"Descanse en Paz el más grande de los grandes del cine en España. Siempre fue y desde hoy será Polvo de Estrellas", así se ha despedido en la red social X el periodista y crítico de cine Carlos Pumares, fallecido esta noche a los 80 años. 

El crítico vizcaíno era conocido por acompañar las madrugadas del sábado a un gran puñado de cinéfilos con su Polvo de Estrellas, el mítico programa radiofónico y televisivo que se emitió desde principios de la década de 1980 en Antena 3 de Radio, luego en Radio Voz y posteriormente en Onda Cero hasta su cancelación en el año 2000.

En él, Pumares se convirtió en un "entrañable gruñón", así le ha calificado su compañero radiofónico Juan Luis Cano, que contestaba a las llamadas telefónicas y las peticiones de sus oyentes, resolviendo con agilidad e ironía todas las cuestiones que le planteaba la audiencia. Tras la cancelación de Polvo de estrellas en la cadena Onda Cero, Pumares colaboró en el portal Terra con un espacio denominado El monolito de Pumares, en la que él volvía a dar respuestas a las preguntas de los internautas sobre el mundo del cine.

El programa se mantuvo hasta 2004, pero mientras colaboraba como contertulio en el programa Crónicas marcianas con Xavier Sardá hasta su desaparición en julio de 2005. Una decisión que levantó muchos detractores hacia su figura, por considerarla como una mancha en su trayectoria, pero de la que él nunca se arrepintió. 

Anteriormente, Pumares participó en La Tertulia de Santiago Amón, pero destaca su trabajo en el programa La Clave (1976-1993), de José Luis Balbín, donde Pumares, que ya era crítico consolidado y colaboraba con cabeceras como Fotogramas, actuaba como asesor cinematográfico, eligiendo una película que servía para introducir un tema concreto sobre el que posteriormente debatirían los invitados del programa.

En su faceta como guionista escribió películas como Separación matrimonial (Angelino Fons, 1973), Una mujer prohibida (José Luis Ruiz Marcos, 1974), el de la serie televisiva El hotel de las mil y una estrellas (Yagüe, 1978). Aunque destaca la adaptación de la obra de teatro de Jaime Salom, La casa de las Chivas (Klimovsky, 1972), que realizó junto con Luis Garci, con el que coincidió escribiendo crítica en la revista Cinestudio. Pumares también participó en el guion de otra película del director argentino Klimovsky, El extraño amor de los vampiros (1977).

Asimismo, ejerció como productor y distribuidor de arte y ensayo en la empresa astur-catalana Bocaccio Films, crítico de cine en el diario La Razón, presentador en Radio Voz La salud natural, espacio diario sobre medicina natural, y colaborador y contertulio del magacín matinal Sin ir más lejos (Aragón TV), además de tener el programa semanal Veo Cine en el canal Veo 7.

Nacido en Portugalete (Vizcaya) el 29 de septiembre de 1943, Pumares, aunque se licenció en Ciencias Físicas, dejó de lado ese camino para volcarse por el periodismo y la crítica cinematográfica. Compañeros de la profesión, como el periodista de Onda Cero Javier Ares o Moisés Rodríguez, han lamentado la pérdida de un "comunicador bárbaro" y "un maestro de la crítica cinematográfica".