Image: El Borges que ríe

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Letras

El Borges que ríe

La editorial Renacimiento publica en España el libro de Roberto Alifano, colaborador de Borges durante diez años, sobre el humor del autor de El Aleph

8 agosto, 2016 02:00

Borges con Alifano cuando trabajaban juntos

Roberto Alifano (Buenos Aires, 1943) está de acuerdo con esa idea de que el Borges oral vale tanto como el escrito. Tanto que él mismo dedicó todo un libro a las situaciones divertidas que vivió con el maestro durante los diez años que trabajó a su lado. La editorial Renacimiento publica ahora en España (en Argentina se publicó en 2006) El humor de Borges, y el año próximo sacará Cuaderno Borges, una selección de los diarios que Alifano llevó por aquellos años en que iba cada mañana a la casa del escritor, en Buenos Aires, para leerlo y escribir a su dictado: "Uno grababa a Borges y después lo podía reproducir sin corregirlo".

En el libro se recogen las filias y fobias del escritor (los pensamientos en "grajeas" que le imputaba al Ramón de las greguerías, al que por lo demás admiraba; su poca estima por Sábato o Quiroga; lo aburrido que le parecía el Fausto de Goethe; lo poco que le gustaba, en general, Flaubert, cuya Madame Bovary le parecía "una novela insoportable"), muestras de su proverbial, y juguetona, modestia ("soy tan ignorante que ni siquiera sé la fecha de mi muerte"), ataques humorísticos a algunos de sus contemporáneos: en suma, una suerte de diario de trabajo en el que Alifano se salta, sin embargo, lo que tiene que ver con la escritura, si es que hay en Borges algo que no sea literatura decantada. El libro recoge también declaraciones públicas, y cosas que dijo Borges y que ya sabíamos, pero porque otros (Bioy a menudo) las contaron, no porque Borges se repitiese, lo cual no ocurre casi nunca.

Alifano, cuenta él mismo por teléfono desde Buenos Aires, siempre ha llevado diarios, pero cuando empezó a trabajar con Borges se dio cuenta de que tenía que apuntarlo todo. "Trabajar con él cada día fue uno de los dones que me dio la vida. Yo siempre digo que haber trabajado con Borges es como haber trabajado con Shakespeare, con Cervantes, con Lope de Vega. Con uno de los grandes genios que aparecen cada cien o doscientos años".

"Era un humorista también en su literatura, de pronto hay un humor rasante en Borges. En las milongas, cuando dice: "Manuel Flores va a morir / eso es moneda corriente / morir es una costumbre / que sabe tener la gente". Y en ese otro que dice, en una milonga también: "Un balazo lo tumbó en Thames y Triunvirato; / se mudó a un barrio vecino: /el de la 'quinta del Ñato'..." La quinta del Ñato, en Argentina, es el cementerio". Borges citaba a menudo, cuenta Alifano, a Bernard Shaw, que dijo que toda labor literaria es "a la larga voluntaria o involuntariamente humorística". Su humor, dice el poeta y periodista argentino, era inglés, ácido, "un humor cercano irónico y sarcástico, como el de Wilde o el doctor Johnson".

Alifano reconoce que Bioy fue "el gran interlocutor de Borges". Él estuvo muchas veces con los dos, y les pudo ver conversar, junto a otros como Silvina Ocampo y los escritores de todo el mundo que pasaban a visitar a Borges cuando estaban en Buenos Aires. "Se comía muy seguido en casa de los Bioy", cuenta Alifano. "Italo Calvino estaba casado con una argentina y venía mucho a Buenos Aires y comía con nosotros; Umberto Eco también. Los que estaban en esa intimidad eran invitados a comer en casa de los Bioy, de Silvina y de Adolfito".

¿Qué había que tener para pertenecer al grupo de Borges? Bueno -responde Alifano-, Borges era un ser literario que veía todo a través de la literatura. Su gente cercana tenía una afinidad literaria con él". Alifano es incapaz de quedarse con un solo Borges. "Cuando alguien me pregunta qué libro de Borges recomiendo, yo siempre respondo que su obra completa. Es el único escritor que aguanta la obra completa. Está todo escrito en un solo registro. Tú tomas a Dostoievski, a Sartre, al mismo Kafka y hay obras maestras y cosas que de pronto te resultan inadmisibles. Borges es el único escritor que se propuso ser literario en cada línea y yo creo que lo logró".

@albertogordom