Bina Bar, Jerez.
El regreso del bar de Jerez del chef Juanlu Fernández: un rincón donde saborear más que arroces los fines de semana
Juanlu y Dolce Nilda han reabierto Bina Bar donde compartir platos y descubrir cócteles creativos elaborados con vinos de Jerez.
Más información: Los chicos que arrasan en su nueva pastelería americana en Errentería: "Hemos vendido todo todos los días"
Jerez de la Frontera se prepara para estrenar un nuevo capítulo en su historia gastronómica. Y lo hace de la mano de uno de sus hijos predilectos: Juanlu Fernández, el chef que ha llevado el nombre de esta ciudad gaditana hasta la élite de la alta cocina.
Tras conquistar a la crítica nacional e internacional con LÚ, su templo de la excelencia andaluza galardonado recientemente con la segunda estrella Michelin, Juanlu vuelve a su barrio para abrir la puerta a su faceta más canalla y cercana: Bina Bar, que ha abierto este 11 de julio tras una completa transformación.
Ubicado en la calle José Cádiz Salvatierra, Bina Bar renace con la intención de convertirse en ese lugar al que uno siempre quiere volver. Es un espacio que respira Jerez, Andalucía y mundo, todo a la vez. Aquí, la brasa, la tradición y la creatividad viajan juntas.
Juanlu Fernández.
Lo hacen con el sello inconfundible de Juanlu y Dolce Nilda, su socia y esposa, quien ha sido reconocida como Mejor Jefa de Sala en los Premios Montagud 2025.
Juntos forman un tándem que ha revolucionado la escena gastronómica de su ciudad natal, sin perder nunca de vista la calidez y hospitalidad que definen su forma de entender la mesa.
Una carta para compartir sin prisas
Bina Bar nació en plena pandemia como un refugio informal. Hoy, cinco años después, se reinventa sin renunciar a su esencia. Sigue siendo ese rincón para compartir risas y platos entre amigos, pero ahora con una propuesta mucho más amplia y sabrosa.
Bina Bar ofrece platos para compartir.
En su carta brillan los clásicos del sur, como el mollete de atún de almadraba, la ensaladilla de gambas o unas papas aliñás con caballa al sarmiento que son puro Cádiz.
A estos bocados de siempre se suman platos nacidos de la curiosidad viajera del equipo de LÚ, como una picaña madurada 180 días o guisos de toda la vida reinterpretados con mimo, como la sopa de tomate de la abuela Josefa o los callos del chef, que prometen ser pura nostalgia en cada cucharada.
Tartar de picaña madurada, salsa especial y alcaparras.
El fuego cobra un protagonismo especial en la zona de brasas, donde carnes, pescados y verduras se cocinan al momento, respetando el producto de temporada y adaptándose a lo que ofrece el mercado. Todo con la naturalidad de quien entiende la cocina como un gesto de amor y de raíces.
El sabor dulce de Colombia y Jerez
Si algo distingue a Bina Bar de cualquier otro bar de barrio es la delicadeza con la que se cuidan los detalles, como en cada uno de sus proyectos.
El equipo de pastelería —que cuenta con obrador propio junto al local— rinde homenaje a Colombia, tierra natal de Dolce, a través de postres que irán cambiando y sorprendiendo al comensal. Un dulce puente entre Cádiz y Latinoamérica que pone el broche de oro a cada visita.
Vinos y cócteles a base de vinos de Jerez conforman la propuesta líquida.
En la copa, la propuesta no se queda atrás: cócteles creativos elaborados con vinos de Jerez, diseñados por el equipo de LÚ, añaden un toque local y refrescante a la experiencia.
Más que un bar: un espacio vivo con duende
Pero Bina Bar es mucho más que cocina. Es un lugar pensado para que pasen cosas: desde jornadas gastronómicas con guisos de Juanlu, hasta flamenco en directo, pasando por arroces de fin de semana y otras sorpresas que mantendrán viva la chispa de este rincón.
Todo ello en un entorno cálido, con un interiorismo firmado por Daniel Muñera, responsable también de Krombol, donde lo andaluz y lo contemporáneo se dan la mano para crear un ambiente acogedor, lleno de personalidad y, sobre todo, de alma.
