José Eugenio, dueño del Asador Guadalmina.

José Eugenio, dueño del Asador Guadalmina.

La Jungla / Social VIRAL

El llanto viral de José Eugenio, el hostelero 'antirrojos' que no encuentra camareros

El conocido hostelero de Marbella se ha quejado en Twitter de que no encuentra trabajadores para su negocio y le han llovido las críticas.

9 junio, 2022 19:56

Noticias relacionadas

No es la primera vez que el dueño del Asador Guadalmina de Marbella, José Eugenio Arias-Camisón, protagoniza una polémica relacionada con los trabajadores de hostelería. El año pasado ya se había quejado de que no encontraba camareros para su restaurante antirrojos y acusó a la izquierda de "no querer trabajar" y preferir cobrar "la paguita". Ahora, ha vuelto a la carga en Twitter, criticando de nuevo que la gente opta por cobrar "un subsidio" antes que aceptar un empleo.

El asador que regenta José Eugenio, en el que ha estado EL ESPAÑOL, es fácilmente reconocidble porque en su exterior tiene colgadas pancartas en las que se pueden leer consignas como "¡Gobierno traidor! ¡Dimisión o prisión!". Toldos con banderas de España y todo un despliegue de decoración patriótica salpica el establecimiento, pero el dueño reniega de la palabra facha: "Toda la gente que te insulta llamándote facha no tiene ni puta idea de lo que significa la palabra. El fascio lo creó Mussolini, que era un socialista de verdad, no como los de ahora. Llamarme facha es el insulto fácil de los ignorantes".

Esta semana, José Eugenio ya se había hecho viral con un vídeo que había compartido en su cuenta de Twitter, donde es muy activo a pesar de las críticas. En esta ocasión, había ido a llenar el depósito de su coche y se quejaba del "puto Gobierno de mierda", al que llamaba "ladrones", mostrando lo que había tenido que desembolsar en el surtidor. Sin embargo, ha sido su llanto por no encontrar trabajadores lo que más reacciones ha acumulado en la red.

"¿Cómo se come?"

El hostelero sostiene que no encuentra gente para trabajar, que "llega la temporada fuerte de verano y no tengo camareros, ni parrillero, ni ayudantes de cocina"; pero, sin embargo, se queja de que "hay tres millones de personas cobrando el subsidio de desempleo" y se pregunta "esto, ¿cómo se come?":

Añadía además José Ignacio, como si fuera la providencia, que "llegará algún rojo de mierda o algún vago que me diga, como dijo la miserable ministra comunista, que la solución es que los hosteleros paguemos más salario; sin embargo, ellos, a pesar de la subida de luz, gas, etc. no están dispuestos a reducir los impuestos":

Poco después, tal y como había pronosticado el hostelero, el tuit se le ha llenado de tuiteros que han afeado tanto su ideología como la decoración de su local, además de recordar algunas de las polémicas en las que se ha visto envuelto con sus trabajadores:

Ante tal aluvión, José Eugenio ha intentado escudarse en el convenio de la hostelería, defendiendo que "es absolutamente legal negociar con un trabajador para que trabaje más horas por un salario mayor":

Con todo, veremos si el asador es capaz o no de encontrar personal para la época estival.