La verdad es que me hacen mucha gracia los nombres con los que los británicos bautizan a sus platos, si ya el otro día tenía su gracia el “conejo galés” que nada tiene que ver con esa carne, la receta de hoy también tiene un nombre que se las trae y es que Toad in the hole, literalmente, significa “sapo en el agujero” ,pero os prometo por lo más sagrado que no vamos a tener que irnos a ninguna charca a capturar anfibios para preparar la comida, que aquí la única carne que vamos a necesitar son unas ricas salchichas frescas con las que vamos a preparar un delicioso pastel con una receta de esas sencillas a más no poder y con las que cualquiera que se sienta capaz de batir un huevo triunfará seguro.

Aunque es una receta que lleva un ratito prepararla, no os asustéis, que el trabajo a realizar por nosotros es casi nulo,  y del resto ya se encarga el horno. ¡Así que tomad nota que allá vamos!

Preparación de Toad in the hole, pastel inglés de salchichas

  1. Tamizamos la harina, añadimos la leche y mezclamos todo bien con unas varllas.
  2. Incorporamos la mostaza y mezclamos.
  3. Incorporamos los huevos, mezclamos bien y dejamos reposar la mezcla durante 30 minutos.
  4. Mientras tanto, precalentamos el horno a 220ºC con calor arriba y abajo sin ventilador.
  5. Engrasamos un molde con el aceite y colocamos las salchichas que previamente habremos pinchado para que no exploten.
  6. Cuando la masa lleve 15 minutos de reposo metemos las salchichas en el horno y las cocinamos durante 15 minutos, de manera que las salchichas estén listas cuando hayan transcurrido los 30 minutos de reposo de la masa .
  7. Ponemos la sal y la pimienta en la masa y mezclamos.
  8. Sacamos las salchichas del horno y rápidamente echamos la masa por encima. Hemos de tener cuidado porque puede burbujear y salpicar.
  9. Horneamos el conjunto durante unos 35-40 minutos hasta que esté dorado y crujiente por los bordes.
  10. Se sirve en la misma fuente y se come calentito.

Resultado

Durante el horneado la masa subirá mucho, pero al sacarla del horno se “desinflará”  y asomarán las salchichas como si fuesen sapos saliendo de un agujero, de ahí el nombrecito tan curioso.

Otra opción es cortar las salchichas en trozos y repartirlas en fuentes individuales, aunque a mí no me entusiasma demasiado porque luego hay que estar calculando cómo repartir la masa. Pero eso ya como vosotros veáis. Sea como sea va a ser una receta original con la que podéis sorprender en una cena o como primer plato de una comida con amigos.

También se pueden encontrar versiones de la receta en las que, aparte de las salchichas, se añaden trozos de cebolla o hierbas aromáticas a la masa.

Para estas cantidades he utilizado una fuente de horno de 26 x 26 cm y es recomendable utilizar una de tamaño igual o similar.