiras finas.
Paso 2
En una sartén grande, calentamos el aceite de oliva virgen extra a fuego medio. Añadimos la cebolla y el puerro y los cocinamos con una pizca de sal y los pochamos a fuego lento, removiendo de vez en cuando, hasta que estén bien pochados y caramelizados, esto tardará de 10 a 15 minutos dependiendo de lo finos que hayamos hecho los cortes.
Paso 3
Mientras se pochan las verduras, cascamos los huevos en un bol y los batimos con una pizca de sal y pimienta negra molida al gusto.
Paso 4
Cuando la cebolla y el puerro estén tiernos y ligeramente dorados, reducimos el fuego al mínimo e incorporamos los huevos batidos en la sartén.
Paso 5
Cuajamos el huevo removiendo suavemente con una espátula de silicona o una cuchara de madera, a fuego lento para obtener una textura cremosa. Continuaremos removiendo hasta que alcancen el punto de cocción deseado, pero debemos evitar que se sequen demasiado.
Paso 6
Cuando estén listos, retiramos del fuego y servimos de inmediato. Están buenísimos solos o sobre una tostada de pan.
Variantes rápidas de la receta
Con esta misma combinación de ingredientes podría prepararse una tortilla que está tan buena que al eterno debate sin consenso acerca de si está más rica la tortilla de patata con o sin cebolla, habría que introducir a una tercera en discordia, porque seguro que, después de probar ésta, más de uno puede que prefiera la tortilla sin patatas.
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En versión revuelto, es también una receta versátil que permite añadir algunos ingredientes adicionales, algo ideal para hacer limpieza de algunos alimentos que estén "sufriendo" en nuestra nevera. Le quedan bien unas cuantas hojas de espinacas frescas, unas tiras de pimientos del piquillo asados, unas judías verdes cocidas, unas setas o champiñones laminados. Todos ellos aportarán, además, una dosis extra de fibra y nutrientes.
