
Tomates cherry pelados iStock
Ni agua caliente ni un cuchillo: el sencillo truco de un experto para pelar los tomates cherry rápido y sin esfuerzo
Es un sencillo paso muy útil si queremos usar los tomates para preparar salsas sin encontrar pieles.
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Disfrutar de una salsa de tomates cherry es una experiencia que merece mucho la pena. Estos tomates en miniatura tienen una mayor concentración de azúcares y de acidez, por lo que tienen un sabor más intenso y equilibrado.
Desde el punto de vista nutricional, son fuente importante de vitamina C, licopeno -en mayor cantidad que los tomates grandes- y compuestos fenólicos con acción antioxidante.
Estos componentes ayudan a neutralizar radicales libres, lo que puede contribuir a la prevención del envejecimiento celular y enfermedades crónicas. También aportan fibra y potasio.
Cómo pelar tomates cherry
Los tomates cherry suelen consumirse en crudo o utilizarse para la elaboración de productos gourmet, secos o conservados en aceite. En cambio, no es habitual verlos en salsas, por el engorro que supone retirar la piel.
Algunos trucos populares para pelar los tomates cherry, aunque eficaces, nos obligan a armarnos de paciencia y a invertir un rato de nuestro tiempo en realizarla.
Procedimientos como masajearlos ligeramente para que se afloje la piel y poder dar un corte y retirarla tirando de ella o utilizar un cuchillo de sierra para pelarlos uno por uno pueden ser inasumibles si tenemos que pelar muchos.
Si no tenemos prisa y vamos a utilizar los tomates para una salsa, se pueden congelar. Al sacarlos del congelador, se sumergen en agua caliente y la piel se resquebrajará desprendiéndose prácticamente sola.
No hace falta descongelar el tomate pelado para incorporarlo a una preparación en la que se va a cocinar, como un guiso o una salsa; así quedará fenomenal. Pero no tendrán una buena textura si los descongelamos para consumir en crudo.
El método de un profesional
Si necesitamos pelar muchos tomates cherry en pocos minutos y que estén listos para comer, lo único que necesitamos es una freidora y agua con hielo. Suena inverosímil, pero es un método altamente eficaz.
Así lo ha mostrado un cocinero en un vídeo subido al perfil de @makroesp en Instagram, en el que escalda los tomates en una freidora a máxima potencia en vez de en agua hirviendo.
Con este método, que muchos usuarios critican en los comentarios, se consigue desprender la piel de manera casi instantánea y, contrariamente a lo que opinan estas personas, sí tiene ventajas respecto al escaldado en agua.
En primer lugar, el aceite transmite el calor de forma más rápida y eficiente debido a su mayor temperatura de trabajo, 180 ºC en vez de los 100 ºC a los que hierve el agua.
Esto permite que la piel del tomate se despegue casi al instante sin afectar la pulpa, ya que el contacto dura apenas unos pocos segundos. En el agua se necesita más tiempo y el interior se podría empezar a cocinar.
El contraste térmico posterior con el agua helada, no solo preserva aún más la textura evitando que el calor se difunda hacia el interior, sino que acaba por despegar la piel hasta el punto de poder retirarla con un simple pellizco.
Además, al no entrar en contacto con agua, se evita la disolución de compuestos hidrosolubles como azúcares, ácidos y vitaminas. Esto conserva mejor el sabor y las propiedades nutricionales del tomate.
También se reduce la absorción de humedad, algo deseable si queremos utilizar los tomates en ensaladas o cualquier otra preparación en la que necesitemos que los tomates cherry mantengan su textura firme.
No obstante, el baño en agua helada también debe tener una duración muy breve, pues de lo contrario, perderíamos parte de las ventajas.
En cuanto a los compuestos liposolubles, como el licopeno, la exposición al aceite es tan breve que la migración del mismo al aceite que podría producirse sería despreciable.