Las vistas al mar desde una de las mesas del chiringuito.
La zona de Ibiza con la mejor playa de España, un chiringuito abierto por David Lynch y un bar japonés que arrasa en París
El municipio reúne diversos atractivos turísticos que lo convierten en una parada a añadir en una ruta de viaje a la isla.
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Para los amantes del mar y el buen tiempo, la llegada del verano inaugura la búsqueda de la playa o la cala perfecta. Y, con ella, la búsqueda también de ese chiringuito o rincón gastronómico en el que refugiarse del calor sin alejarse mucho de la arena.
Las Islas Baleares suelen ser uno de los destinos más habituales en estas fechas por su gran oferta turística veraniega y sus paisajes paradisíacos (lo cual, por otra parte, ha disparado el precio de la vivienda en el archipiélago).
Hace unos días, la revista de viajes Condé Nast Traveler invitó a sus lectores a participar en una votación para elegir la mejor playa de España. La ganadora fue una ubicada precisamente en Ibiza, conocida por su arena blanca y fina, sus aguas cristalinas y su entorno natural rodeado de pinos.
El nombre de la playa que se alzó victoriosa es Cala Bassa, ubicada al noroeste de la isla, en el municipio de Sant Josep de sa Talaia, a sólo 25 kilómetros de la ciudad de Ibiza.
Un chiringuito Michelin y cinematográfico a pie de playa
En ese mismo municipio, a 15 minutos en coche de esta playa, en Cala Molí, se encuentra uno de los chiringuitos más especiales del lugar.
Se trata de El Silencio Ibiza, el hermano pequeño del concepto original del club, también denominado El Silencio, que nació en París en 2011.
Como curiosidad, el fundador del local francés fue el reconocido cineasta David Lynch, director de películas y series como Blue Velvet o Twin Peaks.
De hecho, el guionista lo ideó inspirándose en el mítico club de su filme Mulholland Drive, y fue concebido como un espacio donde confluyesen la cultura, el arte, la música y la gastronomía.
El salón del chiringuito.
Podría decirse que el local de Ibiza es una sucursal o versión beach house de ese club parisino, manteniendo la misma filosofía de ser un punto de encuentro para la creatividad y la vanguardia artística, aunque adaptado al entorno relajado de la isla.
No obstante, cabe aclarar que Lynch nunca fue el gestor directo del establecimiento en Ibiza, aunque su influencia conceptual y estética está presente, ya que el proyecto fue impulsado por Arnaud Frisch, socio y colaborador de Lynch en el club de Francia.
El Silencio Ibiza cuenta con el talento del chef Mauro Colagreco, galardonado con tres estrellas Michelin. Colagreco se centra en una cocina mediterránea basada en productos locales y una fuerte influencia de la parrilla argentina, además de toques internacionales.
Entre los platos más destacados figuran ceviche peruano, carpaccio de langostinos, rodaballo a la parrilla, carnes asadas, tapas creativas y pescados frescos del día.
Tapas japo-ibéricas con notas de jazz
Por la tarde y la noche, El Silencio Ibiza se transforma con una oferta japonesa de alto nivel. Allí convive junto al restaurante Urusai Izakaya, dirigido por los chefs Taku Yuji Mikurya y Romain Littière, que elaboran platos frescos cargados de umami, como bocados crujientes de arroz, toro sando, fideos soba con gamba roja y tempura de verduras ibicencas.
Bocados crujientes de arroz.
La comida se complementa con sakes y vinos seleccionados. ¿El resultado? Una fusión ibérico-japonesa audaz y elegante, tan deliciosa como vanguardista.
Además, esta temporada han inaugurado el espacio Urusai Sunset Bar, donde se podrá disfrutar de una selección de vinilos escogida por Jaime Fiorito, que abarca desde el jazz espiritual hasta los ritmos pioneros del disco, pasando por joyas subterráneas y productores contemporáneos.
