Antonio Gárate en La hora cultural

Antonio Gárate en La hora cultural

Letras

Antonio Gárate: “En 'La hora cultural' queremos a los artistas y escritores en nuestro plató”

Tras el paréntesis estival, hoy, al filo de la medianoche, vuelve 'La hora cultural' en el Canal 24 horas. El más longevo y uno de los pocos programas culturales de la televisión española celebra su décimo aniversario

8 septiembre, 2021 13:23

Si hay un plató por el que han desfilado los protagonistas de la cultura de este país es el de La hora cultural, el único programa de periodicidad diaria (se emitía de lunes a jueves) de la televisión española dedicado íntegramente a las artes y las letras presentado y dirigido por Antonio Gárate. Tras haberse mantenido en emisión durante el confinamiento mediante conexiones telemáticas con sus invitados desde el inicio de la pandemia, el programa regresa al plató de Torrespaña para iniciar su décima temporada y recuperar poco a poco la normalidad. Seguirá emitiéndose al filo de la medianoche en el Canal 24 horas de TVE, pero ahora solo dos días a la semana: los miércoles y jueves.

Pregunta. Durante la pandemia tuvieron que recurrir a hacer las entrevistas por Skype, pero ¿es un formato de urgencia o van a seguir utilizándolo en esta nueva temporada?

Respuesta. Durante la pandemia tuvimos que reinventarnos como hicieron muchos colegas, de forma telemática. Era eso, o quedarte en el limbo. El momento era excepcional, y también había que contarlo, teníamos que estar ahí para escuchar la voz de los creadores, más allá de la de los científicos y políticos; de cómo lo estaban viviendo, qué lecciones nos está dejando esta pandemia. La calidad de la imagen, tener una buena iluminación, etc., era secundario; lo prioritario eran los testimonios. Pero empezar así la nueva temporada no tenía mucho sentido, sobre todo si quieres hacer entrevistas más amplias y tienes nombres relevantes. La normalidad es tener a los artistas, escritores y creadores en nuestro plató. No podemos generar un archivo en TVE con grabaciones en Skype de calidad precaria.

P. ¿Y por qué solo dos días y no cuatro?

R. Esta temporada es de recuperación de la normalidad después de la epidemia y, a partir de ahora, lo grabaremos en el plató, pero solo dos programas a la semana. Estamos intentando recuperar el ritmo de grabación de antes de la epidemia, pero todavía no estamos al cien por cien. Hemos preferido reducir la producción de programas y hacerlo con la calidad suficiente. Llegar a esta solución ha supuesto un gran esfuerzo y un respaldo importante por parte de la dirección de informativos y del Canal. Estamos muy agradecidos.

P. No es fácil mantener un programa de televisión diario dedicado a la cultura durante diez años. ¿Cómo lo ha conseguido? 

R. Creemos en lo que hacemos y en la función de servicio público de nuestro canal, por lo que informar sobre las manifestaciones culturales es esencial para definir nuestra sociedad y nuestra identidad. La cultura abre nuestros ojos, nuestro pensamiento, es alimento espiritual, nos brinda otra lectura, seguramente más honda, que la que nos presentan los poderosos, economistas, científicos y, sobre todo, políticos, que a menudo manejan nuestras vidas. Y hemos querido hacerlo poniendo algo de gracia en la información; ser amenos sin renunciar a las opiniones, a las ideas, que los invitados expresan con intensidad. Dejarles hablar, de eso se ha tratado siempre. 

P. ¿Ha pedido alguna vez un cambio de horario a una franja de mayor audiencia? 

R. En estos diez años, La hora cultural ha sufrido cambios de horario: de cinco días de emisión a la semana, a las 20:00 horas, un gran horario... pasamos a cuatro, a medianoche, uno de ellos dedicado a la programación del Instituto Cervantes (La hora Cervantes, los jueves). En la décima temporada, emitiremos dos días, miércoles y jueves. 

P. ¿Cree que el horario ha jugado a favor del mantenimiento del programa durante tantos años? 

R. Nos habría gustado seguir haciendo el programa en directo a las ocho de la tarde, como en nuestros inicios. Muchos espectadores decían que La hora cultural oxigenaba un poco el ritmo frenético de los informativos, los boletines del Canal 24 horas. Además, en esa primera época, volvía a emitirnos en medianoche; pero un día descubrieron que en el horario nocturno hacíamos mejor audiencia, y ahí nos quedamos. También, la actualidad política no solo es más bronca en los últimos años, sino más insaciable, reclama más atención que nunca; vivimos al filo de "la última hora".

