El primer ministro de Canadá, Mark Carney, asiste a un mitin durante su gira de campaña electoral del Partido Liberal en Laval, Quebec, Canadá, el 22 de abril de 2025.

El primer ministro de Canadá, Mark Carney, asiste a un mitin durante su gira de campaña electoral del Partido Liberal en Laval, Quebec, Canadá, el 22 de abril de 2025. Reuters

América

La guerra de Trump contra Canadá catapulta al 'elegido de Trudeau' en los sondeos a cinco días de las elecciones

Se calcula que cerca de 7,3 millones de personas han votado por adelantado, lo que supone un récord histórico de participación anticipada. 

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J. Atienza
Publicada

A solo cinco días de las elecciones generales en Canadá, el Partido Liberal —ahora liderado por el primer ministro interino Mark Carney— mantiene la delantera en las encuestas, con una ventaja que alcanza los cuatro puntos sobre sus rivales conservadores. Si ese margen se confirma en las urnas el próximo 28 de abril, allanaría el camino hacia una victoria aplastante frente al Partido Conservador, que hasta hace poco lideraba (con creces) todos los sondeos.

Según las proyecciones de encuestas publicadas por la radiotelevisión pública CBC, los liberales —formación que encabezó durante más de una década Justin Trudeau— cuentan actualmente con una intención de voto del 42,7%. En contra, el Partido Conservador de Pierre Poilievre tiene un 38,3%. Este panorama otorga 192 escaños para los liberales en la Cámara de los Comunes, superando con holgura los 172 necesarios para obtener la mayoría absoluta en un parlamento de 343 diputados. 

El ascenso de Carney —un economista de 60 años con escasa experiencia política— se ve impulsado por un contexto de altísima participación anticipada. La votación adelantada comenzó el viernes pasado y ha durado cuatro días. En las primeras 24 horas, cerca de dos millones de canadienses emitieron su voto, y para el martes, la cifra ya había alcanzado los 7,3 millones, un récord histórico. En comparación, en las elecciones de 2021, 5,8 millones votaron por adelantado. Canadá, con una población de 41 millones, cuenta con 28,9 millones de votantes habilitados.

De confirmarse estos datos, Carney protagonizaría una de las remontadas más sorprendentes en la historia política del país. Basta recordar que en enero, cuando Trudeau anunció su renuncia, los conservadores aventajaban a los liberales por 25 puntos, recoge la agencia Efe. ¿Qué ha cambiado desde entonces? La respuesta es sencilla: Donald Trump.

En un principio, la salida de Trudeau supuso un golpe para los liberales, que no contaban con un candidato alternativo fuerte. Sin embargo, la reelección de Trump en Estados Unidos, junto con sus amenazas de guerra comercial y declaraciones sobre una posible anexión de Canadá, ha alterado rápidamente el panorama electoral. El conocido como 'efecto Trump' —que habló de Canadá como el "estado 51"— ha debilitado la posición de los conservadores, ya que el electorado percibe al presidente estadounidense como una amenaza directa.

El primer ministro de Canadá, Mark Carney, asiste a un mitin en Quebec.

El primer ministro de Canadá, Mark Carney, asiste a un mitin en Quebec. Reuters

Además, son muchos los analistas que sostienen que la estrategia de campaña de Pierre Poilievre no ha conseguido adaptarse a la nueva (y convulsa) realidad. Durante años, Poilievre se ha dedicado a atacar a Trudeau con un lenguaje populista similar al del expresidente estadounidense. Pero, mientras el clima político se ha ido tensionando, él ha continuando centrando sus esfuerzos en atacar al contrincante, pero olvidándose de la amenaza externa.

Esta desconexión ha sido la que ha permitido a Carney erigirse como una suerte de figura de unidad nacional. En contraste con su antecesor, se ha mostrado más firme y confiado en la defensa de los intereses canadienses, recoge Reuters. Tal y como escribía esta semana el autor y comentarista Stephen Henighan en The Globe and Mail, "mientras Trudeau nunca ofreció a los progresistas una razón para ondear la bandera canadiense, Carney ha demostrado una confianza que Trudeau jamás tuvo: una fe inquebrantable en la existencia misma de Canadá".