Guiso de cordero.

Guiso de cordero. iStock

Recetas

Ni arroz ni fideuá: el plato de Castellón que no se conoce en el resto de España y es perfecto para el invierno

Una comida deliciosa perfecta para disfrutar en familia y en fechas especiales. 

Más información: El plato típico español de tres ingredientes perfecto para el otoño: rápido, barato y rico en hierro.

Publicada

0 votos

Castellón no es sólo arroces y ollas. En los 135 municipios que lo componen existen múltiples recetas muy variadas que se desconocen totalmente en el resto de España. Una de ellas es el llamado tombet de cordero, típico de Les Useres. Se trata de un estofado elaborado principalmente con carne de cordero, al que se añaden ingredientes como patatas, ajo, laurel, aceite de oliva y, en algunas variantes, pimientos secos o tomates.

La característica principal del tombet es que se cocina lentamente en una cazuela, permitiendo que los sabores de los ingredientes se integren y que la carne quede tierna y jugosa. Su nombre, tombet, proviene del verbo valenciano tombar, que significa "dar la vuelta" o "voltear", una referencia a la forma en que se distribuyen los ingredientes en capas dentro de la cazuela, o bien al acto de moverlos suavemente durante la cocción.

Este plato es habitual en reuniones familiares, festividades locales y celebraciones en Les Useres, reflejando la cocina sencilla, rústica y con productos de proximidad que caracteriza a la gastronomía de la comarca de l'Alcalatén

¿Cómo cocinar tombet de cordero?

Ingredientes

  • 1 kg de carne de cordero (preferiblemente pierna o paletilla, troceada)
  • 4-5 patatas medianas
  • 1 cebolla grande
  • 4 dientes de ajo pelados
  • 2 tomates maduros (opcional: tomate rallado)
  • 1 pimiento rojo seco (opcional)
  • 2 hojas de laurel
  • Aceite de oliva virgen extra
  • 1 vaso de vino blanco (opcional)
  • 1 vaso de agua o caldo (si es necesario)
  • Sal y pimienta al gusto
  • Pimentón dulce (opcional)

1. Preparar los ingredientes:

  • Pela y corta las patatas en rodajas gruesas (de unos 0,5 cm).
  • Salpimienta los trozos de cordero.
  • Si usas tomate fresco, rállalo o pícalo muy fino.

2. Sellar el cordero:

  • En una cazuela grande (preferiblemente de barro), añade un buen chorro de aceite de oliva.
  • Dora los trozos de cordero a fuego medio-alto hasta que estén sellados y con un color dorado.
  • Retíralos y reserva.

3. Rehogar los aromáticos:

  • En el mismo aceite, sofríe los ajos enteros (puedes aplastarlos ligeramente) y la cebolla cortada en juliana. Cocina hasta que la cebolla esté transparente.
  • Añade el tomate rallado y sofríe durante unos minutos hasta que reduzca.

4. Incorporar las patatas y el cordero:

  • Coloca las rodajas de patata en la cazuela, distribuyéndolas de manera uniforme. Encima, añade los trozos de cordero dorados.
  • Si usas pimiento rojo seco, agrégalo ahora junto con las hojas de laurel.

5. Cocción:

  • Añade un vaso de vino blanco (opcional) y deja que se evapore el alcohol durante unos minutos.
  • Añade agua o caldo caliente hasta cubrir parcialmente los ingredientes.
  • Si deseas un toque especial, puedes espolvorear una cucharadita de pimentón dulce antes de añadir el líquido.

6. Cocinar a fuego lento:

  • Tapa la cazuela y cocina a fuego lento durante aproximadamente 1 hora, removiendo suavemente de vez en cuando para evitar que se pegue.
  • Asegúrate de que las patatas estén tiernas y el cordero, jugoso.
  • Ajusta de sal y pimienta al final de la cocción.

7. Reposo y servir:

  • Deja reposar el guiso unos minutos antes de servirlo. Esto permite que los sabores se asienten.
  • Sirve caliente, directamente de la cazuela.