P. ¿Cuáles son las mayores dificultades que encuentra la cultura para divulgarse por televisión?

R. Hay que huir del programa ladrillo, aunque tengamos que despachar un libro de filosofía, un concierto de música clásica, una performance, teatro experimental, etc. Tenemos que darle vueltas a las propuestas culturales que nos llegan para presentarlas de forma atractiva; lo claro y profundo no está reñido con lo ameno, con notas de humor. Se trata de empatizar con el que nos está viendo. Y luego, me parece fundamental contar historias humanas. Más allá de actores y actrices, cantantes, escritores, etc., están las personas que cultivan su vocación desde la infancia; su biografía, sus éxitos y reveses, su opinión sobre las cosas que están pasando.

P. Por su plató ha pasado una larga nómina de personajes. ¿Quién le ha proporcionado más juego a la hora de entrevistarlos? 

R. Me chiflan los invitados que se mojan, que se meten en charcos y polémicas: Albert Boadella, Leo Bassi, Pablo d´Ors, Alberto San Juan, Albert Pla, Amelia Valcárcel, Luis Maria Anson, Sánchez Dragó, Andrés Lima, Raúl del Pozo, Juan Manuel de Prada, o Fermín Muguruza cuya participación levantó algunas ampollas. Invitados e invitadas que han compartido sus recuerdos como Lola Herrera, Héctor Alterio, Victoria Abril, Nacho Duato, Miguel Poveda, Julieta Serrano, Marta Sánchez, un largo etcétera. También tengo presentes a gestores culturales y pensadores como Javier Gomá, Miguel Zugaza, Guillermo Solana, Marta Rivera de la Cruz... Los nombres internacionales no se olvidan, Juan Luis Guerra, Marizza, Philippe Jaroussky, los nietos de Marie Curie, Jane Badler, protagonista de la mítica serie de televisión V. Me vienen a la memoria hombres y mujeres que no volveré a entrevistar: Alberto Cortez, José Luis Cuerda, Luis Eduardo Aute, Antón García Abril, Boni del grupo Barricada...

Vicente del Bosque, Blanca Marsillach y Antonio Gárate

P. ¿Y entre los encuentros más emocionantes?

R. Pues el de alguien que no ha destacado en la cultura, sino en el deporte, si bien el fútbol está en el ADN de la cultura española. En una de las ocasiones que entrevisté a la actriz Blanca Marsillach ella dirigía su proyecto inclusivo para hacer teatro con personas que tienen capacidades diferentes y volvía a repetir con ellos la obra de Yo me bajo en la próxima, ¿y usted?, un texto de su padre que ya había puesto en pie. En aquella ocasión, le dije que nada nuevo íbamos a poder contarle al espectador, pero ella insistió en venir, me dijo que personalidades de la cultura y el deporte estaban apoyando la iniciativa, entre ellos el seleccionador nacional de fútbol de España, años atrás. Y zanjando el asunto, sin estar convencido de traer la propuesta al plató, le comenté: “mira si traes a Vicente del Bosque, lo hablamos”. Blanca Marsillach se salió con la suya. Como saben, uno de los hijos de Vicente del Bosque, Álvaro, nació con síndrome de Down, y estaba en el elenco de la función. Hicimos un programa entrañable, y pocas veces tuvimos tanta audiencia.

P. Un día a la semana su programa se convierte en La hora Cervantes, fruto de un convenio con el Instituto de nombre homónimo. ¿Qué diferencias de producción entraña este programa del resto de los que ofrece durante la semana?

R. Antes, con La hora Cervantes apenas había diferencias respecto a La hora cultural. Al hacer el programa en directo los jueves, nos teníamos que ajustar a invitados que estuviesen ese día en Madrid. Con la pandemia, no hemos podido hacerlo en el plató de Torrespaña; salimos unos meses con un "formato covid", telemático, con entrevistas por skype, zoom... y desde hace unos meses grabamos en la sede central del instituto, el edificio del antiguo Banco Central, y también, en varias ocasiones, en la que fue su primera sede, en Alcalá de Henares-Madrid.

P. ¿Quiénes van a ser sus primeros invitados en el programa de mañana y en el de La hora Cervantes?

R. Empezamos con la Feria del Libro, con un poeta, con una de nuestras editoras más sobresalientes, y con un escritor al que seguro conoce muy bien, Miguel Pardeza, porque formó parte de lo que se conoció como "La quinta del buitre"; ahora el exfutbolista tiene como gran pasión escribir. También destacamos en los primeros programas la nueva temporada teatral, con el regreso de los musicales. Y en La hora Cervantes, hablaremos entre otros con Agustín Cerezales Laforet, hijo de Carmen Laforet, de la que conmemoramos el centenario. También con el nicaragüense Sergio Ramírez, Premio Cervantes 2017, el cubano Leonardo Padura, y dos nombres muy destacados de Colombia: Ingrid Betancourt y Juan Manuel Santos, presidente de su país durante ocho años y Premio Nobel de la Paz.

@lizperales1