Afortunadamente la palabra “hamburguesa” ya no siempre está asociada a comida rápida y no saludable. Si las hacemos caseras pueden ser una opción tremendamente interesante y saludable, tanto si las preparamos de carne o, como en este caso, de pescado y marisco.

Ingredientes para elaborar la salsa rosa exprés

  • Mayonesa, 6 cucharadas
  • Ketchup, 2 cucharadas
  • Aceite de oliva virgen extra, 1 cucharada
  • Zumo de naranja o mandarina, 1 cucharada
  • Brandy, 1 cucharada
  • Salsa Perrins, 1 cucharadita (opcional)
  • Cebollino o eneldo

Esta hamburguesa de salmón y gambas que vamos a preparar hoy es una manera sencilla y divertida de comer pescado para todos aquellos que se resisten a este alimento. Además vamos a utilizar unos panes de hamburguesa caseros elaborados con harina de espelta que tenía congelados y que son toda una delicia.

Y para acompañar la hamburguesa vamos a hacer una salsa rosa exprés deliciosa y sencillísima.

Elaboración de la hamburguesa de salmón y gambas con salsa rosa exprés

01: Preparamos la masa de las hamburguesas y la dejamos reposar en el frigorífico

Comenzamos limpiando el lomo de salmón y le quitamos la piel y las espinas que pudiera tener. Es muy sencillo quitarle la piel al salmón, yo lo hago así: comenzamos desde un extremo y pellizcamos una punta de piel por debajo de la carne, deslizamos la hoja del cuchillo lentamente de forma que la parte cortante vaya separando la piel de la carne del pescado sin apenas esfuerzo y dejando un corte liso. A medida que vayamos avanzando en el corte podremos sujetar más trozo de piel y tensarla, y separar la piel de la carne nos resultará más fácil. Eso sí, es importante que el cuchillo esté bien afilado.

Troceamos el salmón a cuchillo y reservamos en un bol grande.

Pelamos las gambas y las troceamos también a cuchillo, bien picadas. Las incorporamos al bol con el salmón. Las cabezas y cáscaras de las gambas no las tiramos, las podemos utilizar para hacer un fumet para otra preparación, y si no tienes previsto utilizarlo lo puedes congelar en un bote de cristal o en una cubitera, de modo que lo puedas añadir cómodamente cuando necesites aportar sabor a un plato.

Pelamos y picamos la cebolleta. En casa nos gusta muy picada, para notar el sabor pero apenas encontrarla al comer. La añadimos al bol con el salmón y las gambas.

Añadimos también en el bol el pan rallado, el huevo y el cebollino picado. Salpimentamos.

Dejamos reposar en el frigorífico para que se mezclen los sabores mientras continuamos con la receta.

02: Preparamos la salsa rosa exprés

Vamos a preparar una salsa rosa muy fácil y rápida. Mezclamos en un cuenco todos los ingredientes de la salsa: 6 cucharadas de mayonesa de bote, una cucharadita de aceite de oliva virgen extra, 2 cucharadas de ketchup de bote, 1 cucharada de zumo natural de naranja o de mandarina, una cucharada de brandy. Opcionalmente podemos añadir una cucharadita de salsa Perrins, que me parece que la va estupendamente.

Mezclamos bien todos los ingredientes con ayuda de una cucharilla y espolvoreamos la salsa con eneldo fresco o cebollino, que combinan muy bien con el salmón. Reservamos.

03: Freímos los pimientos de tipo Padrón

Vamos a freír unos pimientos verdes, he utilizado pimientos dulces tipo Padrón. Si eres un valiente y te van el picante y las emociones puedes añadir auténticos pimientos de Padrón, y asumir el riesgo de que alguno salga picante y le dé un impulso a tu hamburguesa.

Comenzamos limpiando bien los pimientos y los secamos uno a uno. Les hacemos una pequeña incisión con una puntilla para evitar que exploten al freírlos y nos pueda saltar el aceite.

Calentamos a fuego medio/bajo abundante aceite de oliva en una sartén. Añadimos los pimientos y los dejamos freír. Los vamos girando para que se hagan uniformemente por todos los lados. Es importante que, sobre todo al principio, tapemos la sartén para impedir que el aceite salpique y termine manchando la encimera o provocándonos alguna quemadura.

Cocinamos los pimientos hasta el punto que más nos guste; bien cocinados y blanditos o un poco más al dente. Una vez fritos a nuestro gusto los retiramos del fuego y los ponemos en un plato sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Espolvoreamos con sal.

Ya tendríamos un delicioso aperitivo, tal cual, pero como vamos a utilizar los pimientos para rellenar la hamburguesa, les retiramos los tallos y las semillas.

04: Marcamos el pan, damos forma a las hamburguesas y las cocinamos

Abrimos los panes de hamburguesa con un cuchillo de sierra. Tostamos las caras internas de los panes, marcándolos en una sartén con un hilo de aceite. Reservamos.

Sacamos la masa de las hamburguesas del frigorífico y comprobamos la textura. Si sigue siendo demasiado húmeda añadimos algo más de pan rallado, pero sin excedernos.

Para darles forma he utilizado un aro de emplatar del mismo diámetro que el pan de hamburguesa. He preparado las hamburguesas sobre un plato, pero lo podríamos hacer directamente sobre la sartén y así no tendríamos que manipularlas. Rellenamos el aro de emplatar con la masa, hacemos presión con el dorso de una cuchara y levantamos el aro suavemente.

Vamos a cocinar las hamburguesas en la misma sartén donde hemos marcado el pan. Añadimos un hilo de aceite y depositamos las hamburguesas. Es importante que no nos pasemos con el cocinado de las hamburguesas para que no nos queden secas, ya que tanto el salmón como las gambas se cocinan enseguida.

Cuando le demos la primera vuelta a las hamburguesas, sobre esa cara caliente y tostada ponemos unas lonchas de queso Scamorza. Tapamos la sartén con una tapa, bajamos el fuego al mínimo y dejamos que el queso se funda sobre las hamburguesas mientras se cocina la parte de abajo. El queso quedará semifundido y cubrirá la hamburguesa.

05: Montamos las hamburguesas y servimos

Vamos a emplatar nuestra hamburguesa de salmón y gambas casera. El montaje es libre y a cada uno nos gusta hacerlo a nuestra manera. A mí me gusta hacerlo de la siguiente forma.

Sobre los panes de hamburguesas tostados extendemos una capa de salsa rosa. Ponemos encima la hamburguesa con el queso Scamorza fundido y disponemos sobre él varios pimientos de Padrón. Colocamos encima una o dos rodajas de tomate, unos aros de cebolleta y varias hojas de rúcula (o canónigos o lechugas variadas). Vertemos encima algo más de salsa rosa.

Y en mi opinión no necesitan nada más, pero cada uno que la personalice a su gusto. Servimos nuestras hamburguesas caseras bien calentitas y con algo más de salsa aparte por si alguien quiere añadir más, y ¡a disfrutar!

Resultado

El resultado final es una hamburguesa de salmón casera deliciosa y lo más importante, sana, porque cuando compramos hamburguesas en el supermercado suelen estar hechas de restos y descartes que no sirven para la venta y a menudo con más grasa y sal de la deseable, además de los aditivos que les añaden. Hechas en casa sabemos lo que comemos.

Estas hamburguesas no necesitan de más acompañamiento, pero si crees que te va a quedar sitio para algo más, combinan muy bien con unas patatas estilo Cajún.

Y por supuesto con unos deliciosos y saludables chips de vegetales.