Hay días en los que hay ganas de innovar y de experimentar con ingredientes, en cambio otros lo único que apetece es ir a lo seguro con recetas de toda la vida, las de las madres y las abuelas como este zarangollo murciano, que no me preguntéis de dónde viene tan curioso nombre, aunque si alguien lo sabe estaré encantada de conocer la historia.

Ingredientes

  • Calabacín, 1 (*)
  • Cebolla, 1 (*)
  • Patata, 1 (*)
  • Ajo, 1 diente
  • Huevos M, 2
  • Aceite de oliva virgen extra, 2 cucharadas
  • Sal

Se trata de algo tan simple como un revuelto de calabacín que en mi casa siempre se ha hecho con patata y cebolla, pero que en algunos sitios lo he comido solo con calabacín y es una de tantas recetas exquisitas para sacarle partido a esta hortaliza.

Preparación del Zarangollo murciano

Es tan sencillo que los más entretenido de la receta es cortar las verduras, el resto se hace prácticamente solo.

Pelamos el ajo y la cebolla, los cortamos muy finos y los ponemos a sofreír a fuego medio en el aceite caliente removiendo de vez en cuando hasta que la cebolla empiece a tomar color. Mientras se va haciendo aprovechamos para pelar la patata y cortarla en dados de aproximadamente 1 centímetro de lado.

Cuando veamos que la cebolla se empieza a dorar, añadimos las patatas, revolvemos bien y lo seguimos dejando a fuego medio para que se vayan ablandando las patatas.

Lavamos el calabacín y cortamos en dados del mismo tamaño que las patatas, los añadimos a la sartén, revolvemos bien y echamos sal al gusto. Siempre es mejor no pasarse y poder rectificar al final.

Bajamos el fuego (en una vitro sería más o menos 3/12) y lo dejamos cocinar entre 15 y 20 minutos removiendo y vigilando de vez en cuando hasta que la patata y el calabacín estén tiernos.

Batimos bien los huevos, bajamos el fuego al mínimo que de la cocina y echamos los huevos a la sartén para cuajar el revuelto tal como os contamos en el vídeo de cómo hacer huevos revueltos perfectos.

Rectificamos de sal y servimos inmediatamente. Yo en esta ocasión lo he acompañado simplemente de una ensalada de tomate con un poco de sésamo tostado por encima.

Resultado

Este zarangollo murciano es otra receta sencillísima para incorporar al recetario del día a día y una forma estupenda de comer más verduras sin que uno tenga la sensación de que solo come verde. Creedme y probadla, que no os vais a arrepentir.