¿Has probado alguna vez un helado de Cookie Dough? Si lo has hecho y te ha gustado, seguro que lo que más te ha gustado han sido los trocitos de masa de galleta que trae. ¡Pues esta receta sabe a eso! De hecho ya estoy pensando en elaborar próximamente mi propio helado de Cookie Dough, lo cual no significa otra cosa que, efectivamente, masa de galleta.

Desde que vi esta receta en Objetivo Cupcake Perfecto (si eres goloso por naturaleza, seguramente ya lo conozcas, y si no ¡ya estás tardando!), no me la pude sacar de la cabeza. ¿Por qué? Porque estamos hablando de una bola de masa de galleta cruda y yo soy una persona que me tengo que controlar duramente para no comerme las masas a cucharadas antes de hornearlas.

El caso, es que como es súper fácil de hacer y con ingrediente que suelo tener por casa, no tardó mucho en llegar un domingo de gula en el que ya no pude aguantarme más. Pero ¡horror! no tenía mantequilla.

De la golosa incontrolable que llevo dentro, nació entonces esta adaptación. Me di cuenta de  que lo que sí tenía era mantequilla de cacahuete y pensé que así debería estar igual de bueno. Por suerte o por desgracia, no me equivoqué y en tres días estas delicias desaparecieron de mi nevera.

¿Os animáis?

Preparación

Comenzamos batiendo la mantequilla de cacahuete (a temperatura ambiente) con el azúcar durante tres minutos a máxima velocidad. Añadimos la leche y la vainilla y batimos un poquito más. Agregamos la harina y seguimos batiendo,ahora despacio. Veréis que la mezcla se torna granulosa, como cuando hacéis masa quebrada, pero nos os preocupéis porque se une al presionarlo con las manos.

Cuando la harina está bien mezclado, incorporamos el chocolate con leche picado de manera irregular y, con las manos, formamos una bola, presionando bien los todos los ingredientes. Envolvemos en papel film y refrigeramos, al menos, media hora.

Pasado este tiempo, hacemos bolitas de unos 2,5 cm de diámetro y las vamos colocando sobre una bandeja. Si hace mucho calor,mejor que seáis rápidos porque la mantequilla comienza a derretirse y se ablanda mucho la masa. Así que si hay niños rondando por la casa, puede ser un buen momento para pedirles ayuda que, en esto de modelar,quizás tengan más práctica que tú. Cuando terminéis, las lleváis al congelador 15 minutos.

Ya casi os las podéis comer, solo un último pasito. Derretimos el chocolate negro con una cucharada de mantequilla, en el microondas o a baño maría y bañamos cada bola en él. Dejamos que sequen unos minutos antes de devorarlas sin piedad.

Resultado

Una cookie de mantequilla de cacahuete cruda, y ¿a qué cocinillas no le tientan las masas crudas?

Vamos, si yo aprendí a cocinar rebañando los boles con restos de bizcocho de mi abuela 🙂

Si os ha gustado no dejéis de preparar la versión original, está de muerte. ¡Si, no tengo remedio! El lunes salí corriendo a comprar mantequilla para probarla. Tenía que comparar…

Al menos, reduje las cantidades a un cuarto para no tener una sobredosis de azúcar. La textura es mucho más cremosa, ya que la mantequilla de cacahuete no se monta con el azúcar como la común.

Noticias relacionadas