Primer plano de una porción de mantequilla.

Primer plano de una porción de mantequilla. iStock

Consumo

La OCU desvela la mantequilla más saludable de los supermercados en España: sin aditivos y con omega 3

La OCU ha analizado 63 mantequillas y solo una aprueba por su calidad: no es la más barata ni la más popular.

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A la hora de acudir al supermercado siempre es buena idea tener en cuenta las recomendaciones de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que constantemente analiza los productos de diferentes marcas para poder determinar cuáles son las mejores opciones para los usuarios por su calidad, precio y otros aspectos analizados.

En esta ocasión le ha tocado el turno a la mantequilla, un indispensable de muchas cocinas y que se usa para untar, cocinar o para la preparación de postres. Al tratarse de un producto con un alto contenido en grasas saturadas, siempre ha dado mucho que hablar con respecto al impacto que puede tener sobre la salud, y el reciente estudio de la OCU no puede ser más claro al respecto.

De las 63 variedades analizadas, la mayoría de ellas son consideradas una mala elección, y solo hay una mantequilla saludable, que no es ni la de la Central Lechera Asturiana ni la ligera de Hacendado, a pesar de que son dos de las más vendidas del mercado en nuestro país.

La única mantequilla saludable en España

Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), la única opción saludable es la mantequilla de Únicla, que ha logrado ser considerada una opción sana. La organización destaca su composición natural, libre de aditivos y conservantes, así como el hecho de que su leche provenga de vacas criadas en granjas certificadas en Bienestar Animal, lo que permite disfrutar de un producto más sostenible.

Esta mantequilla posee un 82% de materia grasa, un porcentaje acorde a las mantequillas de una alta calidad, mientras que tiene un bajo contenido en sodio (apenas un 0,1% de sal) y no tiene azúcares añadidos ni conservantes. A ello hay que sumar que posee un alto contenido de ácidos grasos esenciales como omega-3 y omega-6, que son beneficiosos tanto para el cerebro como para el corazón.

Esta mantequilla tiene una textura cremosa y fácil de untar que también ha sido bien valorada por parte de la OCU. Esta mantequilla se puede encontrar a la venta en El Corte Inglés, Hipercor y Alcampo, con un precio de 5,49 euros por 250 gramos de producto. A pesar de que su coste es superior al de otras marcas del mercado, su calidad nutricional y el hecho de que sea la única saludable de nuestro país, justifican su compra.

Hay que tener en cuenta que más allá de la buena puntuación obtenida en el análisis de la OCU, la mantequilla Únicla ha sido premiada con el International Taste Award, en el que se avala tanto su calidad como un sabor excepcional.

La mantequilla en España

A pesar de que en España no se consume tanto como en Francia, la mantequilla se ha convertido en un básico de la cocina, sobre todo cuando hablamos de repostería. Esta grasa de la leche obtenida a partir del batido de la nata tiene una gran cantidad de variantes, y no todas son iguales.

La mantequilla tradicional es elaborada a partir de la crema de la leche, de la que se va eliminando el agua durante el proceso de desuerado hasta que llega a alcanzarse una masa homogénea que tiene un contenido en grasa superior al 80%. No obstante, la propia Organización de Consumidores y Usuarios ha alertado de que en el mercado han aparecido mantequillas con un porcentaje inferior de grasa.

A la hora de elaborarla hay muchas técnicas que se pueden llevar a cabo, y que dan lugar a distintos tipos de mantequillas de acuerdo a su composición (distinto contenido en sal y en grasas), su facilidad para ser untadas o su procedencia, entre otras. Es por ello por lo que podemos encontrar diferentes denominaciones para referirnos a los productos que podemos encontrar en el supermercado.

Por ejemplo, podemos encontrar mantequilla con sal y sin sal, mantequilla a secas (con un mínimo del 80% de grasa o un 82% si no lleva sal añadida), la semimantequilla (con un contenido graso del 39%) y la mantequilla tres cuartos (con un contenido graso del 60%). Además, hay las mantequillas light, cuyo contenido de grasa se sitúa por encima del 30%, y que son fáciles de untar.

Por su origen lácteo, este producto posee una elevada concentración de grasas saturadas y con la misma composición de la nata, con ácido palmítico, mirístico y butírico, además de contener colesterol, con unos 250 mg por cada 100 gramos de producto. También tiene una pequeña cantidad de lactosa, e incorpora vitaminas liposolubles, destacando especialmente las vitaminas A y D.

En el análisis llevado a cabo por parte de la OCU se ha podido comprobar la valoración Nutriscore de cada producto, y dado que son productos ricos en grasa (principalmente saturadas) y en algunos casos también en sal, las valoraciones en esta clasificación se sitúan entre la D y la E, que son las peores notas posibles.

A pesar de que las mantequillas light suelen ser vistas como una opción más saludable, la realidad es que, aunque llevan menos grasas, su calidad nutricional es similar al de las mantequillas tradicionales, pues incorporan tanto colorantes y otros aditivos emulsionantes y espesantes pensados para que se mantenga la textura del producto.

En definitiva, hay que tener claro que la mantequilla es un producto que se debe consumir en pequeñas cantidades y no a diario, siendo preferible reemplazarla en los desayunos por aceite de oliva.