Image: Crispin Glover: Soy un artista de vaudeville

Image: Crispin Glover: "Soy un artista de vaudeville"

Cine

Crispin Glover: "Soy un artista de vaudeville"

El actor y cineasta, que dio vida a George McFly en Regreso al futuro, muestra sus películas en su espectáculo Big Slide Show en La Casa Encendida

11 junio, 2012 02:00

Crispin Glover


Para la gran mayoría de los espectadores, Cristin Glover (New York, 1964) es George McFly, el padre de Michael J. Fox en Regreso al futuro, un escritor de relatos de ciencia-ficción, locamente enamorado de Lorraine y el blanco de todas las collejas en el instituto. Un pringao, un ‘nerd', un 'pre-geek.... Recordarán a Biff Tannen golpeando su cabeza y diciendo aquello de: "¿Hay alguien en casa? ¡Piensa, McFly, piensa!". Es un personaje inolvidable del cine de los ochenta, y su papel sobresale hoy como el más icónico de toda una saga de personajes memorables en el audiovisual norteamericano, toda una tipología que llega hasta la serie The Big Bang Theory. "No estoy muy seguro de esto -le dice Glover a El Cultural-. No estoy muy actualizado con el cine y la ficción americanos. Pero asumo que hubo otros antes, si bien George McFly supo manifestar de un modo único su cultura y su tiempo".

El papel que le transformó en un icono generacional -recuperado en el retro-film Jacuzzi al pasado (Steve Pink, 2010)- fue el que le acabó convirtiendo en la única persona que ha llevado a los tribunales a Steven Spielberg, que por problemas en la consecución de un acuerdo económico decidió adjudicarle el papel a otro actor (con prótesis) en las secuelas de Regreso al futuro. En los títulos de crédito de su filme What is It? (2005), el primero de la triología inacabada It, puede leerse: "Esta película no aboga de ningún modo por el asesinato de Steven Spielberg". En todo caso, Crispin Hellion Glover es una oveja negra en el rebaño de la cultura mediática, y con los años ha ido adquiriendo el estatuto de personalidad de culto por el excéntrico cuerpo creativo que ha ido desarrollado al margen de sus papeles en la industria, siempre en personajes excéntricos, para filmes como Corazón salvaje (David Lynch, 1990), The Doors (Oliver Stone, 1991), Dead Man (Jim Jarmusch, 1995), Los Ángeles de Charlie (McG, 2000), Willard (Glen Morgan, 2003) o Alicia en el País de las Maravillas (Tim Burton, 2010).



Fotograma de What is it?


Glover da rienda suelta a su excentricidad, sin embargo, en sus trabajos de auto-edición de libros (Rat Catching, Oak Mot) y también como presentador de sus propias y surrealistas películas -What is It (2005) y It is Fine. Everything is Fine (2007)- a través de shows itinerantes que él mismo presenta. Martes y miércoles (12 y 13 de junio), La Casa Encendida acogerá en Madrid este espectáculo, titulado Big Slide Show, en el que Glover proyectará los dos largometrajes que ha dirigido acompañados de una actuación, un coloquio con el público y la firma de ejemplares de sus libros. Estas sesiones pondrán el broche de oro al ciclo "Luces y sombras de Nunca Jamás", comisariado por Jordi Costa, que ha tenido lugar a lo largo de los últimos dos meses en la institución cultural madrileña. En esta entrevista con Elcultural.es, Glover explica en qué consistirá el espectáculo y desentraña algunas claves de su singular obra.

- Convierte usted las proyecciones de sus películas en una suerte de acontecimiento. ¿Qué debe esperar el público?
- El espectáculo en directo que acompaña a las proyecciones no debe ser desestimado. Es en gran medida por lo que la gente va a ver mis películas y la mayoría de la financiación para seguir haciéndolas procede de la recaudación de estos espectáculos y de los libros que vendo después. Para el Big Slide Show interpreto una narración dramática de una hora de duración de ocho libros distintos que he escrito a lo largo de los años. La materia de mis libros procede de viejas ediciones del siglo XIX que he modificado para convertirlas en otra cosa. Son libros profusamente ilustrados con dibujos originales, imágenes y fotografías modificadas. Cuando empecé publicando estos libros en 1988 la gente decía que debía hacer lecturas. Pero el libro tenía tantas ilustraciones determinantes para la narración de la historia que la única manera de que una lectura tuviera sentido era con representaciones visuales. Así es cómo me di cuenta de que era necesario montar un espectáculo, que acompañara a las proyecciones, en el que las ilustraciones de los libros se proyectaran a mis espaldas durante mi lectura, y que fuera más bien una actuación.

La importancia del show

- ¿Concibe sus películas, sus libros y sus shows como un conjunto?
- En gran parte, son dependientes entre sí. Cuando estaba editando mi primera película, What is it?, sentí reminiscencias con la forma en que trabajaba con mis libros. Principalmente porque estaba expandiendo a largometraje lo que había sido filmado con la idea de hacer un cortometraje. Estaba tomando imágenes que había rodado con un propósito original para luego reformular una idea muy diferente, y además estaba escribiendo, rodando y montando prácticamente al mismo tiempo. De algún modo me sentía cómodo con este método porque es muy parecido al que empleo con los libros. Me llevó un tiempo, pero en 1992 empecé con las actuaciones de lo que ahora llamo "Crispin Hellion Glover's Big Side Show (Part 1)". El contenido del espectáculo no ha cambiado desde entonces, si bien mi performance se ha hecho más dramática y menos leída. Los libros no cambian pero las actuaciones por supuesto varían sensiblemente en función de mi energía y de la energía que recibo del público.

