
Primer plano de una mano exprimiendo un limón sobre un aguacate cortado.
Ni dejar el hueso ni usar zumo de limón: el truco definitivo para que los aguacates duren frescos el doble de tiempo
Descubre un truco sencillo que te permitirá conservar los aguacates frescos el doble de tiempo, preservando su sabor, textura y nutrientes.
Más información: El nutricionista Pablo Ojeda alerta a España sobre el aguacate: "Es una grasa maravillosa, pero..."
El aguacate ha logrado consolidarse como uno de los frutos más populares entre quienes buscan seguir una dieta completa y saludable, destacando tanto por sus excelentes propiedades y beneficios para la salud como por su textura suave y cremosa, que junto a su sabor lo hacen ser muy versátil en la cocina.
Actualmente, se utiliza en tostas, ensaladas e incluso como ingrediente principal en distintos platos, ya que se trata de un alimento que aporta proteínas, vitaminas, minerales y grasas saludables. Sin embargo, en muchas ocasiones no se llega a usar el aguacate en su totalidad, lo que hace que haya que guardarlo adecuadamente en la nevera.
Al igual que sucede con otras frutas, el aguacate tiende a oscurecerse con rapidez una vez que se ha cortado, lo que puede hacer que se acabe desperdiciando gran parte del producto. Este cambio de color tiene que ver con el daño que se produce en su estructura celular y que, aunque no lo hace incombustible, afecta tanto a su sabor como a su textura y apariencia.
Es por ello por lo que es imprescindible conocer el mejor método para guardar los aguacates en la nevera y que no se estropeen rápido, y que no tiene nada que ver con algunos de los trucos más habituales, como usar una capa de zumo de limón, usar papel film o guardar el aguacate en un tupper con agua.
Guardar aguacates en la nevera
La alternativa a estos métodos más clásicos es el de recurrir al uso de uno de los ingredientes más apreciados de la cocina mediterránea, como el aceite de oliva. Este ingrediente, que está repleto de propiedades nutricionales y usos en la cocina, funciona de manera similar al limón, aunque con la ventaja de que no aporta un sabor ácido al aguacate.
Para poner en práctica este método se debe colocar la parte expuesta del fruto boca abajo, sobre un plato con una fina capa de aceite de oliva en el fondo, o bien untar la pulpa directamente con un chorro de este aceite.
El proceso que hace que el aguacate se acabe oxidando es que entre en contacto con el aire. Por este motivo, al usar aceite de oliva se consigue crear una barrera que evita la entrada de oxígeno, siendo una buena forma de preservar el aguacate entero. Sin embargo, hay que tener en cuenta que no es el mejor método si el aguacate está machacado o untado por una superficie irregular, que impide que se cubra de manera uniforme.
El aceite de oliva es perfecto para que se conserve un aguacate abierto en las mejores condiciones, al actuar como una barrera protectora que limita la exposición de la pulpa al aire, consiguiendo así que se reduzca la oxidación. Cuando el aguacate se corta, las células quedan expuestas al oxígeno, haciendo que las enzimas presentes den comienzo a un proceso de oxidación que origina ese color marrón poco apetecible.
Al aplicar una fina capa de aceite de oliva sobre la superficie del aguacate, se bloquea el contacto directo del fruto con el oxígeno del aire. El aceite de oliva es un conservante natural que ayuda a prevenir el deterioro de los alimentos al mantenerlos aislados del aire, por lo que al utilizarlo se pueden retrasar los efectos de la oxidación 1-2 días.
Por otro lado, hay que hacer mención especial a las propiedades antioxidantes naturales que aporta el "oro líquido", lo que retrasa en mayor medida el proceso de oscurecimiento, haciendo especial hincapié en su contenido en polifenoles y vitamina E.
Estos antioxidantes naturales presentes en las hojas del olivo y la oliva, protegen al alimento frente a los microorganismos que pueden provocar un deterioro en el aguacate, permitiendo que conserven todos sus nutrientes, proteínas y vitaminas. Al mismo tiempo, el aceite de oliva crea una capa de hidratación que ayuda a que el aguacate mantenga su frescura y textura durante más tiempo.
Otros trucos para evitar la oxidación
Para evitar que el aguacate se oxide se debe tratar de limitar la presencia de oxígeno o bien inhibir las enzimas como el polifenol oxidasa, que es la que oxida los fenoles. Sin embargo, también se puede ralentizar la reacción usando el frío, ya que se necesita calor. Por este motivo, algunos trucos alternativos para evitar la oxidación son los siguientes:
- Mantén el aguacate en la nevera: a la hora de utilizar un aguacate, la parte sobrante tendrá que conservarse en la nevera, puesto que a temperatura ambiente y con presencia de aire, se oxidará con mayor rapidez.
- Añade cebolla fresca picada al táper: si se añade cebolla fresca picada al táper con el aguacate, será suficiente para poder conseguir que se mantenga en perfectas condiciones durante varios días.
- Introdúcelo tapado en un táper: otra estrategia pasa por conservar la parte de aguacate no utilizada dentro de un recipiente hermético o una bolsa de plástico estanca a la que se le haya quitado buena parte del aire. Cuanto menos aire tenga, se conservará en mejor estado.
- Llena el táper con agua: otro truco consiste en llenar el táper con agua, para que así disuelva la polifenol oxidasa y se evite la reacción que provoca la oxidación. De esta manera se consigue alargar la conservación, aunque la textura de la fruta se reblandece un poco.