El Cultural

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Cine

'Un bocado exquisito': ambición, corazón y deseo

El danés Cristoffer Boe cuenta la crisis de una pareja de restauradores obsesionados con ganar una estrella Michelín

20 agosto, 2021 11:06

El danés Christoffer Boe fue siempre el espíritu libre del movimiento Dogma danés, esa corriente de finales de siglo liderada por Lars Von Trier que aspiraba a un regreso a un cine “puro” sin música ni saltos temporales. Con películas como Reconstrucción (2003), historia de un romance transformador, o Allegro (2005), donde reflexionaba sobre el dolor y la memoria, se hizo un hueco en los festivales con un cine rompedor que buscaba indagar en el subconsciente. Con un estilo mucho más académico, estrena Un bocado exquisito, donde sigue indagando en los meandros de lo romántico para contarnos la historia de un matrimonio, Maggi (Katrine Greis-Rosenthal) y Carsten (Nikolaj Coster-Waldau), dos cuarentones guapos y exitosos que aspiran a ganar una estrella Michelín con su restaurante de Copenhague, él como chef y ella como gerente.

El amor y la ambición se mezclan en una relación que una vez fue turbulenta y que con el paso de los años se ha ido desgastando. Más que un matrimonio, parecen socios y ambos sufren también porque su dedicación al negocio les quita tiempo para estar con sus hijos pequeños. Boe siempre ha sido un refinado esteta y la película tiene una fotografía espléndida con tonos rojizos, además utiliza de manera constante la profundidad de campo para cambiar el ritmo emocional de las secuencias. La verdadera protagonista es Maggi, una mujer de media edad con todo para ser feliz que se siente insatisfecha por motivos que tampoco comprende y se lía con un joven empleado.

UN BOCADO EXQUISITO | Tráiler español HD

Construida a modo de sucesivos flashbacks, la película muestra un dilema muy contemporáneo como es la enorme dificultad de muchos matrimonios con hijos para ocuparse de sus carreras sin sentir que están abandonando a sus familias. El mundo de la alta cocina sirve al director como metáfora de una sociedad competitiva en la que solo ganan quienes son capaces de realizar los máximos sacrificios para conseguir la excelencia. Narrada con buen pulso y bien interpretada, Un bocado exquisito es una película notable sobre las relaciones familiares contemporáneas.

@juansarda