El candidato del PPdeG, Alfonso Rueda, participa en un mitin acompañado por el líder del PP de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, este lunes.

El candidato del PPdeG, Alfonso Rueda, participa en un mitin acompañado por el líder del PP de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, este lunes. Efe

Andalucía

Los barones ven amarrada Galicia pero preocupan las "dudas sobre Puigdemont generadas al electorado"

Presidentes autonómicos consultados por EL ESPAÑOL reconocen su sorpresa por lo sucedido en los últimos dos días y admiten un error de Génova.

13 febrero, 2024 02:37
Alberto D. Prieto Pepe Luis Vázquez

El Partido Popular trata de enderezar el rumbo después de 48 horas convulsas por el revuelo que se generó el pasado viernes, cuando la dirección del partido reconoció a un grupo de periodistas, entre otras cosas, que Alberto Núñez Feijóo no vería con malos ojos un indulto a Carles Puigdemont (supeditado a unos condicionantes prácticamente imposibles).

La polémica, que estalló el sábado por la noche, en el ecuador de la campaña para las gallegas, se vio agigantada cuando llegó a orillas del PSOE y Vox, que en los últimos días han utilizado este supuesto cambio de opinión en el PP para atizar duramente a Feijóo y tratar de revertir la tendencia que marcan los sondeos en Galicia. 

En la mayoría de cuadros del PP ha cundido el nerviosismo por la incidencia que el embrollo pudiera tener en las elecciones gallegas de este domingo. No obstante, la mayoría de barones de la formación se muestran optimistas con el resultado final y consideran que el incendio no alcanzará a la Xunta. 

[Compromiso público de Feijóo: "Yo no soy Sánchez. Ni acepto ni aceptaré la amnistía ni los indultos"]

Un nutrido grupo de presidentes autonómicos con mando en plaza, consultados por EL ESPAÑOL, cierran filas con Feijóo y aseguran que no está en riesgo la quinta mayoría absoluta del partido en Galicia. 

Eso sí, de la misma manera, en privado hay quienes reconocen que "existe preocupación" por las "dudas sobre Puigdemont" que Génova ha sembrado en "el electorado". Los mensajes de Feijóo el mismo sábado, horas antes de que salieran a la luz las informaciones que detonaron la polémica, ya generaron inquietud en el partido. 

Alberto Núñez Feijóo, en su visita de campaña a Lugo, donde se reunió con periodistas.

Alberto Núñez Feijóo, en su visita de campaña a Lugo, donde se reunió con periodistas. Efe

"A los que piden indultos les pido que verbalicen el arrepentimiento, y a los que se fugaron les pido que regresen a España y que se sometan a los tribunales. Si se cumple todo esto, entonces hablemos de reconciliación y de seguir adelante", dijo el líder popular, en un claro intento de controlar los daños que estaban por venir. 

El guiño a una reconciliación en Cataluña, entrando en el marco del PSOE con sus sucesivas medidas de gracia, y la hipótesis no matizada de indultar a Puigdemont, sacudieron al PP de arriba abajo.

Ayuso y Moreno

Consciente del terremoto que se había generado, Feijóo matizó el domingo que no había cambiado en nada la postura que ha venido defendiendo en los últimos meses: ni indultos ni amnistía a los responsables del procés.  

Este lunes, los principales barones del PP, personificados en Isabel Díaz Ayuso y Juanma Moreno, hicieron alusión a la polémica. Y lo hicieron en una dirección inequívoca: protegiendo a Feijóo.

Para los dos, la aclaración que el presidente popular hizo el domingo, a las pocas horas de estallar la polémica, fue determinante y un acierto. 

En una entrevista en Telecinco, la presidenta madrileña recalcó que Feijóo no ha cambiado de postura: "Sigue diciendo lo mismo, sí a la defensa del poder judicial, sí a investigar lo ocurrido". Y cargó contra PSOE y Vox, que "siempre van de la mano en estas circunstancias" y se estaban "agarrando a un clavo ardiendo". 

Por su parte, el presidente andaluz, Juanma Moreno, hizo una defensa cerrada de Feijóo. Insistió en que se ha "negado rotundamente siempre" a la amnistía o a un posible indulto del líder de Junts. 

Moreno resumió su teoría con la siguiente afirmación: "Si el señor Feijóo hubiera querido la amnistía y el indulto, sería presidente del Gobierno de España ahora". Además, insistió en que el "único que ha cedido a su chantaje" ha sido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Ahora bien, fuentes del PP andaluz no ocultan su sorpresa por lo sucedido este fin de semana. Aunque defienden que tal giro del partido no existe, sobre todo porque no se dan ninguno de los condicionantes con los que la dirección nacional elucubró para un hipotético indulto a Puigdemont; admiten un error de Génova por el momento en el que se ha desencadenado la polémica, a las puerrtas de las gallegas.

Sin embargo, en San Telmo temen más la repercusión que pueda tener este revuelo mediático sobre la imagen del PP y su líder con respecto a la ciudadanía, que a la incidencia que pueda tener sobre los resultados de las elecciones del próximo domingo en Galicia. 

Todos los barones coinciden en señalar que el error no fue más que un desliz y que el efecto será mínimo. "No estamos preocupados porque la confianza en Feijóo con este tema es absoluta e inquebrantable", zanja un presidente con mando en plaza. "Mucho ruido, pero al final, no es no; lo importante es que nuestra posición es la misma", añade otro. 

Este lunes, en público, Alberto Núñez Feijóo terminó de enterrar la polémica. En un mitin en Galicia, declaró: "Yo no soy Pedro Sánchez. Yo no acepto la amnistía ni la aceptaré. No acepto los indultos ni los aceptaré". Unas palabras que vinieron a corroborar todo lo defendido ayer por los barones, que dan por concluido el embrollo.