La función poco conocida de la freidora de aire que evita que se resequen los alimentos más delicados

Con las freidoras de aire nos está pasando como con los microondas. Los últimos los acabamos utilizando solo para calentar y las primeras solo para freír sin aceite. Pero ambos electrodomésticos permiten utilizar distintas funciones que se nos quedan olvidadas en el manual de usuario para acabar utilizando siempre la función por defecto. En el caso de las freidoras de aire, muchos modelos incorporan funciones específicas con la función Bake o la función Fish, especialmente pensadas para cocinar alimentos que suelen resecarse en exceso si se usa la función Freír.

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Los alimentos delicados como los pescados y ciertas carnes, especialmente aquellas con bajo contenido graso como las pechugas de pollo o de pavo o cortes del cerdo como el lomo o el solomillo, tienden a secarse fácilmente en la freidora de aire debido al método de cocción que emplea este aparato.

¿Por qué algunos alimentos quedan secos en la freidora de aire?

La circulación constante de aire caliente a alta velocidad, que es lo que permite a la freidora de aire cocinar más rápido que un horno convencional, extrae rápidamente la humedad de la superficie de los alimentos, lo que favorece la formación de una capa exterior crujiente, pero también puede provocar una pérdida excesiva de jugos internos si no se controla bien el tiempo o la temperatura de cocción. Además, al ser más rápida, es fácil sobrepasar el punto de cocción ideal sin darse cuenta.

En las freidoras más antiguas, para evitar que estos alimentos más bajos en grasas quedaran secos, era fundamental prestar atención a varios factores. Había que controlar cuidadosamente el tiempo y la temperatura, utilizando valores más bajos y vigilando la cocción con más frecuencia hasta "pillarle el punto". Ahora eso ya no es necesario.

Las funciones especiales de la air fryer

Con las freidoras de aire modernas, conseguir resultados espectaculares con los alimentos más delicados es mucho más sencillo. Los modelos nuevos incorporan funciones específicas diseñadas para cocinar este tipo de piezas con mayor suavidad, como la función Horno (Bake) o la función Pescado (Fish). Estas opciones ajustan automáticamente parámetros como la temperatura y, lo que es más importante, la velocidad del ventilador, reduciendo la intensidad del flujo de aire caliente. Al funcionar el ventilador a menor velocidad, se evita que el calor directo reseque la superficie de los alimentos antes de que se cocinen por dentro, permitiendo una cocción más uniforme y conservando mejor la textura y los jugos internos.

Estas funciones están pensadas para dar un tratamiento más amable a ingredientes sensibles, como filetes de pescado, mariscos, pollo deshuesado o incluso productos de repostería. En el caso del pescado, por ejemplo, una cocción más respetuosa con el producto previene que se deshaga o se vuelva gomoso, mientras que en carnes magras, como la pechuga de pollo, se logra un resultado más tierno y jugoso. Aprovechar estas funciones preestablecidas facilita obtener mejores resultados sin tener que preocuparnos de nada más que seleccionarla.

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Como extra, para conseguir carnes y pescados mucho más sabrosos, se pueden marinar previamente, además, esto puede ayudar a mantener aún mejor la humedad y aportar una capa de protección frente al calor directo. Otro truco útil es utilizar un ligero pincelado de aceite de oliva antes de cocinar, que permitirá un reparto más uniforme que el uso de espray. Por último, envolver los alimentos con papel vegetal (papel de horno) puede protegerlos del aire directo y ayudar a conservar mejor sus jugos, esto no es más que usar en la freidora de aire la técnica que se conoce como papillote.

Los errores que no se deben cometer con este aparato

Aparte de utilizar por costumbre la función programada por defecto, existen otros errores bastante frecuentes que pueden restar calidad a los platos cocinados en la freidora de aire. Conociéndolos es mucho más fácil evitarlos:

• Sobrecargar la cesta. Llenar demasiado la cesta impide que el aire caliente circule correctamente, lo que da como resultado una cocción desigual con parte de los alimentos poco crujientes.
• No precalentar la freidora cuando la receta lo pide. Alimentos como patatas fritas congeladas o hojaldres necesitan un golpe de calor intenso nada más empezar para conseguir un buen acabado crujiente.
• No remover los alimentos en mitad del tiempo de cocción. Si no lo hacemos, nos podemos encontrar con la parte superior dorada en exceso y la inferior tirando a cocida.
• Utilizar demasiado aceite. La freidora de aire está diseñada para cocinar con poco o nada de aceite. Usar en exceso puede generar humo, malos olores y resultados grasientos.
• Cocinar alimentos con líquido o masas líquidas. La freidora de aire no se lleva bien con los rebozados tipo tempura japonesa ni está pensada para cocinar líquidos, pues el agua al calentarse genera vapor de agua que podría dañar el aparato.
• No adaptar tiempos y temperaturas. La freidora de aire cocina más rápido que un horno convencional, por lo que es necesario ajustar los valores de estos parámetros.