
Uno de los carteles que pueden verse en las mesas del bar.
El bar de Barcelona que aumenta el precio del café cuanto más tiempo pasas en la terraza
Los clientes pueden llegar a pagar 4 euros por un café con leche si tardan una hora en tomárselo.
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Parece una noticia de El Mundo Today, pero es totalmente cierto: un bar de Barcelona encarece el precio del café en función del tiempo que el cliente pasa en la terraza. A más minutos, más dinero. La realidad, a veces, supera la ficción.
Un cartelito pegado a las mesas del establecimiento advierte de esta distópica medida: el precio 'base' de un café con leche, un americano o un cappuccino es de 1,60 euros, pero si tardas más de media hora en tomarlo, asciende hasta 2,50 euros. Y si te apetece estar más de una hora, la cuenta sube a ¡4 euros! Por su parte, un cortado puede pasar de 1,40 a también 4 euros; un café solo, de 1,30 a 4; y un té de 2 euros a otros 4.
La política la ha comenzado a aplicar el Caffè Perfetto (Plaça de la Barceloneta, 2), un local ubicado en el barrio de la Barceloneta, a pocos metros del mar; uno de los más turísticos de la ciudad.
A la Barceloneta si vols un cafè te l’has de prendre en menys de 30 minuts. pic.twitter.com/kJd0dsXjVv
— Maria (@maria_lostia) May 4, 2025
Según ha comentado Massimo, el dueño de Caffè Perfetto desde hace unos meses, a elDiario.es, la decisión parte de una pelea que hubo un día entre unos clientes que estaban esperando una mesa. "Se enfrentaron a los que estaban sentados, que llevaban horas alargando sin consumir nada", ha declarado al periódico.
Tal y como argumenta, no resulta "rentable" que los comensales pasen horas en el negocio sin consumir. Sin embargo, muchos consideran que esta nueva tarifa horaria perjudica a los vecinos de la zona y rompe el tejido social del barrio, priorizando a la clientela turística, ya que los extranjeros acostumbran a permanecer mucho menos tiempo en los establecimientos porque sólo están de paso.
Pese a todo, el cambio no parece haber supuesto una pérdida de clientes y, en principio, sólo se aplica cuando hay mucha gente en la terraza y personas esperando para conseguir una mesa. Aun así, tras esto, cabe preguntarse si la medida terminará extendiéndose a otros bares y restaurantes de Barcelona o de otras ciudades. ¿Están en peligro las mañanas de domingo de café y periódico al sol durante horas?