Me encanta asar castañas, no por las castañas en sí, que lo cierto es que si como muchas me acaban cayendo pesadas, pero me encanta sentirlas calentitas en las manos y revivir cada otoño los recuerdos que me traen.

Ser peque y que mi padre comprara un cucurucho de castañas al castañero que se ponía en la calle Real junto al antiguo Kirs, ahora convertido en la nueva ubicación del Café Vecchio, cuando salíamos a pasear toda la familia los domingos por la tarde a pesar del frío. O asar castañas en casa los sábados por la noche simplemente como excusa para encender el horno y caldear la cocina.

Cómo asar castañas en el horno de casa

Asar castañas en el horno de casa es algo realmente sencillo para lo que solo necesitamos unas buenas castañas y, opcionalmente, un poco de sal gorda.

Lo que debemos hacer es precalentar el horno a 200ºC con calor arriba y abajo.

Luego debemos dar un corte a las castañas asegurándonos que se cortan tanto la piel dura exterior como la piel fina interior que recubre al fruto. Podemos hacerlo de dos maneras, bien cortando un pedacito tal como podéis ver en el vídeo que os dejo a continuación o se les puede dar un corte profundo en forma de cruz.

Las colocamos en una bandeja de horno bien extendidas y sin que se amontonen unas sobre otras y horneamos a 200 ºC durante unos 25 – 30 minutos. En la mitad del horneado conviene agitar un poco la bandeja para que se muevan un poco y se asen de forma más uniforme.

Cuando estén listas, se sacan del horno, opcionalmente se espolvorean con un poco de sal gruesa, se tapan con un paño limpio -también pueden retirarse de la bandeja y envolverse en el paño-, se dejan reposar unos 10 minutos y ya se pueden comer.

Os dejo un vídeo para que veais que es muy muy fácil

Vosotros, ¿asáis también castañas en casa?