La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen
Meloni consigue que su línea dura contra la migración se imponga en la UE tras sus choques con los tribunales
La clasificación de la Comisión, en la que figuran Egipto y Bangladesh como quería Italia, tiene como objetivo acelerar las devoluciones de migrantes y demandantes de asilo.
Más información: Bruselas incluye a Marruecos, Colombia y Túnez en la lista de "países seguros" para acelerar las devoluciones de migrantes
La Comisión de Ursula von der Leyen da un nuevo espaldarazo a la línea dura en materia migratoria de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni. El Ejecutivo comunitario ha publicado este miércoles la primera lista de la UE de "países de origen seguros", cuyo objetivo es facilitar a los Estados miembros la devolución de migrantes irregulares y solicitantes de asilo sin derecho a quedarse.
Una clasificación en la que figuran los tres países que Roma considera prioritarios -Túnez, Egipto y Bangladesh- y que por tanto da cobertura legal a las políticas de Meloni, en particular la creación de centros de retención de migrantes en Albania, que además cuentan también con el visto bueno de Von der Leyen.
Sin embargo, los tribunales italianos bloquearon a finales del año pasado el traslado a los centros de Albania de los tres primeros grupos de migrantes -que eran precisamente egipcios y bangladesíes- con el argumento de que la totalidad de los territorios de estos dos países no había sido designada como segura por Roma, amparándose en un fallo del Tribunal de Justicia de la UE (TJUE). La iniciativa de Bruselas resolvería este problema, incluso antes de que la justicia europea (que todavía está examinando el caso) sentencie de forma definitiva.
En cuanto a Túnez, la UE ya firmó en julio de 2023 un cuestionado acuerdo migratorio con este país norteafricano por iniciativa de Meloni, ya que se había convertido en el principal punto de salida de migrantes con destino a Italia a través de la ruta del Mediterráneo Central. Su designación como "país seguro" facilita también la repatriación exprés de sus nacionales. La ONG Human Rights Watch ha denunciado que la UE "pierde su brújula moral y su credibilidad" porque está consintiendo la "represión" que practica el Gobierno tunecino.
La norma que crea la lista europea de "países de origen seguros" -que todavía debe ser aprobada por la Eurocámara y los Gobiernos de los 27- constituye "un éxito para el Gobierno italiano, que siempre ha trabajado tanto a nivel bilateral como multilateral para obtener la revisión del reglamento", ha dicho el ministro del Interior, Matteo Piantedosi.
"Además de los países candidatos a unirse a la UE, la lista incluye también a Egipto, Túnez y Bangladesh, como había previsto Italia, no sin polémica y con una oposición política instrumental y puramente ideológica", presume Piantedosi. Al Gobierno de Roma también le satisface que la propuesta de Bruselas "prevé la posibilidad de aplicar procedimientos fronterizos acelerados, como los previstos en Albania, a los solicitantes de asilo cuya nacionalidad tenga una tasa de reconocimiento del derecho de asilo a nivel europeo inferior al 20%".
La primera lista europea incluye a un total de 7 países: Túnez, Bangladesh, Egipto, Marruecos, Colombia, India y Kosovo. A ellos hay que añadir a los candidatos a la adhesión (con la excepción de Ucrania por estar en guerra): Albania, Bosnia y Herzegovina, Montenegro, Macedonia del Norte, Serbia, Turquía, Georgia y Moldavia.
Según la definición del reglamento, un país sólo puede designarse como seguro "si atendiendo a la situación jurídica, a la aplicación del derecho dentro de un sistema democrático y a las circunstancias políticas generales, puede demostrarse que no existe persecución (...), ni un riesgo real de daño grave".
En la práctica, uno de los principales criterios que Bruselas ha tenido en cuenta para elaborar su lista es que se trata de países que representan un flujo significativo de migración irregular hacia la UE. Además, todos ellos tienen una tasa de reconocimiento de asilo a nivel de la UE muy baja, inferior al 5%, y sus nacionales pueden entrar en territorio comunitario sin visado.
En la práctica, la clasificación como "seguros" significa que las peticiones de asilo de los nacionales de estos países serán procesadas por los Estados miembros mediante un "procedimiento acelerado" (tres meses en lugar de seis), basándose en la presunción de que es poco probable que sus solicitudes tengan éxito.
"Muchos Estados miembros se enfrentan a una importante acumulación de solicitudes de asilo, por lo que todo lo que podamos hacer ahora para apoyar decisiones de asilo más rápidas es esencial", sostiene el comisario de Interior y Migración, el austriaco Magnus Brünner.
"La aplicación del concepto de 'país de origen seguro' puede ayudar a los Estados miembros a tramitar las solicitudes con mayor rapidez, garantizando siempre que cada solicitud de asilo reciba una evaluación individual y esté sujeta al escrutinio de los tribunales nacionales", ha señalado Brünner.
