De izquierda a derecha: Marga Prohens (PP),  Toni Costa (PP) y Patricia de las Heras (Vox) en una reunión para sondear acuerdos celebrada en el Parlament de Baleares.

De izquierda a derecha: Marga Prohens (PP), Toni Costa (PP) y Patricia de las Heras (Vox) en una reunión para sondear acuerdos celebrada en el Parlament de Baleares. Europa Press

Política PACTOS

El PP se planta ante el ultimátum de Vox en Extremadura y pacta sólo la investidura en Baleares

Feijóo no quiere otro gobierno de coalición como el de la Comunidad Valenciana y lleva al límite las negociaciones. 

20 junio, 2023 04:02

El Partido Popular quiere gobernar en solitario en Baleares, Extremadura y Aragón. La formación de Alberto Núñez Feijóo fuerza el pulso con Vox al límite con el objetivo de no repetir la fórmula de la Comunidad Valenciana con un Ejecutivo de coalición.

Enfrente, los de Santiago Abascal desean conseguir poder autonómico como parte de su estrategia para el 23-J. Quieren sacar rédito a los escaños conseguidos para mitigar un posible trasvase de voto útil hacia el PP desde los sectores menos conservadores de Vox. 

En Baleares, Marga Prohens pactó este lunes un acuerdo programático y para la Mesa del Parlament con Vox que le acerca a la presidencia del Govern. Ambas formaciones continuarán hablando en los próximos días y la primera votación de investidura apunta a que será la próxima semana. Esta es la línea a seguir también por los otros barones del PP que dependen de Vox en sus territorios. 

[Primer paso para un acuerdo en Baleares: el PP cede la presidencia de la Asamblea a Vox]

La situación más complicada se vive en Extremadura. Vox rechazó este lunes obtener la presidencia de la Asamblea y la propuesta de María Guardiola de cerrar un pacto programático con 15 puntos. El partido liderado por Ángel Pelayo Gordillo exige entrar en el Ejecutivo, ya que la suma de PSOE y Podemos, con 28 y 4 escaños, obliga al PP (28 diputados) a recibir el de la formación de extrema derecha (5) para lograr la investidura.

Una negociación contrarreloj

Las 10 de la mañana de este martes es la hora límite para alcanzar un acuerdo entre PP y Vox, ya que de lo contrario el PSOE y Podemos se repartirán los puestos en la Mesa de la Asamblea extremeña. Por tanto, en una negociación contrarreloj, fuentes populares afirman que el partido de Abascal debe decidir "si investir a María Guardiola o investir a Guillermo Fernández Vara"

La resolución de la negociación no llegará hasta minutos antes de que comience la sesión en la Asamblea. Jorge Buxadé, portavoz nacional de Vox, ha convocado a los medios a las 9:50 en Mérida y todo indica que no será hasta ese momento cuando se conozca el futuro político de Extremadura.

Buxadé aseguró este lunes que Vox "no puede renunciar a tener miembros en el Gobierno", manteniendo así una exigencia que la formación considera innegociable. 

[Vox rechaza la oferta del PP de presidir la Asamblea de Extremadura y exigen entrar en el Gobierno]

Mientras la tensión crecía anoche en Extremadura, PP y Vox firmaban un acuerdo en Baleares que dará la presidencia del Parlament a la formación de extrema derecha.

Ambos partidos firmaron también un documento de cinco puntos con acuerdos programáticos en "las libertades de las personas", "promoción del comercio, de la industria y del turismo", "mejora de servicios sociales y de la sanidad pública", "protección de la mujer, con especial atención a las menores tuteladas" y "seguridad". 

Este es el primer paso para un acuerdo entre ambas formaciones que permita un gobierno en solitario de Marga Prohens. Vox también dio salida a su líder en Baleares, Jorge Campos, colocándole como candidato al Congreso de los Diputados. La nula relación entre Prohens y Campos impedía llegar a un pacto, y el acuerdo se produjo en cuanto se confirmó que este último renunciaba a recoger su acta de diputado autonómico. 

Azcón busca otros pactos

En Aragón, el PP ultima un pacto con PAR para contar con el apoyo de su diputado. También tiene conversaciones con Teruel Existe, que desea que el resto de partidos se abstengan para permitir una investidura de Jorge Azcón sin tener que depender de los votos de Vox. Los tres escaños que tiene la formación de España Vaciada harían que los 28 con los que cuentan los populares rozaran la mayoría absoluta, situada en 34 diputados. 

Azcón mantiene el mismo objetivo que Prohens y Guardiola de formar un ejecutivo sin miembros de Vox y alcanzar acuerdos programáticos a lo largo de la legislatura. Su posición de fortaleza en la negociación depende de lograr los acuerdos con Teruel Existe y el PAR. Si lo consigue, el partido de Santiago Abascal tendrá más difícil tensar la cuerda. 

Las Cortes de Aragón se constituyen el viernes 23 de junio, por lo que será la última autonomía que resolverá su futuro político, salvo sorpresa mayúscula en la Comunidad Valenciana, cuyo nuevo Parlamento echará a andar el lunes 26.

Azcón no tiene la urgencia que marca el tiempo a Guardiola o Prohens, por lo que espera acontecimientos mientras abre el abanico de opciones para pactar más allá de la formación liderada por Alejandro Nolasco

[López Miras recuerda a Vox que lo sucedido en 30 alcaldías le "legitima" para gobernar solo en Murcia]

Por su parte, Fernando López Miras anunció este lunes que mantiene su "mano tendida" a Vox, y quiso desvincular un posible pacto que permita su investidura como presidente de la Región de Murcia a lo que suceda en otras comunidades autónomas.

El PP se repartió con el PSOE los puestos en la Mesa de la Asamblea tras no llegar a un acuerdo con Vox. José Ángel Antelo, líder de la formación conservadora, afirmó tras esa votación que el "PP decidió elecciones anticipadas" tras no ceder la Presidencia de la Mesa. 

El órdago de López Miras sirvió también al PP en territorios como Aragón o Baleares para imponer su postura en las negociaciones. La intención del presidente de los populares murcianos continúa siendo la de lograr formar un gobierno en solitario, argumentando que su partido tiene más representación que toda la izquierda junta, queriendo así arrinconar a los de Abascal en las negociaciones. Si no, la amenaza de volver a convocar elecciones sigue sobre la mesa.