Image: Pedro Pérez

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El Cultural

Pedro Pérez

"Hacienda no puede ser el impulsor de la política cultural"

4 septiembre, 2012 02:00

Pedro Pérez, presidente de FAPAE

Hoy interviene en el I Encuentro Cine y Eduación, en el Espacio Telefónica de Madrid

Atiende al teléfono el presidente de la Federación de Productores Audiovisuales (FAPAE), Pedro Pérez, con una sensación de asfixia, de alguien que no parece tener tiempo para descansar un solo minuto de la jornada laboral. "Hoy es uno de los peores días del año para mí", sostiene. Aun así, durante quince minutos responde con amabilidad, pero también con firmeza, a las preguntas de El Cultural. Pérez es uno de los integrantes de la industria del cine español más activos en las redes sociales (especialmente en twitter), casi siempre dispuesto a comentar y diagnosticar la situación del sector cultural que se ha llevado la peor parte de las medidas presupuestarias del Gobierno. No es para menos. El cine español está y seguirá estando en el centro de actualidad a lo largo de este final de año. No sólo por la subida del IVA y la necesidad de encontrar vías de financiación para hacer frente al hachazo al Fondo de Protección a la Cinematografía. Hoy interviene en el I Encuentro Cine y Eduación (Espacio Telefónica, Madrid), que analizará la labor del cine como herramienta de desarrollo educacional. Una cuestión que no es en ningún modo banal, sobre todo ahora que el Gobierno considera el cine "un producto de entretenimiento" (palabras de Cristóbal Montoro).

Pregunta.- Se presenta un otoño caliente para el cine español…
Respuesta.- Sin duda, pero yo espero que sea caliente sobre todo por la calidad de nuestro cine, que a pesar de la situación sigue haciendo películas de gran calidad. En San Sebastián, que ha vuelto a apostar por nuestro cine, se verán grandes películas de Pablo Berger, de Javier Rebollo, de Fernando Trueba… y también llegarán pronto a nuestras salas los nuevos trabajos de José Antonio Bayona y de Daniel Calparsoro, que son espectaculares. A pesar de todo, el cine español sigue vivo. Viene un final de temporada en el que se va a hablar mucho y bien de él.

P.- ¿FAPAE da por perdida la batalla del IVA?
R.- No es una batalla, es un despropósito. Hay un dicho popular que dice "la bronca o la multa". Una cosa es que España se separe de toda Europa y de todo el mundo civilizado, con un IVA tres veces superior al de Alemania, que se supone que es la que está marcando la música de la economía europea. Alemania está al 7%, nosotros al 21%. Lo que ya me parece que no es serio como gobernantes es justificar la subida diciendo que ni el cine, ni el teatro ni cualquier arte escénica, como la ópera, es cultura. Es algo que se ha permitido decir este Gobierno. Ya nos han hecho el daño económico que podían, pero el Gobierno no está legitimado para desprestigiar el cine de ese modo. No es serio, es una completa aberración, y además hacen el ridículo fuera de España. Este Gobierno puede hacer una determinada política económica, ya lo ha hecho y han optado por separarse de Europa, pero desde luego no tiene ninguna autoridad para definir lo que es cultura y no lo es. Eso ya está definido en la Convención de la UNESCO que firmó España. Están haciendo mucho daño al creador, al productor y al espectador. Así que la batalla no se da por perdida. Seguiremos peleando porque no podemos dejar que las cosas queden así.

P.- Igual lo que acabarán haciendo algunos distribuidores es estrenar las películas en museos, donde la subida del IVA ha sido de 3 puntos (del 8 al 11) y no de 13...
R.- Pues no lo sé. Es una opción, pero seguro que entonces vendrán estos señores del lápiz y dirán que los museos también albergan entretenimiento. Lo que han hecho es muy serio, y a poco que haya un mínimo de sentido común en el Gobierno, se debe rectificar.

