Image: Tacita Dean

Image: Tacita Dean

El Cultural

Tacita Dean

14 febrero, 2001 01:00

Banewl, 1999. Película color en 16 mm. 63 minutos

MACBA. Plaza de los Ángeles,1. Barcelona. Hasta el 25 de marzo

Tacita Dean (Canterbury, 1965) presenta una selección de sus filmes complementados con otros trabajos y elementos: bandas sonoras, vídeo, fotografía, textos, etc. Pero fundamentalmente el núcleo de la exposición consiste en una serie de proyecciones de películas de 16 mm. Obsérvese que decimos filmes y no vídeos, porque Tacita Dean toma partido conscientemente por el filme. El "medio" fílmico implica una manera de trabajar: bobinas de tiempo reducido -entre 2,5 y 10 minutos-, el cortar y pegar del montaje, la incorporación del azar en el proceso de grabación que no permite repeticiones, etc. Y por lo que respecta a la difusión: la sala oscura, el formato de la proyección, el haz luminoso, el mecanismo del proyector con su ruido...Todos estos aspectos implican connotaciones y condicionan el discurso. Frente a la utilización del vídeo, más práctico y económico, la recuperación del filme por Tacita Dean no posee un carácter nostálgico, sino más bien hay una voluntad de reflexión sobre el medio, sobre el mirar y cómo mirar; éste me parece que es uno de los mensajes implícitos en nuestra artista.

A grandes rasgos, las películas de Tacita Dean consisten en planos fijos; ella misma explica que las cosas, los episodios, pasan o aparecen delante del encuadre y que evita las panorámicas y los zooms. Se trata de un encuadre obsesivo (o un conjunto de pocos encuadres) que se concentra en un paisaje, un gesto, un objeto, un episodio. De ahí su violenta y extremada "lentitud" y de ahí también que los filmes de Tacita Dean se hayan calificado -aunque posean banda sonora- como puro silencio. ¿Pero qué sentido posee este arte autista? Quienes superen la primera sensación de incomodidad motivada por el carácter estático de las películas, observarán que el lenguaje de Tacita Dean es la poesía. Poesía quiere decir subjetividad, evocación, sugerencia, metáfora, intuición. Los filmes de Tacita Dean son una obra abierta a múltiples interpretaciones y sugestiones. En contraposición, la prosa posee una estructura racional, ilustrativa, narrativa, dinámica, en definitiva más cerrada. Los mecanismos para motivar el lirismo y la sugestión son múltiples; la estrategia de nuestra artista es la contemplación, la contemplación fija y estática sobre no importa qué fragmento de la vida. La imagen así descubre toda su capacidad evocadora y polivalente. La fijación del encuadre, la inmovilidad, la lentitud son, sin embargo, la condición de esta poesía, de esta capacidad metafórica. Porque no se trata tanto de captar el mundo de las apariencias, sino de una puesta en extrañeza, un situar fuera de contexto. Las imágenes de Tacita Dean son como abstractas y desconcertantes porque su inmovilidad rompe con los hábitos perceptivos y nos deja sin las pautas de lectura habituales. Se crea una distancia o un corte en el circuito de comunicación que nos obliga a repensar y remirar sin las frases ni las respuestas hechas. Las imágenes se presentan como una sorpresa, como algo que hay que descubrir, el lenguaje de la poesía.