El pasado miércoles 14 de junio se vivió un momento muy incómodo en Espejo Público. El magacín de Antena 3 conectó en directo con Nieves Herrero, quien presentaba su libro La Baronesa, el cual está escrito en clave biográfica y versa sobre la vida de Carmen Cervera, conocida popularmente como la baronesa Thyssen. Lo que era, inicialmente, un coloquio rutinario derivó en una incómoda entrevista que finalizó de forma abrupta. En plena promoción, la periodista acudió al programa Fiesta, de la cadena rival, en la que aclaró qué sucedió.

El motivo por el que Herrero aclaró lo sucedido en un formato de la cadena rival a Antena 3, Telecinco, fue porque tanto en Espejo Público como en Fiesta, está el periodista Aurelio Manzano como colaborador. Y fue, precisamente, por un mensaje que le transmitió Manzano a la autora lo que provocó la interrupción de la conexión. En pleno directo, el periodista le informó a Herrero que la baronesa tenía intención de interponer una demanda contra ella, dado que el libro es una “biografía no autorizada”.

Ante tal información, que Manzano solamente se limitó a transmitir, Herrero se defendió, declarando que “no hay absolutamente nada demandable” y, tras esto, la conexión se interrumpió bruscamente. Susanna Griso intentó impedir que la periodista se marchase de esa forma, pero fue en vano. Herrero se enfrentó a Manzano cara a cara en el magacín presentado por Emma García, donde el venezolano le expresó su disgusto por unos comentarios que realizó un día antes en Viernes Deluxe.

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La escritora estuvo presente la noche antes del magacín nocturno, donde desmintió al venezolano y calificó las informaciones que le había transmitido como “bulo”. “Eso me sentó muy mal, porque la información la di yo y yo no me manejo con bulos”, le expresó el periodista a la autora, recordándole su espantada en Espejo Público.

Aprovechando que estaba en el plató con Manzano delante, Herrero quiso justificarse y quitarle hierro al asunto. “Esa conexión que tú me dices fue con un ruido increíble, había muchos medios para hablar. Os habíamos dado 7 minutos y llevabais 17. Además, no se oía bien”, argumentó.

La discusión quedó en buenos términos, dado que la autora le pidió perdón al periodista por las formas en las que desmintió la información que dio, al calificarlas de “bulos”. Una vez resuelto el malentendido, Herrero habló sobre cómo el vínculo y la buena relación que tenía con la madre de Borja Thyssen se fue al traste por los múltiples cambios que la filántropa le exigía, señalando esta experiencia como “una de las más decepcionantes” de su vida laboral.