Restaurante Barraca.
El restaurante en primera línea de playa de Barcelona especializado en arroces y cocina mediterránea
Barraca es una joya dentro del grupo Somos Esencia, una familia gastronómica con más de tres décadas de historia en Barcelona.
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La Barceloneta es punto de encuentro de turistas, paseantes, bañistas y también gente deseosa de disfrutar un buen arroz a pie de playa. Entre las muchas opciones donde caer puede ser el peor de los errores, hay otras tantas que bien merecen echar la tarde.
Y uno de ellos es Barraca: un restaurante que captura la esencia de la cocina mediterránea, con maestría y respeto por el producto, a partir de una propuesta centrada en arroces cocinados al Josper o a la brasa.
El arroz como protagonista
En Barraca, el arroz es sin duda el plato fuerte del menú. Desde recetas tradicionales hasta creaciones que se salen del guion, como el arroz de pulpo, el de ternera con tuétano y pimientos del piquillo confitados o el como el arroz de lubina, navajas y tomate seco.
El arroz con marisco de Barraca.
Todos ellos con máximo respeto por el punto exacto del grano y potencia los sabores del mar y la tierra. Combinan la técnica precisa con ingredientes frescos, muchos de ellos provenientes directamente de la lonja.
La cocina de Barraca es abierta al comensal, en su empeño por mostrar transparencia y confianza absoluta en el proceso culinario. Ver cómo el equipo trabaja sobre el fuego, controlando la brasa y el tiempo con precisión casi quirúrgica, no añade solo un poquito de show, también valor.
Más allá del arroz
Aunque los arroces son la estrella, la carta de Barraca es amplia y bien curada. Lo mejor para repetir y volver siempre que el apetito lo reclame.
Sus croquetas caseras de bogavante, cremosas y con sabor a mar concentrado, son un imprescindible. A esto se suman pescados como el rodaballo al pilpil o la merluza del día, y opciones cárnicas como un jugoso entrecot de ternera de 300 gramos o una hamburguesa gourmet de 180 gramos.
Pescados frescos para completar la propuesta de Barraca.
Todo está pensado para compartir, para disfrutar sin prisas, que para eso nos hemos desplazado a la playa. Como dicta la buena mesa mediterránea: buen producto, buena compañía y un entorno que acompaña.
Una experiencia gastronómica con vistas al mar
Con 320 m² distribuidos en dos plantas diáfanas, el restaurante combina interiorismo cálido y natural con una terraza que roza la arena del mar. Madera, colores como el blanco, aguamarina y verde oliva, y una sala bañada por la luz natural hacen que convierten cada comida en una pequeña escapada al Mediterráneo más puro.
La barra de cócteles añade un toque festivo y moderno, perfecta para alargar la sobremesa o iniciar la velada al atardecer estos días que ya saben a verano.
Se podría decir que Barraca es una joya dentro del grupo Somos Esencia, una familia gastronómica con más de tres décadas de historia en Barcelona. Con restaurantes tan reconocidos como Tierra Brava, Agua o GatoPardo, este grupo ha sabido construir una identidad sólida basada en la calidad del producto, la calidez del servicio y una conexión honesta con sus clientes.
