La salsa boloñesa no es solo una de las preparaciones más famosas de la cocina italiana, sino una receta que, aparte de deliciosa, es mucho más fácil de preparar de lo que piensas, pues el único secreto para que el resultado sea un éxito es la cocción a fuego lento. 

Ingredientes

  • Tomate triturado sin piel ni semillas, 800 g
  • Carne picada de ternera o mixta, 500 g
  • Panceta, 50 g
  • Zanahorias, 2
  • Apio, 1 rama
  • Cebolla, 1
  • Ajo, 2 dientes
  • Vino blanco, 50 ml
  • Aceite de oliva virgen extra, 50 ml
  • Sal, al gusto
  • Pimienta, al gusto

Cómo hacer salsa boloñesa italiana

No hace falta ser un gran cocinero para hacer una salsa boloñesa de diez, sino que basta con tener un poco de paciencia.

01: Preparar las verduras

Empezamos pelando las zanahorias, los ajos y la cebolla. Pelamos también el apio, pues aunque no tiene piel como tal, si tiene unas hebras exteriores duras que conviene retirar. Troceamos todo en brunoise (trozos de unos 2 milímetros). Si no somos muy hábiles con el cuchillo, podemos usar una picadora automática o un procesador de alimentos.

02: Sofreír las verduras

En una cazuela de fondo grueso, preferiblemente una cocotte, ponemos a calentar a fuego medio el aceite de oliva virgen extra. Añadimos los dientes de ajo picados muy finos y los dejamos cocinar a fuego medio hasta que suelten sus aromas.

Añadimos la cebolla, el apio y la zanahoria y los dejamos sofreír hasta que estén tiernas. 

03: Añadir las carnes y reducir el vino

Añadimos la carne picada y la panceta cortada muy fina, salteamos las carnes hasta que se empiecen a dorar, añadimos el vino blanco, subimos el fuego y dejamos que hierva durante unos minutos hasta que se evapore el alcohol.

04: Añadir el tomate y cocinar la salsa boloñesa

Añadimos el tomate triturado, salpimentamos ligeramente, tapamos la olla y dejamos cocinar a fuego lento durante al menos una hora. Pasado este tiempo, dejamos cocinar durante 20-30 minutos a fuego lento y con la olla destapada para que se evapore parte del agua del tomate.

Cuando la salsa esté espesa y la carne tierna rectificamos el punto de sal y pimienta.

05: Servir

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La salsa boloñesa podemos servirla no solo como acompañamiento de espaguetis, macarrones o pizzas, sino que también podemos usarla como relleno de lasañas, canelones e incluso empanadas y empanadillas.

Se trata de una salsa que congela muy bien, por lo que, al tratarse de una receta que necesita de una cocción bastante larga, merece la pena cocinarla en cantidades grandes para poder congelar algunas raciones y tenerlas disponibles para usarlas cuando las necesitemos y no tengamos el tiempo suficiente para preparar esta salsa.

Y cuando os animéis a prepararla en casa, no olvidéis enseñarnos cómo os ha quedado subiendo alguna foto a las redes sociales y etiquetándonos en Facebook o Instagram para que podamos verlas.