¿Os acordáis de las galletas Chiquilín? Pues estas galletas de coco a mí me las recuerdan muchísimo, igual de crujientes, con ese inconfundible sabor tostado y, por si fuera poco, caseras y fáciles de preparar.

Ingredientes para 24 galletas

  • Harina de trigo, 250 g
  • Azúcar, 100 g (*)
  • Mantequilla, 120 g (**)
  • Coco rallado, 100 g
  • Huevo, 1 (**)
  • Extracto de vainilla, 1 cucharadita
  • (*) Yo he puesto 50 g de azúcar glas y 50 g de azúcar de coco
  • (**) Deben estar a temperatura ambiente.

No es necesario tener ninguna máquina especial para repostería, pues simplemente con el accesorio picador de una batidora de brazo convencional se obtiene un resultado estupendo y sin necesidad de ser muy experto en estas lides. Así que venga, manos a la obra, que nos vamos a poner a hacer galletas de coco.

Preparación de las Galletas de coco

  1. En el vaso picador de la batidora o en un procesador de alimentos ponemos la mantequilla y el azúcar. Mezclamos bien hasta tener una crema.
  2. Añadimos el huevo y la esencia de vainilla, y seguimos batiendo a velocidad alta hasta obtener una mezcla esponjosa.
  3. Añadimos el coco y batimos hasta que esté completamente integrado.
  4. Finalmente integramos la harina en la masa añadiéndola cucharada a cucharada. Cuando hayamos echado más o menos la mitad de la harina, tendremos que bajar la velocidad porque la masa será más densa y necesitaremos emplear más fuerza (pensad en el motor de un coche, a más velocidad, menos fuerza, por eso en las cuestas hay que reducir la marcha).
  5. Cuando hayamos integrado toda la harina seguiremos amasando a velocidad baja hasta tener una masa lisa que se despegue de las paredes.
  6. La envolvemos en papel film y la dejamos como mínimo una hora en la nevera.
  7. Pasado este tiempo la estiramos con el rodillo (será más fácil si usamos un papel film tal como veis en las imágenes de la galería) hasta que tenga un espesor de unos 3 mm.
  8. Cortamos  y decoramos las galletas como más nos guste (podemos hacerlas cuadradas y lisas cortando la masa con un cuchillo), y las pasamos con ayuda de una espátula a una bandeja forrada con papel de horno que la guardaremos en la nevera mientras se calienta el horno.
  9. Encendemos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo sin ventilador. Cuando haya alcanzado la temperatura, sacamos las galletas de la nevera y las horneamos durante 15 minutos hasta que estén doradas.
  10. Las dejamos enfriar en una rejilla y ya podremos disfrutar de nuestras riquísimas galletas de coco caseras.

Resultado

Estas galletas de coco caseras son deliciosas como merienda acompañadas de un buen vaso de leche fría, o como parte de un desayuno completo. Si se guardan en una lata o en un bote hermético se conservan un par de semanas en perfectas condiciones, aunque es más que probable que os las acabéis antes.

Nota

Como no llevan levadura, estas galletas de coco no suben en el horno ni se desparraman por lo que no hay necesidad de dejar excesiva separación entre ellas al colocarlas en la bandeja.

¿Queréis unas cuantas galletas de coco para desayunar mañana?