Image: Dropkick Murphys, la autenticidad a la irlandesa que conquistó a Scorsese

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Dropkick Murphys, la autenticidad a la irlandesa que conquistó a Scorsese

El grupo de Boston regresa a Madrid (sala La Riviera) para presentar su último trabajo Going out in style

29 abril, 2011 02:00

Los componentes del grupo Dropkick Murphys. Foto: Archivo

San Patricio, una taberna irlandesa en el corazón de la ciudad de Boston. Nada que ver con el merchandising de las franquicias de cervecerías en España y su imagen frívola de universitarios emborrachándose con la única excusa de que es lo que se supone que hay que hacer ese día. Lejos de esa imagen, un grupo de corpulentos trabajadores de un barrio obrero agarra sus pintas con sus manos curtidas y olvida los momentos más duros de la jornada gritando en comuna. Caras rojas, cristales rotos. Llueven las jarras. Alguien comienza a cantar y pronto todos les siguen. Dos docenas de voces entonan canciones que todos conocen y que probablemente sus bisabuelos también. Irlanda queda lejos, pero no sus raíces. A esa estampa figurada recuerdan las canciones de Dropkick Murphys, una banda de punk perteneciente a uno de esos barrios de inmigrantes irlandeses, South Boston, y que lleva 15 años girando por el mundo transmitiendo la herencia de sus ancestros encubierta en una potente base punkrock. Esta noche tocarán de nuevo sus himnos en Madrid, en La Riviera.

Son americanos pero en sus canciones se adivinan las influencias del punk británico de los 70 y primeros ochenta. Desde los Clash a Cockney Rejects pasando por Stiff Little Fingers, su actitud Oi y su punkock agresivo no ha cambiado en los siete discos que componen su discografía esencial. Pero su sonido no ha dejado de enriquecerse con gaitas, instrumentos de viento y acordeón, con un aliento puramente folk y de ascendencia celta poniendo más el ojo en grupos consagrados como The Pogues que en los pioneros del hardcore, creando canciones más festivas, menos dirigidas al cerrado ámbito del público punkrock y específicamente diseñadas para corear y gritar en concierto. Muchos podrán hacerlo en la cita de hoy, parte de sus tres fechas en España, donde presentan su último disco Going out in style, una suerte de obra conceptual donde se abren a sonidos mas melancólicos y exploran aún más a fondo el sonido tradicional irlandés, sin abandonar nunca sus raíces y actitud rockera, contando con colaboraciones tan ilustres como la del mismísimo Bruce Springstreen.

Puede sorprender escuchar el nombre del de New Jersey asociado al de una pequeña banda de punk de Nueva Inglaterra pero lo cierto es que los de Boston han cambiado de campo de juego en los últimos años. Ya no son unos desconocidos con boina haciendo el gamberro sobre un escenario. Going out in Stile es su segunda grabación tras participar con su corte I'm shipping up to Boston en la banda sonora de la película Infiltrados (The Departed, 2006) de Martin Scorsese, cuya afición al rock y olfato musical le llevó a utilizarla como tema emblema durante los momentos clave del relato, que trata de retratar la estructura de la mafia Irlandesa en Boston, ubicando su narración en los barrios de emigrantes de donde proviene la misma banda. Gracias a su tema semi instrumental, su popularidad subió como la espuma y amplió sus horizontes geográficos llegando a entrar en el top 20 del billboard americano con su The Meanest of Time de 2007, algo impensable para una banda punk de orígenes humildes, epítome de la clase trabajadora y actitud callejera.

Pero Dropkick Murphys no es un grupo al que la fama haga endulzar su mensaje y cambiar su trayectoria para aprovechar el tirón de su popularidad. Su evolución es natural y fuera de modas. Siguen siendo siete músicos con una ética de trabajo inalterable, renegados con ideales y causas que defender y que, como cualquier compañero del barrio, sienten un profundo orgullo de su ciudad, transmitiéndolo en sus canciones. Su actitud positiva ante la vida, los valores de la amistad, lealtad y las trifulcas de bar siguen siendo su inspiración y su autenticidad quedará demostrada esta noche cuando miles de voces les acompañen en sus The dirty Glass, Johnny I Hardly Knew Ya, The State of Massachussets o cualquiera de sus incontables cánticos.