Un chef con estrellas Michelin, rotundo sobre la receta con calabacín más sabrosa del verano: "Huele que alimenta"

En puré, en tortilla y a la plancha es como más nos hemos comido el calabacín en casa de nuestros padres, pero esta hortaliza tan ligera es también muy versátil.

Para el chef Jordi Cruz, con cinco estrellas Michelin repartidas entre los tres restaurantes que dirige, el calabacín, cocinado de una manera algo más creativa, puede ser la guarnición perfecta para las comidas de verano.

Para ello, en un vídeo compartido en su perfil de Instagram, el cocinero catalán ha compartido una receta de calabacines al vapor con ajo y orégano, que es la cosa más sencilla del mundo, pero que, según cuenta, "huele que alimenta" y está delicioso.

Pasta con calabacín, queso y pimienta negra, un plato delicioso y asequible

Son muy pocos ingredientes los que se necesitan para preparar esta guarnición y menos aún el trabajo necesario por nuestra parte para llevarla a cabo. Se trata solo de aromatizar los calabacines y dejar que se vayan cocinando.

La receta de calabacines más ligera del verano

Jordi Cruz, a lo largo de su último directo emitido en Instagram, aprovechó para asar un pollo y sugerir algunas guarniciones muy veraniegas. Entre ellas, esta ligerísima receta con calabacín.

Como guarnición para los meses más calurosos del año, esta es una receta que reúne cualidades nutricionales muy valiosas.

Es un plato ligero, bajo en calorías y grasas, perfecto para acompañar carnes, pescados o incluso platos vegetarianos, sin recargar la comida y aportando volumen al plato.

El ingrediente principal, el calabacín, es una hortaliza con un alto contenido de agua y muy pocas calorías, lo que ayuda a mantener la hidratación en verano.

Saciante y proteica: la receta que preparo en 15 minutos cuando me apetece cenar algo delicioso

Además, aporta fibra, que favorece el buen funcionamiento del aparato digestivo y proporciona una mayor sensación de saciedad.

También contiene pequeñas cantidades de vitamina C y ácido fólico, ambos necesarios para el correcto funcionamiento del sistema inmunitario y el metabolismo celular, aunque hay que tener en cuenta que parte de estos nutrientes se pierden con la cocción.

Un punto muy interesante de esta receta es el uso de caldo de pollo como ingrediente para añadir sabor sin necesidad de recurrir a grasas como la mantequilla, que son habituales en los platos horneados.

El toque de aceite de oliva virgen extra al final del horneado aporta ácidos grasos saludables, especialmente si se utiliza con moderación. Por su parte, el orégano, tanto seco como fresco, no solo enriquece el plato en aroma y sabor, sino que también ofrece compuestos antioxidantes de origen vegetal.

Más ideas de guarniciones saludables que son perfectas para el verano

El verano es una época en la que nuestro propio cuerpo nos pide platos más ligeros y es el mejor momento del año para probar nuevas recetas con verduras. Muchas de ellas es muy probable que acaben formando parte de nuestro recetario.

A continuación, hemos seleccionado unas cuantas ideas sencillísimas que tienen algo en común, están todas deliciosas.

• Berenjenas asadas con miso y sésamo. Cortamos las berenjenas en mitades, hacemos cortes superficiales en la pulpa, las sazonamos y las horneamos a 180 °C durante 30-40 minutos. Para terminar, las pincelamos con una mezcla de pasta de miso, un poco de miel y unas gotas de vinagre de arroz.

• Tomates cherry confitados. Ponemos los tomates cherry enteros en una fuente, los regamos con aceite de oliva virgen extra, una pizca de sal, azúcar y hierbas aromáticas como tomillo o comino. Horneamos a baja temperatura (130-140 °C) durante 1 hora y quedan perfectos para acompañar carnes y pescados.

• Pimientos rojos al horno con ajo y comino. Asamos los pimientos enteros a 200 °C hasta que la piel se haya tostado y empiece a desprenderse. Una vez templados, los pelamos y cortamos en tiras. Los aliñamos con aceite de oliva, ajo laminado y una pizca de comino. Se conservan bien varios días en la nevera y se pueden usar en tostas, ensaladas o incluso en pizzas.

• Judías verdes al vapor con limón y almendras. Cocemos las judías verdes al vapor durante unos 6-8 minutos hasta que estén tiernas, pero aún al dente. A continuación, las salteamos ligeramente con un poco de aceite, ralladura de limón y almendras laminadas tostadas. Están buenísimas.