Ingredientes

Para la carne

  • Aceite de oliva
  • 500 g de carne picada de ternera
  • 1/2 cebolla
  • 1/2 pimiento verde
  • 2 dientes de ajo
  • 1 cucharada de comino en polvo
  • 250 ml de caldo de pollo

Para la salsa de queso

  • Aceite de oliva
  • 1/2 cebolla
  • 3 jalapeños
  • 2 dientes de ajo
  • 2 tomates (tamaño medio)
  • 350 ml de leche
  • 250 g de queso emmental rallado
  • 250 g de queso cheddar rallado
  • Guacamole
  • Crema agria
  • Cilantro y cebollino

Pocas cosas me llenan más el alma que unos nachos. Especialmente si están acompañados de una salsa de queso para nachos tan suculenta como la de esta receta. Bueno, tampoco voy a mentir, amo todas las salsas de nachos que no queman la lengua pero a día de hoy esta es la que se ha ganado mi corazoncito.

Y por supuesto un par de bolsas de nachos para poder untar semejante delicia.

Cómo preparar la salsa de queso para nachos definitiva

1: Cocinamos la ternera picada

Foto por Asier G. Morato

Para empezar a preparar este pequeño milagro en forma de salsa de queso para nachos hay que poner una sartén a fuego fuerte con un poco de aceite. Cuando esté caliente añadimos la carne picada y cuando esté poco hecha la retiramos a un bol.

2: Cortamos y doramos la cebolla, el pimiento y los dientes de ajo

Foto por Asier G. Morato

Mientras se hace la carne, picamos la media cebolla, los dientes de ajo y el pimiento. Una vez retirada la carne, bajamos el fuego a fuerza media y lo cocinamos hasta que se doren. Cuando esté listo añadimos el comino y revolvemos para que se empape todo bien.

4: Juntamos todo y cocinamos a fuego lento con el caldo de pollo

Foto por Asier G. Morato

Para terminar con la primera parte, añadimos de nuevo la carne y echamos el caldo de pollo en la sartén donde lo cocinamos todo a fuego lento hasta que se evapore. Antes de servirlo en la fuente es buen momento para probarlo y salpimentar al gusto.

5: Preparamos el queso

Foto por Asier G. Morato

Con la carne ya lista (podemos dejarla a fuego suave en la sartén para que no se enfríe), es el momento de preparar la salsa de queso en si. Para ello picamos finamente media cebolla, los dientes de ajo y los jalapeños (echa más o menos según lo que te guste el picante) y los cocinamos en una sartén a fuego medio hasta que se doren. A continuación añadimos los tomates cortados en dados y esperamos a que se evaporen todos los jugos que hayan podido soltar.

Con esta base lista, es el momento de añadir los lácteos. Empezamos por incorporar la leche batida y esperamos a que se reduzca un poco (a fuego medio/alto) antes de añadir el queso rallado. La mejor forma de hacerlo es con el fuego suave y poco a poco mientras removemos con una cuchara. Así hasta que quede suave y uniforme.

6: Le damos el último toque

Foto por Asier G. Morato

Por último, volcamos la salsa de queso en la fuente (sobre la carne picada) y añadimos el toque final con una cucharada de crema agria, otra de guacamole y un poco de cebollino y cilantro picado.

Ya sólo te queda poner un buen puñado de nachos en un bol y dejar que la fiesta del queso comience. El éxito está asegurado.