El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, el jueves en el acto de inicio de la campaña, en Castelldefels (Barcelona).

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, el jueves en el acto de inicio de la campaña, en Castelldefels (Barcelona). EFE

Política 23-J

El PP resurge en Cataluña, disputa la tercera plaza a Junts y refuerza para el 23J las opciones de Feijóo

Una encuesta oficial da al PP opciones de lograr entre seis y ocho escaños en Cataluña en las elecciones generales.

8 julio, 2023 02:39

Alberto Núñez Feijóo arrancó la campaña electoral en Os Peares (Orense) y en Castelldefels (Barcelona) dos lugares simbólicos para el PP y, al tiempo, necesarios para el relato que el candidato quiere hacer de su trayectoria y, sobre todo, dos lugares que le sirven para arañar votos en las generales del 23 de julio.

La pequeña aldea gallega en la que nació le sirve para presentarse desde su origen rural, en busca del voto de las pequeñas localidades. La elección de la población catalana es fruto de la necesidad que tiene el PP de sacar un buen resultado en Cataluña.

Porque las buenas expectativas del PP en Andalucía, Madrid y Comunidad Valenciana, es decir, las circunscripciones que más escaños reparten, están lastradas por su difícil situación en Cataluña y País Vasco. Hay que tener en cuenta que en Barcelona se disputan 32 escaños.

[El agujero de Feijóo: con el resultado del 28-M sacaría 5 de los 66 diputados que dan Cataluña y País Vasco]

Sin embargo, esta semana la dirección del PP ha recibido con satisfacción una noticia que ha pasado casi desapercibida: la encuesta del Centre d'Estudis d'Opinió (CEO) de la Generalitat (el CIS catalán) le otorga a Feijóo entre 6 y 8 escaños en Cataluña para las generales, disputando el tercer puesto a Junts.

El dato es tan extraordinario para los populares como que siempre que el PP ha logrado resultados que le han permitido gobernar en España es porque ha mejorado sus números en una comunidad tan difícil como Cataluña.

Esa expectativa tiene que ver, obviamente, con la desaparición de Ciudadanos, porque este partido logró dos y cinco escaños en las dos generales de 2019 y, aparentemente, todos ellos irían ahora al PP. No es casual que quien ha sido portavoz de Ciudadanos en el Parlamento de Cataluña, Nacho Martín Blancohaya fichado por el PP para ir en su lista al Congreso por Barcelona.

Y, además, el dato de la encuesta oficial de Cataluña coincide con el mejor momento del PP en Andalucía, Madrid y Comunidad Valenciana. De esa forma, el PP puede mantener su objetivo de máximos de llegar a los 160 escaños con los que poder gobernar en solitario.

Por ejemplo, en 2016 el PP de Mariano Rajoy ganó las elecciones con 137 escaños y en Cataluña logró seis diputados, es decir, la parte baja de la horquilla que la atribuye la encuesta.

En 2015 sacó sólo cinco en Cataluña pero ganó, y en 2011, que logró mayoría absoluta en el Congreso, consiguió unos extraordinarios 11 escaños en esta comunidad. La diferencia es que entonces aún no existían ni Vox ni Ciudadanos. Es decir, el PP no competía con ningún partido en el espectro de la derecha española. Y, además, no gobernaba en Andalucía, mientras ahora lo hace con mayoría absoluta.

Cambio de tendencia

El resultado de la encuesta del CEO es tan extraordinario para el PP como que la extrapolación de los datos de las recientes elecciones municipales supondrían sólo cuatro escaños para el PP en Cataluña, todos ellos en Barcelona.

En esas elecciones recientes, el PSC sacó al PP en el conjunto de Cataluña 500.000 votos, es decir, triplicó el resultado de los populares. Esa diferencia se mitiga en la encuesta.

Además, el sondeo señala que Sumar tendría entre dos y cuatro escaños, y Vox entre dos y tres. El hecho de que el PP pueda superar a estos dos partidos indica, según los populares, que han logrado entrar de nuevo en la política catalana.

Los socialistas restan valor al sondeo porque las 2.000 encuestas de la muestra se realizaron entre el 29 de mayo -el día después de las municipales y el mismo en que se convocaron las generales- y el 26 de junio, es decir, cuando apenas se habían anunciado los pactos con Vox en comunidades y ayuntamientos.

Al margen de Cataluña, el PP confía en mejorar también en las circunscripciones que reparten pocos escaños y en las más grandes en las que su diferencia con el PSOE es notable. Por ejemplo, en Madrid, en las pasadas municipales, el PP dobló los votos del PSOE, con una ventaja de 700.000 votos.

En Andalucía, la ventaja del PP fue de 200.000 sobre los socialistas, y en la Comunidad Valenciana de cinco puntos.