Image: Jaime de la Jara, errores actuales

Image: Jaime de la Jara, errores actuales

Exposiciones

Jaime de la Jara, errores actuales

The Navel

14 mayo, 2010 02:00

Key, 2010

Galería Fúcares. Conde de Xiquena, 12. Madrid. Hasta el 19 de junio. De 2.000 a 4.500 E.


El propósito fundamental que orienta la obra de Jaime de la Jara (Madrid, 1972) mantiene un claro componente ético. Su práctica multidisciplinar radica en enfrentarse y destruir -en deconstruir y descontextualizar- objetos e iconos de nuestro entorno. El artista utiliza esos objetos cotidianos como representación simbólica de apreciaciones erróneas que los hombres heredamos y conservamos en nuestra memoria, y que condicionan nuestro comportamiento. Se trata de un programa de registro estético complejo y difícil, apoyado sobre el dicho clásico de que "equivocarse es propio de cualquier hombre, pero perseverar en el error es propiedad exclusiva del necio".

Así lo pone en evidencia esta exposición que presenta los trabajos más recientes de De la Jara. En ellos, el artista declara que su investigación se centra en interpretar los perfiles de ficción, falsedad y error implícitos en la realidad. Por eso titula esta muestra The Navel (El ombligo), recordando una frase de Sir Thomas Browne, quien afirmaba que "todavía vive en mí el hombre sin ombligo", aludiendo a Adán, el hombre que erró primero e hizo de los errores algo "lícito", en tanto que derivado de las limitaciones humanas.

De las tres series de trabajos que se han seleccionado para esta exposición, la titulada Keys (Llaves) es la de desarrollo más rico, presentándose en versiones de escultura, vídeo y fotografía. En este ciclo, Jaime de la Jara ha elegido un objeto doméstico de uso muy común -el interruptor eléctrico o llave de la luz-, lo ha sometido a un proceso de destrucción -aplicándole un foco de calor muy intenso que lo derrite- y utiliza finalmente esas formas alteradas, esas deformaciones que adopta el interruptor a través de las fases sucesivas del fenómeno destructivo, para establecer con ellas una metáfora visual o un símbolo que resulte expresivo de los errores importantes -u "ombligos"- que tantos hechos y circunstancias actuales acusan.

Así, por una parte, el artista presenta las formas imprevistas de estos interruptores alterados como pequeñas y singulares esculturas fundidas en broce y cromadas; como imágenes videográficas de un proceso singular de "deconstrucción", o como detallados testimonios fotográficos de la sorprendente plasticidad carnosa, orgánica, que puede adoptar una estructura mecánica artificial. Pero, al mismo tiempo, este conjunto de Keys de Jaime de la Jara aprovecha la fuerza simbólica que llevan implícita las formas seriamente alteradas de un aparato o dispositivo eléctrico, y nos alertan vivamente, por sí mismas, de que -como expresa el dicho popular- "se nos están fundiendo los plomos".

Con todo, De la Jara sigue declarando hoy su preferencia por que la obra de arte mantenga "la intención de desasosegar con los hechos, sin tratar prioritariamente de explicarlos". Así lo demuestra en las otras dos series que aquí presenta. La titulada Flags (Banderas) está basada en la imagen de los radiadores, cuya sucesión desplegada de tubos "recuerda" el flamear de una bandera. En estas reconstrucciones veristas (en madera y escayola) de los aparatos metálicos de calefacción, De la Jara vuelve a mostrar su interés por las experiencias creativas de la escultura objetual norteamericana de los sesenta, aunque no tanto por su recuperación neodadaísta, sino por su afán de desbordar los límites del objeto para extenderse a la creación de "ambientes" a través de la instalación.

Posiblemente sea ésa la vocación determinante de De la Jara, como podemos comprobar incluso en su labor fotográfica. Y así, en su conjunto de fotos en blanco y negro sobre la imagen de la Ventana, la seducción que estas pequeñas obras desprenden radica en el juego de espacios ampliados que provoca la presencia de la ventana subrayada como "hueco", en el que confluyen lo constructivo y el vacío, el interior y lo exterior, lo cerrado y lo abierto, la sombra y la luz, lo preciso y lo ambiental, lo objetivo y el reflejo… Punto final precioso, para una exposición diferente.