Si pensamos en la Semana Santa, lo primero que se nos viene a la cabeza son las deliciosas torrijas, ese postre que no suele faltar en ninguna casa en estas fechas. Este año, os invitamos a dar un paso más allá en la cocina y una vuelta a la receta de las torrijas, con estos impresionantes cupcakes que os recordarán al clásico pan mojado en leche, pasado por huevo, frito y rebozado en azúcar y canela. Os animamos a hacerlo porque, sin duda, conseguiréis sorprender a vuestras familias y amigos con un clásico reinventado.
Preparación de los cupcakes de torrija
Comenzamos poniendo en un cazo la leche, con la cáscara de limón y una rama de caneal, al fuego durante 5 minutos, sin que llegue a hervir, y retiramos para que se temple. Mientras, mezclamos en un bol el azúcar, con dos cucharadas de canela en polvo y 60 ml de leche, cuando todos los ingredientes estén integrados, añadimos un huevo y la harina, que previamente habremos tamizado. Posteriormente, agregaremos la leche que habíamos reservado, y lo unimos todo con la ayuda de unas varillas o una batidora. Por último, echamos en un recipiente una cucharadita de vinagre, y media de bicarbonato sódico, y cuando empieza a burbujear lo incorporamos a la mezcla anterior.
En un molde para cupcakes, colocamos los papelitos en cada compartimento, y lo rellenamos, hasta la mitad, con la mezcla anterior. Para terminar, introducimos el molde en el horno, previamente precalentado, a a50º durante 20 minutos. Para comprobar que los pastelitos están listos, pinchamos uno de ellos con un palillo y si sale seco es que están en su punto. Los sacamos y los dejamos en el molde 5 minutos, para posteriormente sacarlos y dejarlos enfriar sobre una rejilla.
Para la hacer el buttercream, o crema de mantequilla, mezclaremos la mantequilla, a temperatura ambiente, con el azúcar glacé, las 2 cucharadas de leche, y la canela en polvo, al gusto. Cuando tengamos una mezcla densa y homogénea, la introducimos en una manga pastelera y con la boquilla que más os guste, yo he usado la 1M de Wilton, decoráis los cupcakes de dentro a fuera. Espolvoreamos con canela en polvo, y ¡a comer!
Resultado
Los hice como prueba en mi casa, donde todos son amantes de las torrijas, con temor a que no les convencieran. Pero nada más lejos de la realidad, ¡los cupcakes de torrija encantaron! Se quedaron impresionados con el delicioso sabor a torrija que tenían, y en una hora habían volado todos. ¡Tenéis que probarlos, están buenísimos!