
Residentes de una de las zonas de Kiev que han sido atacadas esta madrugada. Reuters
Los misiles y drones rusos matan a 22 personas en Kiev y Odesa en otro bombardeo masivo sobre Ucrania
Se han registrado daños en varios edificios residenciales, centros educativos e infraestructuras críticas. Hay más de 130 heridos.
Más información: 'Rizos', de Villaverde a combatir en Ucrania: "He venido a terminar el trabajo que no pudo acabar mi hermano"
Rusia ha vuelto a lanzar en la madrugada del lunes al martes un nuevo ataque aéreo masivo con 32 misiles y 440 drones sobre Ucrania. Al menos 21 personas han muerto durante el bombardeo en Kiev y otra en Odesa y más de un centenar han resultado heridas, según ha informado el presidente Volodímir Zelenski. Las explosiones han provocado daños en varios edificios residenciales, centros educativos e infraestructuras críticas.
Según Igor Klimenko, ministro del Interior, Rusia atacó anoche hasta una docena de distritos y 27 localizaciones en la capital ucraniana, donde se escucharon explosiones y disparos de las defensas antiaéreas durante casi diez horas. Uno de los fallecidos es un ciudadano estadounidense de 62 años, según ha revelado el alcalde de Kiev, Vitali Klichkó. Zelenski ha calificado el ataque como "uno de los más horribles" en los más de tres años de guerra.
"Kiev ha soportado otra noche difícil", ha descrito el jefe de la Administración Militar capitalina, Timur Tkachenko. "Otro ataque, más heridos, casas destruidas, sufrimiento humano y ansiedad. La búsqueda y las operaciones de rescate bajo los escombros están en marcha".

Un vecino de Kiev delante de un edificio destruido durante el ataque ruso. Reuters
El bombardeo ruso también afectó a la ciudad portuaria de Odesa, en el sur de Ucrania, donde las autoridades regionales han informado de un muerto y 17 heridos como consecuencia del ataque. La Fuerza Aérea ucraniana ha asegurado en un comunicado que las defensas antiaéreas derribaron 402 drones y 26 misiles rusos.
"Estos ataques son puro terrorismo", ha denunciado Zelenski en una publicación en redes sociales. "El mundo entero, Estados Unidos y Europa deben responder de una vez de la forma que una sociedad civilizada responde al terrorismo".
I receive regular reports from Minister of Internal Affairs Klymenko and our military commanders on the aftermath of Russia’s massive strike. More than 440 drones and 32 missiles were used. Kyiv has faced one of the most horrific attacks. Also, overnight, Odesa, Zaporizhzhia,… pic.twitter.com/4ZMFBj8eJ2
— Volodymyr Zelenskyy / Володимир Зеленський (@ZelenskyyUa) June 17, 2025
"Putin actúa así únicamente porque puede permitirse continuar la guerra. Quiere que la guerra continúe", ha añadido. "Es un error que los poderosos hagan la vista gorda. Estamos en contacto con todos los socios a todos los niveles posibles para garantizar una respuesta adecuada. Son los terroristas quienes deben sufrir el dolor, no la gente inocente y pacífica".
Moscú ha lanzado en las últimas semanas una serie de ataques masivos, con cifras de récord, contra Ucrania a raíz de la humillante Operación Telaraña, con la que el Servicio de Seguridad de Kiev logró propinar un audaz golpe a la flota de bombarderos estratégicos de Vladímir Putin que se encontraban en bases aéreas a miles de kilómetros del frente.
El Ministerio de Defensa ruso, por su parte, ha asegurado que sus defensas antiaéreas derribaron 147 drones ucranianos durante la madrugada.
Las tropas rusas continúan con un avance progresivo en el este de Ucrania y en las últimas semanas han abierto un nuevo frente en la región de Sumi, en el noreste, a pesar de los llamamientos al alto el fuego del presidente estadounidense Donald Trump.

Los servicios de emergencia de Kiev trabajan en uno de los lugares atacados. Reuters
Zelenski se encuentra en Canadá para asistir a la cumbre del G7 con la esperanza de recabar más apoyo para endurecer las sanciones contra Rusia y continuar la ayuda militar a Ucrania. Sin embargo, su reunión con Trump ha sido cancelada después de que el mandatario republicano haya decidido abandonar la cumbre antes de lo previsto debido a la situación en Oriente Medio.
Trump, desde su llegada a la Casa Blanca, ha reorientado la política exterior estadounidense, alejándose del apoyo a Kiev y comulgando con las justificaciones de Moscú para su invasión. Por el momento se ha resistido a los llamamientos de sus aliados europeos para imponer sanciones más severas a Moscú por rechazar sus llamamientos al alto el fuego.
En la cumbre del G7, de hecho, Trump pidió al resto de miembros readmitir a Rusia, expulsada en 2014 a raíz de la anexión de Crimea. "Putin me habla a mí. No habla con nadie más... no está contento con ello. Puedo asegurarles que prácticamente ni siquiera habla con quienes lo expulsaron, y estoy de acuerdo con él", ha presumido.