Arde el Sevilla: fuera de Champions, Diego Alonso en el alambre y el acoso vergonzoso a la consejera

La crisis del Sevilla FC no hace más que agravarse. Este miércoles, el equipo hispalense desaprovechó un 2-0 a favor en el Sánchez Pizjuán, acabó con diez tras la expulsión de Ocampos y perdió 2-3 contra el PSV. Este resultado le deja eliminado de la Champions y sólo le valdrá ganar en su visita al Lens, en la última jornada, para ser tercero de su grupo y jugar la Europa League.

En un cercano horizonte aparece ya la Junta General de accionistas del club que se celebrará el próximo lunes 4 de diciembre (18:00 horas), mientras la figura del entrenador uruguayo Diego Alonso, pese al respaldo de la actual directiva, se tambalea con cada varapalo.

Diego Alonso fue presentado el pasado 11 de octubre como sustituto de José Luis Mendilibar en el banquillo del Sevilla. Desde entonces, ha acumulado cuatro derrotas, cuatro empates y tan solo una victoria, que fue contra el CD Quintanar que juega en Tercera RFEF. Con el equipo hundido, el futuro del técnico probablemente esté en juego el próximo domingo en el partido de Liga contra el Villarreal que se volverá a disputar en el Pizjuán.

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"Le agradezco el apoyo a Pepe (Castro) y a José María (Del Nido Carrasco). Lo siento y también el de los futbolistas. Pero el respaldo más grande es lo que sucede en el campo y es el juego en un día importante. Hicimos un partido extraordinario, haciendo un gol y buscando el segundo. Sin pararse. Me siento respaldado y respetado", dijo un Diego Alonso más positivo en su discurso que la realidad que le afecta.

Esa sensación de quedarse sin margen empieza a alcanzar a todo el mundo. El nerviosismo se ve también en los propios jugadores. Ante la Real Sociedad, Sergio Ramos y Jesús Navas fueron expulsados; ante el PSV, Ocampos y un Fernando que vio la roja con el partido ya terminado. El choque de este miércoles también dejó un momento de tensión entre Marcos Acuña y Rafa Mir. "En las buenas están todos, pero cuando las cosas queman muy pocos lo hacen. Hasta el final siempre, pase lo que pase", escribiría el argentino en sus redes sociales durante la noche.

El acoso a Carolina Alés

Y luego está la gente, el aficionado sevillista cuyo enervamiento crece por momentos. Ayer, a la salida del Pizjuán, ocurrió una escena que no se debería dar bajo ningún contexto. Afectó a Carolina Alés, consejera y accionista del club e hija del expresidente Roberto Alés. Un grupo de hinchas acosaron e increparon a la directiva en los alrededores del estadio.

El momento fue captado por las cámaras de El Chiringuito de Jugones. Mientras Alés se dirigía al coche que la esperaba, un grupo de aficionados la persiguieron lanzando varios gritos: "¡Fuera, fuera!", "irse ya, que nos vais a llevar a la ruina", "os estáis riendo de nosotros", "¡fuera de Sevilla!", "¡directiva, dimisión!". "A mí no me va a amedrentar esta gente", respondió la consejera.

El presidente Pepe Castro, que intenta resistir a una guerra civil emprendida por José María del Nido Benavente, intentó calmar el enfado de la gente con sus declaraciones ante los micrófonos de Movistar +. "Estamos cabreados, enfadados... Como está la afición y como estamos todos. Pero bueno. Hay que echarla al suelo. Tranquilidad y trabajar. No hay otra", dijo en búsqueda de una comunión con el sentir de la gente.

Suenan tambores de guerra en el Sevilla y nadie se salva. Hace solo unos meses, el club estaba celebrando su séptima Europa League. Sin embargo, todo se ha ido desmoronando progresivamente hasta el punto de asomarse la entidad a la mayor crisis a la que se ha enfrentado en años.