P.- Las previsiones son muy negras. No sé cuánto catastrofismo puede haber, pero el informe que han encargado habla de un posible cierre de 859 salas por el efecto del IVA. ¿Esto es realmente así?
R.- Creo que nosotros hemos hecho las cosas con la seriedad que le ha faltado al Gobierno. Pedimos que se elaborara un informe económico muy autorizado, es decir, algo que el Gobierno no ha hecho. Cuando se toma una medida de este calado, que según dicen es para recaudar más, pues hay que sustentarlo estudiando la percepción del mercado. Hacienda nos ha reconocido que no lo han estudiado, que han sumado todo el agregado del consumo y han sacado sus conclusiones. Nos hemos puesto en manos de una compañía independiente y reconocida internacionalmente, como es PriceWaterhouse, para ver cómo afectará el impuesto a la industria, en pérdida de empleo y de recaudación. Y lo cierto es que los resultados son desoladores. No solo se va a perder del orden de 3.500 empleos, sino que se van a recaudar casi diez millones de euros menos (con lo que la medida pierde sentido) y, entre otras consecuencias, se va a producir una deslocalización de inversiones extranjeras, que se irán a otros sitios. Las majors miran la presión fiscal de cada territorio, y por lo tanto invertirán más en países vecinos que aquí. Se avecina un empobrecimiento en cuanto a la oferta de películas y espectáculos.

P.- ¿Cuál ha sido exactamente la respuesta del Gobierno al informe de previsión económica que han presentado?
R.- Es muy triste, porque ellos nos dan la razón en los datos que hemos presentado, pero no rectifican. Nos hablan de "coste político", un asunto contra el que la gente de la cultura y de la empresa no puede pelear. Nuestra primera reacción ha sido demostrarles que no tienen razón, y ahora es el Gobierno el que, reconociendo que no tienen razón, debe rectificar. Tenemos otra reunión este jueves y a ver si podemos avanzar, porque por más explicaciones que damos a empresas y creadores, no se creen que el Gobierno hay hecho algo tan disparatado conscientes de que es un disparate.

P.- ¿Desde FAPAE se están estudiando vías alternativas o movimientos colectivos para amortiguar el efecto?
R.- Estamos estudiando todo tipo de medidas, pero lo primero ha sido la necesidad de expresar nuestra disconformidad, y que no permaneceremos inertes ante tan grave atentado a la razón, con la que el Gobierno deja clara su opinión sobre la creación, el arte y la industria cultural.

P.- El IVA se suma a la desaparición de siete de las once líneas de ayuda al cine español, anunciado en abril por el Ministerio de Cultura.
R.- Así es. Llueve sobre mojado. Nosotros somos los primeros en decir que en una situación de crisis hay que darle muchas vueltas al destino de los recursos públicos. Cuando el Gobierno nos informó que habría una subida del IVA del 8 al 10, hicimos nuestros números, dijimos que lo aceptábamos, que no había más remedio, y que además nos comprometíamos a que esa subida no afectara al precio final de la entrada. Sabemos la que está cayendo y somos solidarios. Ahora, si el Gobierno, que parece que solo lo forma Hacienda, nos engaña de este modo subiendo el IVA al 21% y encima decide lo que es cultura y lo que no, entonces no podemos aceptarlo.

P.- ¿La sensación de los productores es que hay un ensañamiento con el cine?
R.- Un Gobierno no se puede ensañar contra nada ni nadie. Lo que sí hay son personas, como ha demostrado el ministro de Haciendo en diferentes declaraciones, que tiene alguna cuenta pendiente con el sector cinematográfico. Debe ser algo personal, pero habrá gente dentro del Gobierno que tenga más sentido común que el señor Montoro.

P.- Respecto a las desgravaciones fiscales en inversión privada para la producción de películas, ¿se ha avanzado algo?
R.- Eso lo debería responder el Gobierno. En la explicación del programa ya dijeron que iban reducir la ayuda directa por vía de subvención. El secretario de Cultura manifestó que el PIB cultural debía subir al 8 ó 10%, y ahora estamos en el 4%. Las medidas que proponían para compensar la desaparición de ayudas directas iban por dos vías, mecenazgo y desgravación fiscal, pero han pasado varios meses y todavía no se ha producido ni un solo paso adelante en ninguna de las dos vías. Esto es muy duro para el sector, que se queda sin lo que ha prometido y además desmonta lo que había anteriormente. Tristemente, es Hacienda el impulsor de la política cultural, y eso no es admisible.

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