Image: Frankenstein revive en el Covent Garden

Image: Frankenstein revive en el Covent Garden

Danza

Frankenstein revive en el Covent Garden

29 abril, 2016 02:00

Un momento de Frankenstein, un ballet romántico y fatalista. Foto: Michelle Turriani

El londinense Covent Garden será testigo, el próximo 4 de mayo, del estreno del ballet Frankenstein con coreografía de Liam Scarlett. El día 18 podrá verse en cines de todo el mundo con un elenco encabezado por la española Laura Morera.

Liam Scarlett es Coreógrafo Residente del Royal Ballet de Londres, de cuya escuela y compañía fue bailarín. Para ellos, en coproducción con el San Francisco Ballet, ha creado Frankenstein, una obra que se estrena en ambas ciudades con menos de un año de diferencia. "Liam es muy inteligente", explica Laura Morera a El Cultural. La artista madrileña es Principal Dancer de la compañía y ha bailado prácticamente todos los papeles protagonistas del exigente repertorio del Royal Ballet; con este ballet dice estar viviendo "el mejor momento" de su carrera. Elizabeth, su personaje, es muy dramático: "Tiene mucha fortaleza, no ha olvidado que soy española", añade entre risas. Su formación en la escuela inglesa desde los 11 años dejó un sello inconfundible en su forma de bailar, que Scarlett reconoce y maneja a la perfección. "Tengo la sensación -dice Morera- de que todo lo que he aprendido desde niña me ha estado preparando para que Liam lo utilice. Con este ballet ha llegado al alma de lo que escribió Mary Shelley".

Liam Scarlett parte de una historia poco convencional: "A cualquiera que se lo decía, pensaba que estaba de broma", recuerda divertido. "Pero Frankenstein habla del amor en sus múltiples facetas: el que tienes, el que deseas, el que se ha roto… y de aspectos como responsabilidad o abandono". Todo eso fue descubriendo que "formó parte de la vida de Shelley; cuanto más averiguaba sobre su vida, más me encontraba con ella en Frankenstein. Escribir debió de ser un desahogo para ella".

Así surgió un ballet romántico y fatalista, alejado de cualquier atisbo macabro, que desciende de la prestigiosa tradición inglesa de danza argumental. "Tengo una enorme responsabilidad, habiendo crecido con el repertorio de Ashton y MacMillan; quiero mantener viva esa tradición y ser tan honesto en mi trabajo como ellos", reflexiona el coreógrafo. Scarlett encargó la partitura a Lowell Liebermann, con quien ya había trabajado. "Lowell presta atención a la melodía y las armonías con tradición y respeto por su herencia musical, y eso es lo que yo hago". Se reconoce satisfecho de su formación académica y no reniega "de tener tanto clasicismo instalado". La música, explica, "es perfecta porque resulta escalofriante unas veces y pasional otras". Él prefiere "la música más hermosa para crear algo verdaderamente horrible en escena porque te distorsiona de forma que lo que ves no se corresponde con lo que sientes y te lleva a un punto de empatía menos obvia".

Frankenstein habla del amor que tienes, del que deseas y del que se ha roto. También de responsabilidad" Liam Scarlett

Un lenguaje lujoso y bello

Algo que encontró también en Shelley: "La novela está escrita con el lenguaje más lujoso y bello… y resulta todo mucho más aterrador". Unos diseños de John Macfarlane visten a un elenco de bailarines que Scarlett conoce bien y al que sólo encuentra parangón en el de SFB. "Son las dos mejores compañías del mundo". El movimiento de "la criatura" -como él prefiere llamar al monstruo- parte de la inocencia de una mente de recién nacido, atrapado en un cuerpo enorme. "El rechazo de todos y la ausencia de modelos le lleva a cometer acciones horribles. Es algo relevante, porque hoy día se toma el aspecto exterior como el primer valor". Su intención es hacer pensar a un público que ya conoce su trabajo y que sabe por dónde van sus tendencias narrativas: "Los aspectos oscuros de la historia me atraen. ¡No creo que nadie espere un cuento de hadas con final feliz!".

@ElnaMatamoros