El chef José Andrés en un montaje de El Español iStock
El chef José Andrés lo advierte: "Para hacer unos garbanzos con mejillones increíbles, el truco es usarlos de bote"
Muchos son los cocineros profesionales que recurren a las legumbres en conserva para preparar platos que se inspiran en el recetario tradicional, pero sin necesidad de pasar horas en la cocina.
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En COCINILLAS nunca nos cansamos de repetir que las legumbres en conserva son un comodín que nunca tendríamos que dejar de tener en la despensa.
No somos los únicos que pensamos así, pues incluso chefs reconocidos dentro y fuera de España se han encargado de poner en valor este tipo de productos en numerosas ocasiones.
En esta ocasión, ha sido el chef José Andrés quien desde su cocina en el programa Vamos a cocinar con José Andrés ha defendido el uso de los garbanzos de bote como alternativa a los garbanzos secos.
De este modo, según explica, se pueden preparar unos garbanzos con mejillones que "parecen tradicionales, pero hechos en un segundo".
La receta de garbanzos con mejillones que propone José Andrés es como un potaje de los de siempre que, según él mismo dice, puede recordar a los garbanzos con espinacas y que están "para chuparse los dedos". La única diferencia es que con los garbanzos de bote, se hace en tiempo récord.
Ingredientes para hacer los garbanzos con mejillones de José Andrés
- Garbanzos cocidos de bote, 600 g (escurridos)
- Mejillones frescos, 1,2 kg
- Cebolleta tierna, 2 ud
- Ajo, 3 dientes
- Vino blanco, 100 ml
- Laurel, 1 hoja
- Pimentón dulce, 1 cucharadita
- Perejil fresco, 10 g
- Aceite de oliva virgen extra, 2 cucharadas
- Sal, al gusto
Paso 1
En una olla grande, ponemos los mejillones junto con el vino blanco y la hoja de laurel. Tapamos la olla y cocinamos a fuego fuerte durante 3 a 5 minutos, hasta que los mejillones se abran. En cuanto se abran, los retiramos de la olla y reservamos tanto los mejillones como el líquido de cocción.
Paso 2
Picamos finamente la cebolleta tierna y los dientes de ajo y los reservamos.
Paso 3
En una cazuela amplia, calentamos el aceite de oliva a fuego medio y añadimos el ajo y la cebolleta. Sofreímos durante 5 minutos hasta que estén blandos y ligeramente dorados.
Paso 4
Añadimos el pimentón, bajamos el fuego y lo mezclamos bien.
Paso 5
Añadimos los garbanzos escurridos y enjuagados a la cazuela con el sofrito y vertemos el jugo colado de los mejillones. Removemos bien para que se integre todo.
Paso 6
Cocemos a fuego lento durante unos 10 minutos y sazonamos al gusto.
Paso 7
Para montar el plato, mientras los garbanzos terminan de cocerse, limpiamos los mejillones retirándoles las conchas.
Paso 8
Justo antes de servir, bajamos el fuego y colocamos los mejillones sobre la superficie de los garbanzos.
Paso 9
Para dar el toque final, espolvoreamos con el perejil fresco picado.
Una receta proteica y deliciosa
Desde el punto de vista nutricional, esta tan fácil es, además, una excelente combinación de proteínas de alta calidad, fibra y minerales esenciales.
Al juntar en el mismo plato una legumbre como el garbanzo con un molusco como el mejillón, se obtiene un plato que satisface tanto las necesidades energéticas como los requerimientos de macronutrientes en el marco de una dieta equilibrada.
Los garbanzos cocidos aportan aproximadamente 8 a 9 gramos de proteína por cada 100 gramos, junto con una importante cantidad de fibra dietética, que contribuye al buen funcionamiento intestinal, al control glucémico y a proporcionar una sensación de saciedad que evita la sensación de hambre entre horas.
Aunque las proteínas vegetales no siempre contienen todos los aminoácidos esenciales en proporciones óptimas, en este plato se complementan con las proteínas animales de los mejillones, lo que mejora significativamente el perfil proteico del conjunto.
Por su parte, los mejillones son una fuente muy rica en proteínas de alto valor biológico, con un aporte de unos 10-12 gramos de proteína por cada 100 gramos, además de contener vitamina B12, hierro, zinc, yodo y ácidos grasos omega-3.
Su bajo contenido en grasa y su densidad nutricional hacen que sean un excelente alimento para quienes desean llevar una dieta saludable manteniendo la masa muscular sin excesos calóricos e, incluso, para deportistas que desean aumentarla.
En definitiva, la receta que propone José Andrés, aporta alrededor de 20 a 25 gramos de proteína por ración y es un ejemplo perfecto de cómo la cocina tradicional se puede adaptar a los tiempos actuales en los que la falta de tiempo y el interés por llevar una alimentación equilibrada son cada vez mayores.