Después de muchos años de búsquedas infructuosas, lo he conseguido: he dado con la receta definitiva de masa de pizza.

Seguro que habéis probado muchas masas de pizza caseras, hechas con recetas diferentes, que si con harina de repostería, que si el secreto es echarle cerveza, bla, bla, bla… ninguna de estas funciona y al final siempre sale dura, o en cualquier caso más dura que una pizza de masa ya preparada.

Pues bien, esta receta es facilísima, barata y sobre todo, efectiva, para preparar una masa elástica y esponjosa una vez cocinada. Lo único que debéis hacer es empezar con tiempo, ya que debe reposar una hora antes de ser utilizada.

Preparación de masa para pizza casera

Para hacer una masa para pizza caera perfecta ponemos todos los ingredientes en un bol grande y mezclamos, al principio con una cuchara de palo, ya que será muy pegajoso, y cuando gane consistencia continuamos con las manos. Cuando sea más manejable hacemos una bola y la amasamos bien durante 3 o 4 minutos para que quede todo bien mezclado.

Limpiamos un poco el bol, ponemos la bola dentro y cubrimos el bol con un trapo de cocina. Dejamos reposar a temperatura ambiente durante 1 hora.

Pasada esa hora, veremos que la bola ha doblado su tamaño, y está mucho más esponjosa y elástica. Eso ya es nuestra masa casera para pizza, y es el momento de extenderla con ayuda de un rodillo o una botella de cristal (no hay que poner harina en la encimera, ya que no se pega). Le damos forma, ponemos lo que queramos encima (o dentro si es calzone) y al horno a 180-200 grados hasta que quede doradita.

Resultado

Es una auténtica masa de pizza muy fácil de preparar y con resultados asegurados. Eso sí, debéis escoger cuidadosamente la harina, es el único secreto.

Yo he hecho varias pizzas con el borde relleno de queso y algunas las he congelado después de poner todos los ingredientes encima, así que ahora tengo en el congelador mis propias pizzas congeladas caseras para días vagos 😉