- Es desde luego un modo muy original de dar a conocer su trabajo.
- Soy consciente de que utilizo mi popularidad como actor en el cine mainstream a lo largo de 25 años. El hecho de que me embarque en una gira con mis películas, con un espectáculo de lectura y unas sesiones de preguntas y respuestas con el público, ayudan a su distribución, de la que tengo un control absoluto. Considero que lo que hago sigue los pasos de los intérpretes de vaudeville, que ha sido la principal forma de entretenimiento durante la mayor parte de la historia de EEUU. Soy en esencia un artista de vaudeville. El modo en que distribuyo mis películas no es el más tradicional en el sentido contemporáneo de la distribución cinematográfica, pero sí es muy tradicional cuando miramos más atrás.

Diálogo con el espectador

- Este sistema exige una implicación directa del creador con el espectador...
- Desde luego, pero obtengo muchas ventajas de ello. La mayoría de las ventajas no son monetarias, sino de puro control creativo. Disfruto mucho viajando y visitando lugares, conociendo a gente, actuando y discutiendo las películas con el público. Creo que es muy importante el coloquio posterior a las proyecciones. Me permite ser agradecido con todos esos individuos que vienen a mis espectáculos, y que vean que no hay un intermediario corporativo. Las desventajas son que la promoción y los viajes y los bolos exigen de mí una gran parte de tiempo y de energía, y también que la cantidad de gente que ve mis películas es mucho más pequeña que si las distribuyera en el sentido tradicional.



Fotograma de It is fine! Everything is fine


- Qué referencias o inspiraciones han influido en su trabajo?
- Soy un gran admirador de los formalistas surrealistas. Probablemente su gran descubrimiento fue comprender que utilizar la asociación libre de Freud para analizar el subconsciente de sus pacientes es probablemente más útil para la expresión artística que para las terapias mentales.

- ¿Se siente cercano a creadores como Buñuel, Breton, Dalí, Max Ernst, etc.?
- Buñuel es el padre del cine surrealista y mientras editaba What is it? yo estaba leyendo Mi último suspiro y un libro de entrevistas con Buñuel. Mi último suspiro es uno de los libros más hermosos que he leído nunca. No diré que What is it? sea un filme tan importante como Un perro andaluz o La edad de oro, pero la sintaxis cinemática que inventó Buñuel ha sido una influencia decisiva en mi película, y era perfectamente consciente de ello cuando la filmaba. Admiro a Dalí, a Max Ernst, a Breton y a todos los auténticos surrealistas. Gaudí es mi arquitecto preferido. Admiro mucho la cultura española. Puede que no lo parezca, pero hice un test de ADN de mis padres y comprobé que tengo una parte importante de ascendencia española. Hace poco leí un poema de Lorca en torno al concepto del "duende", que creo que es algo que tiene que ver con todos los artistas españoles.

Preguntas necesariamente incómodas

- Dirige en sus películas a actores con parálisis cerebral y con síndrome de Down. ¿Con qué intención?
- Siempre dejo muy claro que What is it? no es una película sobre el síndrome de Down, sino mi reacción psicológica a las restricciones de mercado que han tenido lugar en los últimos treinta años del cine. Cualquier cosa que pueda incomodar al espectador es necesariamente amputada, o si no la película no será producida ni distribuida de forma industrial. Esto es muy perjudicial para la cultura porque se trata del momento en que un espectador se reclina en su butaca, mira arriba a la pantalla y piensa para sí mismo: "¿Es correcto esto que estoy viendo? ¿Es malo? ¿Debería estar aquí? ¿Debería el director haber hecho esto? ¿Qué es esto?". Y ese es el título de la película.

- Por lo tanto quiere desafiar al espectador con tabús culturales...
- ¿Qué es un tabú cultural? ¿Qué significa que los tabúes hayan sido ubicuamente extirpados de la cultura mainstream? Es malo que las películas no lancen preguntas incómodas al espectador porque solo entonces es cuando estos pueden tener una experiencia educacional. Lo que está pasando en nuestra cultura es que no está permitido hacer determinadas preguntas. Esto nos estupidiza. Así que What is it? surge de una reacción directa contra los contenidos de la cultura mediática. Quiero que la gente piense por sí misma.

- ¿Hay alguna intención documental en que Steven C. Stewart, que tiene parálisis cerebral, protagonice It is fine! Everything is Fine, la segunda parte de su trilogía?
- Siempre trato de incorporar una cualidad orgánica a todo lo que ocurre delante de la cámara. Steven C. Stewart es protagonista de It is fine! Everything is Fine porque escribió el guión. Nació con un caso severo de parálisis cerebral y tiene problemas de entendimiento. Cuando murió su madre, a Steve le encerraron en una residencia durante diez años. La gente que le cuidaba le llamaba MR, abreviatura de "retrasado mental". Llamar así a alguien no es bonito, pero Steve tiene una inteligencia media. Cuando salió de la residencia escribió el guión, y aunque se inscriba en el género del thriller criminal, la verdad de su vida emerge con mucha más claridad que si hubiera escrito una autobiografía convencional. Steve murió un mes después del rodaje, y estoy especialmente orgulloso de haber hecho la película con él. Creo que It is fine! Everything is Fine es lo mejor que haré en toda mi carrera.

- ¿Tiene pensado completar la trilogía en breve?
- No debería entrar en detalles, pero no será lo próximo que ruede. It is Mine es un proyecto más complejo que los anteriores de la triología, que rodaré en la República Checa, así que aún queda bastante tiempo para que pueda poner en marcha esa producción. Me apartaré de la trilogía para realizar otros proyectos que tratan asuntos distintos.

(Más información en CrispinGlover.com).