Dos mujeres en una zona residencial de Mariúpol tras los bombardeos rusos.

Dos mujeres en una zona residencial de Mariúpol tras los bombardeos rusos. Reuters

Europa

Tropas rusas llegan al centro de Mariúpol y Ucrania reconoce que ha perdido el acceso al mar

Las tropas rusas ya han logrado acceder al centro de la ciudad, que lleva más de dos semana bajo completo asedio. 

19 marzo, 2022 17:45

Noticias relacionadas

El ministro de Defensa de Ucrania ha reconocido que su país ha perdido el acceso al mar de Azov "temporalmente" después de que las tropas rusas hayan ido estrechando el cerco a través del puerto de Mariúpol y hayan logrado acceder al centro de la ciudad. Los combates ya se desarrollan en las calles céntricas de esta urbe estratégica que lleva más de dos semanas bajo total asedio. 

"Los invasores han obtenido victorias parciales en el distrito de operaciones de Donetsk, privando a Ucrania temporalemente de acceso al mar de Azov", señala el comunicado del ministro de Defensa que se hizo público a última hora del viernes. Han pasado ya varias horas y no ha habido modificaciones en el mensaje ni se sabe si las fuerzas ucranianas han recuperado ya el acceso al mar.

"No queda nada del centro de la ciudad", aseguró el alcalde, Vadym Boychenko, a la BBC. Boychenko lamenta que el 80% de los edificios de viviendas están dañados o destruidos. Además, el Ejército ruso ha destruido casi por completo la planta metalúrgica de Azovstal en Mariúpol (sur de Ucrania), una de las más grandes de Europa, según ha informado el Ministerio de Interior ucraniano.

"Según nuestras informaciones, hemos perdido ese gigante económico. Una de las plantas metalúrgicas más grandes de Europa ha sido completamente destruida", dijo el ministro de Interior, Vadym Denysenko.

"Es posible que Putin haya dado personalmente la orden de destruir toda la ciudad. El objetivo de Putin no es desmilitarizar Ucrania sino desindustrializarla y que tengamos que volver a construir nuestras plantas en las próximas décadas", agregó.

El viernes el Kremlin señaló que sus tropas estaban "estrechando el cerco" alrededor de Mariúpol, donde se estima que el 80% de los hogares de la ciudad se han visto afectados por los bombardeos y más de 1.000 personas pueden estar atrapadas todavía entre los escombros que han caído sobre los refugios antiáreos improvisados que usaron para protegerse de los ataques rusos en el teatro.

Mariúpol goza de una posición estratégica en la costa del mar de Azov y se ha convertido en un objetivo primordial para Rusia desde que su presidente, Vladimir Putin, tomara la decisión de invadir Ucrania el pasado 24 de febrero en lo que él denomina como "Operación militar especial".

Edificios residenciales de Mariúpol destrozados tras los bombardeos rusos.

Edificios residenciales de Mariúpol destrozados tras los bombardeos rusos. Pavel Klimov Reuters

Esta ciudad portuaria de medio millón de habitantes se encuentra enclavada entre la anexionada península de Crimea (al oeste) y la región de Donetsk (al este), cuyo territorio está parcialmente controlado por separatistas prorrusos. De todos modos, Rusia venía anunciando desde el pasado 1 de marzo que se había hecho con el control del mar de Azov y había cortado el acceso de los soldados ucranianos.

Además, los bombardeos rusos han dejado este sábado decenas de muertos en varias ciudades ucranianas, según informaciones de las autoridades locales.

El alcalde de Mikolaiv, Alexander Senkevich, informó de un bombardeo lanzado desde la región de Jersón que habría causado "decenas" de víctimas mortales. Según el alcalde, ni siquiera hubo tiempo de activar la alarma antiáerea.

Parte de los muertos son militares, algunos medios hablan de 40, pero en los alrededores de Kiev han muerto al menos 7 civiles y 5 han sido hospitalizados después de que los rusos, según la policía regional de Kiev, bombardeara zonas residenciales.

También en la región de Donetsk se han producido ataques en zonas residenciales, según la policía regional. También Mariúpol, Avdiivka, Kramatorsk, Pokrovsk, Novoselydivka, Verkhnotoretske, Krymka y Stepne fueron atacadas por las fuerzas de ocupación rusas.

El Ejército ruso bombardeó pueblos y aldeas con aviones, cohetes y artillería pesada, incluido el uso de armas de racimo, según las autoridades ucranianas. De hecho, un misil hipersónico ruso lanzado desde un caza destruyó un almacén subterráneo ucraniano en Deliatin que contenía misiles y municiones de aviación. Este almacén estaba a tan solo 100 kilómetros de territorio OTAN, concretamente de Rumanía. 

Un misil hipersónico ruso sujeto a un caza.

Un misil hipersónico ruso sujeto a un caza.

"Cortina de humo"

La ministra británica de Asuntos Exteriores, Liz Truss, alertó de que las conversaciones de paz que mantienen Rusia y Ucrania podrían emplearse como una "cortina de humo" por el Kremlin para reagrupar tropas con las que acometer una nueva ofensiva.

En una entrevista publicada hoy por el diario británico The Times, la jefa de la diplomacia del Reino Unido expresó esos temores, al tiempo que indicó que corresponde al líder ucraniano, Volodímir Zelensky, elegir cómo su país aborda ese diálogo de paz.

Según la ministra, si Moscú se tomara en serio esas conversaciones de paz con Kiev, no emplearía los métodos militares que utiliza actualmente para atacar Ucrania: "Si un país es serio acerca de las negociaciones (de paz), no bombardea a civiles de manera indiscriminada a diario", observó la política conservadora.

La responsable del Foreign Office se mostró "muy escéptica" sobre esas negociaciones y apuntó que "estamos viendo un amago para crear espacio para que los rusos se reagrupen".

"No vemos ninguna retirada seria de tropas rusas o ninguna propuesta sobre la mesa", afirmó Truss.

La ministra recordó asimismo que "los rusos han mentido y mentido y mentido" y dijo que "teme" que "la negociación sea otro intento para crear distracción y generar una cortina de humo".

"Por supuesto, Ucrania es una nación soberana y tiene todo el derecho a acometer cualquier proceso de negociación como mejor le convenga", señaló.

Funcionarios occidentales han alertado de que los rusos cuentan con reservas "enormes" de munición, con lo que podrían mantener los bombardeos durante semanas.

No obstante, datos del último parte de inteligencia militar difundidos este sábado por el ministerio británico de Defensa en Twitter indican que el Kremlin no ha logrado aún ninguno de sus objetivos iniciales en Ucrania y que las tropas rusas se han visto sorprendidas por la "magnitud y ferocidad" de la resistencia ucraniana.